Frank Ribéry, es de sobra conocido por todos los amantes del futbol gracias a sus actuaciones sobre los terrenos de juego, tildadas en alguna ocasión, como soberbias. Comenzó su carrera en el Boulogne, el equipo de su ciudad natal. Tras destacar en sus filas, sus maletas tomaron rumbo a Turquía. Pese a que Frank destacó más por una vida sórdida con algún escándalo policial, logró conseguir la Copa de Turquía en el año 2005, vistiendo la elástica del Galatasaray. Después, volvió a Francia, donde el Olympique de Marsella se haría con sus servicios. En 2007, ficharía por el Bayern de Múnich, en un verano en el que los rumores le acercaban a clubes como Barcelona y Real Madrid.

Rybéry levantando la Champions League | Foto UEFA

Con el conjunto Bávaro logró la mayoría de títulos posibles por alcanzar para un jugador de fútbol. En su selección, siempre ha destacado por su juego incisivo y rezumante de velocidad. Ha sido internacional hasta en ochenta y una ocasiones, marcando hasta en dieciséis ocasiones con la elástica de ‘Les Blues’. En el mundial de 2006, Francia y Ribery lograron ser subcampeones del torneo, perdiendo la final frente a Italia.  Este partido, quedó en el imaginario de todo amante del mundo futbolístico, ya que en él, ocurrió la jugada no exénta de  polémica en la que  Zinedine Zidane golpeó con la testa a un jugador del equipo contrario, manchando así, su despedida como futbolista.

Steven Ribéry, hermano de Frank, parece seguir sus pasos, al menos en su génesis como jugador profesional. El joven extremo derecho de veinte años de edad, ha firmado un contrato con el US Boulogne. Este conjunto se ha hecho con sus servicios por demostrar ser un jugador polivalente, ya que también puede ocupar las posiciones de extremo izquierdo o medio centro ofensivo, gracias a que maneja bien el cuero con ambas piernas. Es veloz, y ha desmostrado ostentar potencial goleador al destacar en esta faceta en sus anteriores clubes.