La Mannschaft ha llegado a la final de la Eurocopa Sub-21 donde se verá las caras con ‘La Rojita’. Alemania ha hecho una gran competición hasta ahora habiendo perdido tan sólo un partido —Italia-Alemania, en la jornada 3 de la fase de grupos (1-0). Tras ganar a Inglaterra en los penaltis el pasado martes (2 (3-4) 2), ahora está en busca de alcanzar su próximo objetivo: hacerse con el trofeo europeo.

La selección de jugadores encargada de representar a Alemania en este torneo ya juegan en la máxima categoría, y han hecho muy buena temporada con sus respectivos equipos. Esta alineación es muy diferente a la que se vio en 2009, cuando Alemania logró hacerse con la victoria en la final del Europeo Sub-21 de Suecia, para entonces, los nombres de Neuer, Höwedes, Boateng, Khedira, Özil, Wagner, Hümmels o Castro, figuraban en el XI ideal frente a los Pollersbeck, Kempf, Jung, Meyer, Arnold, Gnabry o Selke, que lo hacen en la actualidad.

Foto. UEFA/Getty
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Pero, a pesar de que son equipos muy diferentes, todos estos jóvenes demostrarán lo grandes que llegarán a ser en la final del próximo viernes, 30 de junio, donde se enfrentarán a una rival fuerte, la España Sub-21 de Albert Celades.

La Eurocopa Sub-21 de 2009: Un sueño hecho realidad

A Alemania solo le hacía falta ganar el Europeo para completar un palmarés digno de admiración. El conjunto dirigido entonces por Horst Hrubesch lo había intentado tres veces antes de 2009, sin ningún éxito. Sin embargo, 2009 se firmó como un año glorioso para los alemanes.

El combinado germano comenzó estando en un grupo complicado, en el que tendría que enfrentarse a Inglaterra Sub-21, donde podíamos encontrar a jugadores como Milner, Cattermole, Kieran Gibbs o Theo Walcott, entre otros; a España Sub-21 con Nacho Monreal, Javi Martínez, Raúl García, Bójan Krkic o César Azpilicueta; y a Finlandia Sub-21 con Mehmet Hatemaj, Kasper Hämäläinen o Jukka Raitala. Sin duda, ninguno de estos tres equipos iba a hacer que el pase por la competición de Alemania fuera todo un camino de rosas.

El primer partido de la Mannschaft fue ante España, dirigida por Juan Ramón López Caro, con la victoria de Inglaterra sobre Finlandia (2:1 —Lee Catermole, Micah Richards; Tim Sparv) como telón de fondo. Los alemanes sólo consiguieron llevarse un empate a cero. A pesar de que la selección alemana jugó mejor y tuvo numerosas ocasiones de peligro, un maravilloso Asenjo (portero del Valladolid entonces) salvó a una España que se mostró incómoda durante todo el encuentro.

El siguiente partido sería contra Finlandia, a la cual se la consideraba la ‘princesa’ del grupo. Aunque sufrieron en la primera mitad debido a que los visitantes fueron mejores, en la segunda parte los germanos resurgieron y lograron llevarse los tres puntos en la victoria por 2:0 con goles de Benedikt Höwedes y de Ashkan Dejagah. No obstante, Inglaterra también ganó su partido ante España lo que le hacía permanecer invicto y en primer lugar con seis puntos (0:2 —Fraizer Campbell, James Milner).

Foto. UEFA/Getty
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Y entonces, en el último encuentro de la fase de grupos, Alemania tuvo que enfrentarse a quien sería su rival en la final del Europeo aquel año, Inglaterra. El conjunto de Horst Hrubesch necesitaba un punto para clasificarse ante un equipo que ya lo estaba. Alemania logró marcar muy temprano en el minuto cinco, lo hizo Gonzalo Castro (actual jugador del Borussia Dortmund), sin embargo, el equipo inglés dirigido por Stuart Pearce, empató en el minuto 30 de mano de Jack Rodwell (Sunderland) para hacer el empate que quedaría en el marcador hasta el pitido final. 

