La Coppa Italia no es una competición muy dada a las sorpresas por su formato. Sin embargo, tras haber vivido un intenso 2016 en lo que a la competición copera en Italia se refiere, esa idea ya no es válida. La Juventus se alzó con el trofeo tras superar por el camino a Milan, Inter, Lazio y Torino, sin encajar goles en ningún partido salvo la locura de la vuelta de semifinales ante los ‘nerazzurri’ que acabó en penaltis. La edición de esta temporada va encaminada a otro título de alguno de los grandes, ya que así lo dictamina el formato de la competición.

Un formato muy elitista

Antes de comenzar a relatar lo sucedido, conviene detenernos en el formato de esta competición, pues es bastante peculiar. Si la Copa del Rey española recibe críticas porque es a doble partido, porque los equipos grandes no se enfrentan entre sí hasta octavos como mínimo y por un sinfín de cosas más, la Coppa no se queda atrás.

36 equipos, diez de la Serie D y 26 de la Lega Pro, comienzan su andadura allá por el mes de julio, a un partido. Los 18 supervivientes se cruzan con los 22 equipos que componen la Serie B para, también a un partido dejar en 20 los supervivientes. Esos 20 se juntan con los doce equipos que en la Serie A anterior quedaron entre los puestos 9º y 20º para convertirse, después de dos rondas, en solo ocho equipos. Esos ocho equipos, de manera totalmente meritoria, juegan a un partido contra los ocho primeros de la Serie A anterior. Los cuartos son a un partido, las semifinales a dos, y la final a uno. Pero lo cierto es que la Coppa tampoco les hace perder el sueño a los italianos, que bastante tienen con el campeonato doméstico, la Champions y la ‘Azzurra’.

La Coppa de los modestos sobrevivió a los octavos

Comenzó el año y llegó la Coppa, y con ella las sorpresas. En octavos de final aguardaban los ocho primeros clasificados de la Serie A 14-15: Lazio, Juventus, Inter, Nápoles, Roma, Genoa, Sampdoria y Fiorentina. De esos ocho, solo los cuatro primeros lograrían imponer su condición de favoritos, con suma comodidad, ante Udinese, Torino, Cagliari y Hellas Verona respectivamente. Las otras cuatro eliminatorias dieron que hablar.

El Milan venció a la Sampdoria, pero lo realmente emocionante e inesperado sucedió en los otros tres partidos. El Spezia venció a la Roma en penaltis (2-4) tras empatar a cero, y el Carpi se impuso a la Fiorentina por la mínima (0-1). La gesta mayúscula fue la del Alessandria, que se había deshecho del Palermo en cuarta ronda en la prórroga (2-3) y se acababa de ‘cargar’ al Genoa.

Unos cuartos para enganchar a todo el mundo

Por lo tanto, entre los ocho mejores se podían observar colosos como el Milan, el Inter, el Nápoles o la Juventus, junto a equipos de Serie B, como el Spezia, o de Lega Pro, como el Alessandria. El sorteo, además, deparó los siguientes cruces: Lazio-Juventus, Nápoles-Inter, Milan-Carpi y Spezia-Alessandria. Un modesto se iba a colar en semifinales.

La Juventus se impuso por la mínima en el Stadio Olimpico gracias a un gol de Lichtsteiner. Un gol de Ljajic y otro de Jovetic le bastaron al Inter para colarse en ‘semis’ al vencer al Nápoles. El Milan venció al Carpi gracias a los tantos de Bacca y Niang, y el partido estrella, el Spezia-Alessandria, se saldó con victoria visitante por un gol a dos. El sueño del equipo de tercera categoría continuaba, y el premio gordo que determinaría su rival en las ‘semis’, ya a doble partido, incluía los nombres de Juventus, Inter y Milan.

De todo menos unas semifinales normales

El sorteo de semifinales deparó a la Juventus con el Inter, y al Alessandria con el Milan. En la ida, la Juventus pareció haber sentenciado en el Juventus Stadium ante el Inter. Un doblete de Álvaro Morata, y un tanto de Paulo Dybala en las postrimerías del encuentro parecían dejarlo todo finiquitado para el partido de vuelta. Sin embargo, el partido de vuelta fue totalmente imprevisible. Allegri salió con un equipo plagado de suplentes (Neto, Rugani, Hernanes, Asamoah, Zaza), y a los 16 minutos el Inter ya ganaba 1-0 gracias a un gol de Brozovic. Perisic marcó el segundo y el propio Brozovic hizo el tercero a ocho minutos del final. En la prórroga la Juventus tuvo ocasiones para poner punto y final al partido, pero fue en los penaltis, con Rodrigo Palacio como villano y Leonardo Bonucci como héroe, donde el Inter se quedó con la miel en los labios.

En la otra semifinal, el Milan solo pudo traerse un 0-1 de la visita al Alessandria, y fue gracias a un gol de penalti de Mario Balotelli. El Alessandria fue soñando con colarse en la gran final al partido de San Siro, pero el partido se les hizo eterno y los goles de Ménez, Romagnoli, nuevamente Ménez, Sabato en propia puerta y Balotelli no pudieron tapar la ilusión desplegada por estos jugadores.

