Ambos equipos tenían la oportunidad de pelear por los puestos europeos siendo rivales directos en la tarde del domingo. El Schalke 04 está haciendo una temporada rara, ya sea por las lesiones que ha estado sufriendo durante todo el año o por la imagen tan diferente que ha estado dando. El Friburgo partía octavo en el comienzo del encuentro, haciendo grandes partidos y sorprendiendo. Fue el equipo que se llevó el gato al agua
Una primera parte con dos caras
Primera parte en la que los dos equipos mostraron una gran igualdad, aunque el control fue para cada uno en distintas fases del encuentro. El Schalke 04 se hizo con el dominio los primeros veinte minutos, hasta que el Friburgo encontró el camino al gol; desde entonces el control fue para los locales.
La formación de Markus Weinzierl comenzó muy bien el partido, dando una imagen de un equipo ordenado y concentrado además de tener una presión muy alta sobre el rival con las líneas muy adelantadas. La presión buscaba el error del conjunto local que, basó su juego en el toque del balón, sin rifarlo en ningún momento y solo recurriendo al balón en largo cuando fue estrictamente necesario.
En los primeros diez minutos el juego estuvo concentrado en la zona central del terreno de juego, desconociendo por completo a los porteros, buscando desgastarse en esa zona. El Schalke 04, a pesar del dominio en la primera fase del partido, no tuvo la incisión y la continuidad necesaria en ataque como para poder crear ocasiones claras. A partir del minuto 20, el Friburgo comenzó a dar la sensación de peligro sobre la portería de Fährmann, primero por medio de un córner y después en el minuto 22, con el primer gol de Niederlechner. Una ocasión para Leon Goretzka terminó en un penalti a favor del Friburgo El equipo visitante dejó que Niederlechner jugara en la banda, creando la jugada, y que él mismo disparara desde el área chica poco después. La acción estuvo muy mal defendida: prácticamente los jugadores se quedaron contemplativos ante la jugada. No necesitó mucho para llegar el Friburgo.
Tras este gol, comenzó la fase de control del Friburgo, que continuó empleando su juego de toque ante un Schalke 04 ya desordenado e impreciso. Así, en el minuto 30, una jugada del Schalke que se presentaba como una ocasión para Leon Goretzka terminó en un penalti a favor del Friburgo. El jugador alemán se durmió y perdió el balón, dando inicio a la contra del Friburgo. Philipp se cerraba en el borde del área del Schalke 04, y Kolasinac cometió el error de hacerle penalti —el jugador del Friburgo no tenía opción de remate—, un minuto después, Niederlechner hacía el segundo.
El Friburgo demostró un buen juego en toda la primera mitad, no se mostró débil en ningún momento, no sintiéndose presionado para nada; el Schalke 04, tras el primer gol, se mostró más perdido y desordenado. Le funciona bien a los locales el manejar el balón de la manera en que lo estaban haciendo. Sin embargo, y a pesar de que el Friburgo fue mejor, el encuentro estaba bastante equilibrado, pero los locales tuvieron la efectividad y la puntería; y el Schalke cometió errores en defensa graves.
El Friburgo y la solidez: compañeros de trabajo
La segunda parte se basó en el control total del partido del Friburgo tanto con balón como sin él. A pesar de que el Schalke 04 tuvo el balón la mayoría del tiempo en la segunda parte, el Friburgo no sufrió en ningún momento, pasando en el partido exactamente lo que querían.
El equipo local tuvo oportunidades suficientes para poder sentenciar el partido, incluso para golear al Schalke 04. Sin embargo, no tuvieron la pegada de la primera mitad y se toparon con Fährmann, que actuó de buena manera para evitar todos los intentos de Niederlechner, Philipp, o Petersen —que desde su entrada dio varias ocasiones al Friburgo—. Estuvieron muy bien organizados, y predijeron bien las jugadas de un desmotivado e impotente S04, que se movió con un juego tan lento que cada vez que hacían un centro o un pase tenían encima a un hombre del Friburgo antes de recibir el esférico.
Leon Goretzka, junto con Nabil Bentaleb, fueron los únicos que lo intentaron en las filas del Schalke 04, incluso cuando Markus Weinzierl incluyó una formación con tres delanteros en busca del gol y de un cambio de registro que nunca llegaron.
Partido perfecto del Friburgo, que al final se le quedó un marcador bastante corto, ya que pudo sentenciar en cualquier momento y que se coloca en quinta posición. El Schalke 04 tiene que encontrarse en esta recta final si no quiere quedarse en tierra de nadie, no obstante, lo tiene muy complicado.