Si hay un dominador claro de las competiciones coperas en Francia durante los últimos años ese es el PSG, que esta semana se ha vuelto a meter en una nueva final de la Copa de la Liga tras batir al Girondins en Burdeos por un contundente 1-4 con dobletes de Cavani y Di María.

En esta nueva final deberá doblegar a un rival tan duro como es el Mónaco de Jardim y Falcao, que ayer se metía en la gran final tras batir por 1-0 al Nancy con gol del colombiano. No tendrá por tanto un rival asequible el cuadro parisino para coronarse por cuarta vez consecutiva en esta competición que ha dominado con mano de hierro durante los últimos años de la mano de Laurent Blanc.

Los parisinos están mostrando una superioridad tremenda en la competición copera, donde además de coleccionar títulos asombra su facilidad para doblegar a sus rivales a partido único sin apenas resistencia, algo que sin embargo no se traslada a otras competiciones como la Ligue 1 o la Champions League, donde los de Emery se están encontrando con más trabas para dominar los partidos.

El PSG es el primer club que enlaza cuatro finales consecutivas en esta competición, superando al Olympique de Marsella de hace unos años, que logró disputar la final de forma consecutiva entre 2010 y 2012, además de sumar 15 victorias consecutivas en la Copa de la Liga, 26 si sumamos las de la Copa de Francia, donde no cae desde enero de 2014, donde sufrió su última derrota ante el Montpellier por 1-2.

El club de la capital francesa va a disputar su octava final copera, donde cuenta con seis triunfos y una sola derrota en las finales anteriores, ya que sólo cayó en la final del año 2000 disputada ante el Gueugnon. Será la final número 22 contando las de la Copa de Francia, donde el club parisino ha ganado 10 títulos habiendo caído en 4 finales.

Cavani, tras el doblete firmado ante el Burdeos, se convierte en el máximo realizador de la Copa de la Liga con 10 tantos en 12 encuentros e iguala a goles con el máximo realizador del club parisino, el portugués Pauleta.