El último servicio prestado por Morata

El Stadio Olimpico sería el lugar elegido para comprobar si la Juventus iba a continuar con su hegemonía, o si, por el contrario, el gigante dormido despertaría de una vez. En la primera parte el Milan fue mejor, aunque las defensas bien situadas de ambos equipos no concedían nada a la parcela ofensiva. Así pasaron 90 minutos sin apenas noticias. Cuando se llegó a la prórroga, Allegri dio con la tecla. En el 109 introdujo a Álvaro Morata en el terreno de juego, quien convirtió en gol el primer balón que tocó tras un centro preciso de Juan Cuadrado. El segundo doblete consecutivo quedó sellado por la Juventus de esta manera tan épica.

Mucha prórroga en la primera ronda

Como sucede con la Champions, que apenas un mes después de jugarse la final ya comienza la primera ronda previa, los equipos de Serie D y Lega Pro comenzaron su aventura por llegar lejos en la Coppa Italia 2016-17 en el mes de julio. Hasta cicno eliminatorias llegaron a la prórroga (tres quedaron resueltas por penaltis), en las cuales salieron vencedores el Maceratese, el Casertana, Seregno, Reggiana y Bassano. Conjuntos de mayor renombre, como el Foggia, el Modena, el Alessandria o el Lecce lograron su pase a segunda ronda. El partido inaugural, que enfrentó al Livorno y al Juve Stabia, acabó con victoria visitante por un gol a tres.

Solo un superviviente superó la segunda ronda

La Serie B al completo entró en la segunda ronda apenas un mes después de jugarse los primeros partidos. Los tres equipos recién descendidos, Hellas Verona, Frosinone y Novara Calcio, accedieron a tercera ronda tras deshacerse de Foggia, Como y Juve Stabia respectivamente. De los equipos que habían logrado pasar la primera ronda, solo uno obtuvo el premio de pasar ambas rondas para enfrentarse a uno de los equipos de Serie A: el Bassano. Este equipo se impuso por dos goles a cero al Avellino, para representar a la Lega Pro en tercera ronda. Equipos como Cesena, Bari, Perugia, Pisa, Vincenza, Carpi o Spezia también se colaron en la tercera ronda.

Batacazos de Udinese y Crotone en tercera ronda

Con la entrada de 12 equipos de la Serie A, las posibilidades de supervivencia de los equipos de abajo se reducía, principalmente, a los choques entre ellos. El modesto Bassano sucumbió con claridad ante la Sampdoria, mientras que de los enfrentamientos entre equipos de Serie B continuaron adelante el Pisa, Novara, Perugia y Cesena, tras vencer respectivamente a Salernitana, Latina, Carpi y Ternana.

La sorpresa llegó con dos equipos de la máxima categoría que cayeron eliminados en esta ronda, ante equipos de categoría inferior: el Udinese sucumbió ante el Spezia por dos goles a tres pese a alinear a hombres como Armero, Fofana o Rodrigo De Paul, mientras que el Crotone tampoco superó su partido ante el Hellas Verona al caer por dos goles a uno.

Goleadas y sorpresas en cuarta ronda

En la última ronda antes de medirse a los ‘cocos’, cinco eliminatorias se decidieron con suma facilidad: Bologna 4-0 Hellas Verona, Sampdoria 3-0 Cagliari, Atalanta 3-0 Pescara, Torino 4-0 Pisa y Chievo 3-0 Novara. El Genoa estuvo a punto de hacer el ridículo ante el Perugia, al que logró superar en un partido de locos que se fue a la prórroga con empate a dos.

Dos equipos de Serie B lograron dar la campanada: Spezia y Cesena. El Palermo, equipo habituado a hacer ridículos ante rivales de menor nivel, fue la víctima del Spezia desde el punto de penalti. Después de 120 minutos de igualdad, Balogh y Goldaniga erraron sus penas máximas. El Cesena se deshizo del Empoli en el tiempo suplementario, con un gol de Rodríguez en el 102.

Octavos: ¿el fin de las sorpresas?

En octavos muere todo. Adiós al imprevisto, a la sorpresa, a la imaginación. Nápoles, Fiorentina, Juventus, Milan, Inter, Lazio, Sassuolo y Roma esperan para decir adiós al aficionado modesto, al humilde, al soñador. ¿O no?

El sorteo de octavos deparó varios choques muy interesantes. La Juventus recibirá al Atalanta, el Milan se enfrentará al Torino y la Lazio al Genoa. Además, el Spezia tendrá el honor de medirse al Nápoles y el Cesena soñará con poner en apuros al Sassuolo. Fiorentina-Chievo, Inter-Bologna y Roma-Sampdoria completan los partidos que se jugarán del 10 al 19 de enero. Pero eso será otra historia. Será 2017.

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