La gran campaña protagonizada por el Niza en lo que llevamos de temporada ha traído consigo un hito histórico en el club. El club ha logrado convertir el Allianz Rivier en un fortín donde conseguir la gran mayoría de sus puntos actuales. El pasado viernes, tras la victoria en casa por dos goles a uno ante el Montpellier, el Niza certificaba una racha de un año invicto en su campo, conformando un total de 16 victorias y tres empates.

El Bastia, último asaltante

La última derrota de los locales en casa se remonta hasta el 26 de febrero de 2016, disputándose la vigesimoctava jornada de liga de la temporada pasada, la 2015/2016. En este encuentro, el Bastia venció al conjunto local por dos tantos anotados de forma seguida (Diallo en el 61 y Ayité en el 64 hicieron los goles para los visitantes). 

Este partido sirvió como punto de inflexión para los nicenses, que desde entonces no han vuelto a perder ningún partido como local. Además, durante esta temporada ha conseguido 36 de 42 puntos posibles jugando como local, con un global de once victorias y tres empates.

Y es que la hinchada local ha sido muy determinante en la consecución de esta dinámica. La afición ha llevado en volandas al equipo, y no pierde la ilusión en un conjunto que solo permanece vivo en liga tras haber sido eliminado de la copa francesa en dieciseisavos y de la UEFA Europa League en fase de grupos.  Aun así, el Niza se asienta como el tercer mejor visitante de lo que llevamos de Ligue 1, datos que le han llevado hasta la tercera posición del campeonato, a solo tres puntos del liderato.

Los nicenses intentarán aferrarse a esta buena racha para conseguir el mayor número de puntos posibles en casa y poder seguir luchando por copar la primera plaza del campeonato. Para prolongar este año entero imbatido, el Niza deberá puntuar ante el Caen dentro de dos jornadas.