Era un día lluvioso en París. Se respiraba un ambiente tenso. El colista visitaba el Parque de los Príncipes para evaluar la crisis que atraviesa el PSG, con su técnico Unai Emery como principal señalado. Los locales respondieron bien al ultimátum endosando una amplia goleada al Lorient por 5-0. Gran noticia para Unai, que podrá comerse el turrón estas vacaciones tras el gran partido de su equipo. No obstante, el técnico debe ser consciente de la exigencia de la afición parisina, que no contempla al hoy colista como vara de medir.

Paciencia y goles

La primera mitad comenzaba con el aplastante dominio de los locales aunque sin llegar a generar claro peligro sobre el área rival. Tan solo las internadas de Meunier, que funcionaba como extremo más, provocarían algo de peligro. Fue en una de esas internadas cuando el lateral belga cazó un balón que venía votando y remató al palo cruzado ante la atenta mirada de Delecroix para anotar el primero de la noche. No se lo creía el guardameta de los lorientinos, que acababa de recibir el gol de la jornada en Francia.

Con la llegada del gol, los visitantes apenas reaccionarían y esperarían juntos atrás al PSG, que seguiría intentándolo con centros por las bandas. Lucas Moura intentó coger de nuevo el papel de protagonista y protagonizó un par de acciones de peligro que no acabarían fructificando. Y a la tercera fue la vencida. Al filo del descanso, el extremo carioca agarró el balón en la banda derecha que tanto daño estaba haciendo al Lorient, la puso rasa al área pequeña y Toure se encargó de meterla en su propia portería. Le quitaba el gol el central a Cavani, que llegaría por detrás y se golpearía duramente con Delecroix.

De vacaciones antes de tiempo

Entraba con ganas el Lorient, un centro-chut envenenado del recién entrado Cabot lo despejaba Trapp con los puños. Parecía que los visitantes iban a apretar tras la vuelta de los vestuarios, pero la verdad es que esa acción sería la más peligrosa del Lorient en la segunda mitad. Lo cual resulta sorprendente, ya ni que ni mucho menos el PSG iba a realizar un fútbol perfecto.

Con muy poco el equipo parisino generaba peligro. Daba la sensación de que algunos jugadores lorientinos se habían ido ya de vacaciones. En el minuto 50 Locas Moura votaba un saque de esquina que Thiago silva remataba cruzado para hacer el tercero de los locales. Tras el gol, todas las opciones del club lorientino se esfumaban. Prueba de ello es que Casoni optó por la sustitución de Moukandjo a los siete minutos de comenzar el segundo tiempo.

Daba la sensación de que algunos jugadores lorientinos se habían ido ya de vacaciones.

Meunier era un extremo más y Nkunku creaba mucho peligro con sus acciones desde la frontal. En una de estas, el joven canterano del PSG daba un pase a Edinson Cavani que lo dejaba solo ante Delecroix.  El meta visitante derribaba al punta y cometía penalti. Un penalti que el ariete charrúa se encargaría de transformar para irse de vacaciones con la increíble cifra anotadora de 18 tantos.

El dominio parisino iba a continuar. Un pase desde 40 metros de Verratti en profundidad dejaría totalmente solo a Lucas Moura. El brasileño controlaba bien el balón con la puntera y batía con una perfecta vaselina a Delecroix.

Antes de acabar el partido, Thiago Silva lo intentaría de chilena tras múltiples rechaces en un córner. Una frivolidad que contaba con la colaboración de la defensa del Lorient, que parecía de patio de colegio. El ritmo del partido era bastante bajo, propio más de una pachanga navideña. Aunque para navidad la que pasará Emery en París, que de momento se salva de la quema.