Se disputaba un nuevo Derbi du Rhône, duelo al que volvieron a dar vida una vez más el Saint Ètienne y el Olympique de Lyon, quienes cerraban además la jornada. Ambos venían de quedar eliminados de los dieciseisavos de final de la Copa de Francia, "los verdes" fueron apabullados por el Auxerre de la Ligue 2 (3-0), mientras que "los leones" sucumbieron en el clásico olímpico ante el Marsella (2-1). Por lo que conseguir una victoria en el Derbi era de vital importancia para seguir soñando con conseguir la clasificación a alguna competición europea.


El equipo de Christophe Galtier, por Ligue 1 viene de golear de visitante al Toulouse por 0-3, con un doblete de Roux y otro tanto de Monnet Paquet. Por su parte el Lyon en su último partido liguero sucumbió en su casa ante el Lille, quien lo superó en muchos momentos del partido y tuvo en Benzia (ex Lyon) a la figura del compromiso, pues el argelino marcó los dos tantos con los que el equipo de Patrick Collot derrotó al conjunto dirigido por Burno Génésio.

Para este partido, el local salía a la cancha con un 4-3-3, con Pogba y Perrin de novedades en la línea defensiva, más Saivet, Veretout (volvía al once tras cumplir una sanción) y Pajot en la mitad de la cancha, dejando en ofensiva un tridente conformado por Monnet-Paquet, Soderlund y Hamouma. Ruffier, Tannane, Beric y Soderlund volvían a ser baja en el equipo por lesión.

Bruno Génésio respondía con el mismo esquema, destacando la presencia de Jallet en el lateral derecho, así como el mediocampo conformado Por Darder, Gonalons y Tolisso; arriba, el tridente ofensivo Fekir, Lacazette y Depay, quedándose en la banca Valbuena. El defensor N'Koulou era baja por estar disputando a esa misma hora la final de la Copa Africana de naciones con su selección de Camerún.

Superioridad abismal del local, errores imperdonables del visitante

El mosaico con el que los locales esperaron a los visitantes. Foto: asse.fr.
El mosaico con el que los locales esperaron a los visitantes. Foto: asse.fr.

Les Verts marcaron por primera vez esta Ligue 1 dos goles en la primera parte, que les bastó para vencer a sus eternos rivales. Monnet-Paquet adelantaría a los suyos a los 9', cuando el partido recién se estaba iniciando; un mal pase de Yanga Mbiwa para Mammana no podía ser controlado por el defensor argentino. El balón era robado por Soderlund, éste se la dejaba a Saivet, quien mandaba un pase filtrado para un Monnet-Paquet que batía con absoluta tranquilidad a Lopes para colocar el 1-0 del compromiso.

El partido empezaba de maravilla para el Saint Étienne, y muy mal para el Lyon. Minutos más tarde, y Tolisso estrellaba un cabezazo en el travesaño de la portería defendida por Moulin, pero eso sólo sería un espejismo de lo que estaba pasando en el encuentro, pues era el Saint Étienne el que tenía la pelota y se generaba las mejores chances, ejerciendo un imponente dominio sobre el Lyon.

El 2-0 llegaría a los 22' y sería practicamente la lápida para unos "leones" que seguían sin encontrarse en el terreno de juego, y eso el local lo aprovechaba. Soderlund filtraba un tremendo pase entre líneas para Hamouma, quien dejó por los suelos a Lopes y a su salida desesperada para decretar el 2-0 en el marcador y la euforia total en el estadio. Mammana y Yanga Mbiwa se esforzaron para que el balón no entrara, pero sus esfuerzos fueron en vano.

Los leones se encuentran con una muralla llamada Moulin

Nadie pudo con Moulin. Foto: asse.fr.
Nadie pudo con Moulin. Foto: asse.fr.

En la segunda mitad, las cosas cambiarían de gran forma en el Stade Geoffroy-Guichard, pues el Lyon saldría con otra disposición, entendiendo que estaba jugando un clásico y que tenía que proponer más, tenía que demostrar más y tenía que dejarlo todo en la cancha; mientras que el Saint Étienne entraba algo relajado, entendiendo quizás que con una ventaja de dos goles y con la superioridad que había ejercido en la primera parte, era muy difícil que el Lyon pudiese reaccionar.

Génésio quitaba a un desaparecido Fekir y mandaba al terreno de juego al argelino Guezzal, lo que sería un cambio muy acertado. Guezzal pudo marcar el descuento recién comenzado el segundo tiempo, pues recibía un buen pase de Lacazette, se quedaba sólo ante Moulin, pero su remate era despejado de gran forma por el meta local.

Avanzaba el trámite y el Lyon seguía llegando con peligro al área del Saint Étienne, en esta ocasión era Depay el que quedaba en buena posición para definir, pero su remate era despejado con la pierna derecha de Moulin, quien a esas alturas parecía ser imposible de batir, salvando dos acciones decisivas que evitaban la reacción del visitante.

Sobre el final del encuentro, el Lyon se quedaría con nueve jugadores. Primero, Guezzal veía su segunda tarjeta amarilla por una fea entrada sobre Lemoine, y luego, era el mismo jugador del Saint Étienne el que recibía una entrada criminal con las dos piernas de Tolisso, y el juez le sacaba la roja directa, merecida por cierto.

Con esta importante victoria el Saint Étienne se mantiene en la quinta ubicación con 36 puntos, pero le recorta distancias a un Lyon que conserva la cuarta posición, pero con sólo un punto de ventaja por sobre "los verdes" (tienen un partido menos). Por la fecha 24, el Saint Étienne estará visitando al Niza, mientras que el Lyon recibirá al Nancy.