Foto. UEFA/Getty
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Con este balance de dos empates y una victoria, Alemania clasificaba como segunda de grupo con cinco puntos por detrás de Inglaterra que lo hacía con siete. No obstante, el cruce tampoco parecía tan favorable para los alemanes que al quedar segundos tuvieron que enfrentarse a Italia —la primera del grupo A con siete puntos—, Inglaterra se enfrentaría a Suecia en las semifinales.

Alemania-Italia: semifinal de infarto

Italia llegaba al partido como pentacampeona de la Eurocopa sub-21, pero eso no evitó que fallara muchas ocasiones y que acabara lamentándolo cuando Andreas Beck marcó el único gol del partido y el que le dio el pase a la final a Alemania.

El técnico italiano, Pierluigi Casiraghi, optó por sacar a su tridente de nuevo, ya que Mario Balotelli cumplió con su encuentro de sanción, por lo que acompañó en el ataque a Sebastian Giovinco y Robert Acquafresca. El entrenador germano tampoco se quedó atrás y sacó a Mesut Özil y a Ashkan Dejagah como sus hombres referencia en lo ofensivo.

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A pesar de que el combinado italiano fue el que comenzó dominando el choque, Alemania contó con la primera ocasión alrededor de los cinco minutos de juego procedente de Benedikt Höwedes. El partido tras el arreón inicial se igualó aunque las ocasiones se tumbaron del lado de Italia, sin lograr culminarlas. Sin embargo, sí lo hizo Beck casi al comienzo de la segunda mitad que realizó un lanzamiento desde fuera del área al que no pudo llegar Consigli.

Así fue como Alemania lograba clasificarse para la final, donde se vería de nuevo las caras con Inglaterra.

Una final gloriosa que vale oro

Tras el partido todo el mundo coincidió en lo mismo, “Mesut Özil fue la guía de Alemania en la final”, y no es para menos, el alemán de tan sólo 20 años, logró un gol y dio dos asistencias.

El comienzo fue lento, ambos equipos se tantearon para buscar tanto los puntos flacos del rival que tenían al otro lado del terreno de juego, como el dominio del centro del campo, donde se marcarían las diferencias. Aunque el equipo alemán perdonó varias ocasiones, algunas de ellas del ya mencionado Özil, en el ecuador del primer tiempo no perdonó y Gonzalo Castro convirtió el primero con una asistencia de la estrella germana. El combinado de Hrubesch pudo haberse ido con una mayor ventaja al descanso.

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No obstante, esto no duraría mucho ya que al comienzo de la segunda mitad, Özil convertiría el 2-0 con un lanzamiento de falta muy lejano que Loach no pudo parar. Tras los dos goles y con el tiempo corriendo, Inglaterra comenzó a impacientarse siendo incapaces de llegar a la portería alemana lo que hizo que cometieran más errores y que llegara el 3-0 en el minuto 79 de mano de Wagner —quien ya había contado con ocasiones claras en los minutos anteriores. Alemania sentenció el partido en el minuto 84, con un gol del propio Wagner que le daba el 4-0 a Alemania y mataba a una maltrecha Inglaterra.

España Sub-21: la tetracampeona de Europa, un rival brillante

La España de Albert Celades llega a la final después de haber disputado una enorme competición, con Saúl Ñíguez y Marco Asensio siendo los pilares del equipo —dos hat-tricks entre los dos —, España ha conseguido llegar sin haber perdido ningún partido. El combinado español se enfrentó en la fase de grupos a Portugal, Serbia y Macedonia, y consiguió los 9 puntos con un balance de goles de 9 a 1.

Foto. UEFA/Getty
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En la semifinal contra Italia del pasado miércoles, España consiguió la victoria por 3-1 con un Hat-Trick de Saúl Ñíguez y un solitario gol de Bernardeschi para Italia, que no sirvió de mucho. Ahora se verá las caras con Alemania, a la que en los últimos tres encuentros ha ganado en dos ocasiones y han empatado en otra. 

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