Franck Ribéry llegó en verano de 2007 al estado de Baviera para defender al conjunto muniqués, un equipo que se sufría de una reconstrucción en aquél entonces y necesitaba de sabia nueva para transformar ese Bayern en un equipo temible. En el mismo verano llegaron Luca Toni, un ariete de enorme presencia goleadora, y el eterno Miroslav Klose, además de contar con jugadores que, poco a poco, se irían ganando un papel más importante en los anales del club; Scweinsteiger y Philipp Lahm. En un contexto así, el joven francés- que por aquel entonces tenía 24 años- llegaba para dar verticalidad a un equipo demasiado anquilosado. Los frutos tardarían en llegar, pero llegaron.

Poco después de su llegada, el Bayern, que había quedado fuera de la Champions League e, la 06/07, quedando en cuarta posición, recuperaron el cetro perdido en la Bundesliga y se alzaron campeones. Volvían a Europa. Aún así, estaban lejos de ser un equipo que ensombreciera al Barcelona, Chelsea o Manchester United o Liverpool. Eso hizo que el francés se replantease su decisión y meditase irse a otros clubes, tal y como ha asegurado en Kicker “tuve ofertas de los más grandes de Europa y estuve a punto de irme, si no lo hizo fue porque Rumenigge y Hoeness me convencieron”. Ahora se ha visto que, sin saber que hubiera logrado fuera del Bayern de Múnich, su carrera ha sido impecable, consiguiendo, por citar los más importantes, seis Bundesligas y una Champions. Aún le queda para rato.

Ribéry ha asegurado que “el Bayern será mi último equipo en Europa, mi familia y yo estamos muy contentos aquí”, recalcando el buen trato recibido por el club”. Además, ha vaticinado una posible relación club- jugador una vez se haya retirado, veremos si como un futuro entrenador de fútbol base. Su próxima temporada será la décima en el club con el claro objetivo de seguir sumando títulos, sobretodo la orejona, el sueño de los alemanes. Des de que Ribéry llegó han caído en dos finales y en tres semifinales de forma consecutiva. Tan solo en 2013 lograron alzarse con el trofeo y él fue nombrado mejor jugador de Europa por la UEFA. Sigue siendo un jugador importante para Ancelotti, aunque sus problemas físicos le han lastrado los últimos años. Su talento, su entrega y su capacidad de desborde en el uno contra uno son vitales para un Bayern de Múnich que, con Ancelotti, ha buscado verticalizar su juego. Veremos hasta cuando le aguantan las piernas, pero Ribéry ya ha declarado que en el Bayern es donde se va a retirar.