La noche del martes tenía preparado el primer partido de octavos de Coppa Italia. La Spezia, equipo de Serie B, viajaba al siempre tan difícil San Paolo para medirse al Napoli, justo en el día del cumpleaños de su maestro, Maurizio Sarri, por lo que no era un día cualquiera para la ciudad de Nápoles. Querían celebrar el aniversario del técnico azzurro con una victoria y el pase a cuartos. Sin embargo, no podría sentarse en el banquillo, ya que acumulaba una sanción de la pasada edición. Así, su puesto lo ocuparía su asistente Francesco Calzona.
La principal novedad estaba en la indumentaria -algo a lo que tienen acostumbrado en sus últimos partidos como local los partenopei-, además de en los onces. El Napoli vestía de negro, mientras que La Spezia lo hacía de blanco. En cuanto a las alineaciones, Sarri introducía varias caras nuevas. En portería entraba Rafael. En defensa, lo hacían Maggio, Maksimovic y Strinic. En la medular, Diawara y Rog. Y arriba, Giaccherini y Gabbiadini. Dos hombres que podrían haber disputado su último encuentro con el Napoli, especialmente el segundo, tras las palabras de su agente. También era una gran oportunidad para ver de titular al joven croata Marko Rog, que tanta expectación generó su fichaje. O al mítico Maggio por el carril diestro, ejerciendo de capitano como antaño.
Con respecto a La Spezia, Domenico Di Carlo también haría varios cambios, dejando claras sus intenciones de priorizar el campeonato doméstico en Serie B (son décimos a un solo punto de los puestos de Playoff). Sin embargo, también apostaba por la misma táctica en su anterior partido de Coppa ante el Palermo, al cual consiguió batir en penaltis. Por ejemplo, no serían de la partida hombres importantes como Pulzetti, Vignali, Granoche o Nene. Se armarían en un 3-4-3 a la hora de atacar; mientras que se refugiaban en el 5-4-1 a la hora de defender, ejerciendo De Col y Migliore de carrileros. A la vez que Piccolo y Piu bajaban al centro del campo a incrustarse como interiores.
Zielinski abre la lata
Pero con solamente tres minutos de partido, cuando aún los napolitanos se sentaban sobre sus asientos de San Paolo, Zielinski arrancaba desde la zona de tres cuartos con el balón. Nadie le paraba. Y nadie lo paró. Se plantó dentro del área y terminó batiendo con un gran balón al palo largo a Chichizola.
Los aquilotti intentaban despertar, pero el Napoli manejaba de un lado a otro el cuero, haciendo correr al reloj, que iba sumando minutos y minutos, mientras dormía el juego. Y en una de esas jugadas Giaccherini consiguió filtrar un balón al punto de penalti, pero entre Insigne y De Col mandarían el esférico al poste derecho.
La siguiente jugada clara de gol volvería a tener como protagonista al pequeño napolitano. Tras una gran jugada del actor secundario, Gabbiadini, el lombardo le dejó de tacón un caramelo a Insigne para que este se sacara un gran disparo con rosca desde el balcón del área, pero que terminó rozando el palo.
Pero pasada la media hora de partido, La Spezia ejecutaba una contra intentado aprovechar una de sus pocas ocasiones de las que gozó. Y así fue. Piccolo recogía un rechace de Rafael, y empalmaba una volea que terminaba desviando Albiol, que acabó perforando las redes napolitanas. Un gol que dejaba helado a San Paolo, y veía como se le complicaba un partido dominado, como el del pasado fin de semana ante la Sampdoria. Además lo hacía con un gol de la misma manera (aquél día fue Hysaj quien se marcó en propia puerta).
Se llegaba al descanso con un encuentro que a raíz del gol de los aquilotti acabó igualándose. Incluso el equipo de Di Carlo comenzó a soltarse y a dominar varias fases, disfrutando de alguna que otra ocasión. Mientras, el Napoli lo intentaba a base de chispazos de sus hombres más adelantados, pero sin fortuna alguna.
Sentencia partenopea en dos minutos
La primera ocasión de la segunda mitad llegaría de las botas de Gabbiadini. Strinic batía líneas, le entregaba el cuero al delantero de Calcinate, pero el disparo cruzado de éste se marcha rozando el palo de la meta de Chichizola. La réplica de La Spezia no se hacía esperar y Piccolo disparaba fuera tras una cabalgada de varios metros desde la zona de tres cuartos.
No obstante, el Napoli rompía el empate poco después. Insigne dibujaba la jugada estándar. Caracoleó, se metió hacia dentro, y coló un balón en diagonal por encima de la defensa. En esta ocasión, a pesar de no contar con su fiel compañero Callejón, sería Giaccherini el encargado de volear el balón e introducirlo dentro de la portería. San Paolo volvía a respirar. Pero solamente un minuto después, Ceccaroni perdía el cuero cerca del área. Rog se marchó hasta pisar la línea de cal, desde dónde se saca un precioso pase ante la salida de Chichizola, para que Gabbiadini marcase a puerta vacía con el pecho. Los partenopei fulminaban a 'los aguiluchos' en apenas un minuto.
Ya pasada la hora de partido, a punto estuvo Marko Rog de estrenarse como goleador azzurro, pero su disparo, algo escorado, se marchó por encima del travesaño. Di Carlo variaba el esquema, metiendo a Pulzetti y Granoche, tratando de despertar a los suyos, como ya hicieron en el primer tiempo. Pasaban los minutos, y lo único relevante ya llegaba desde los banquillos. Hysaj entraba en el lugar de Strinic, mientras que Pavoletti seguía calentando en la banda. Hasta que por fin, llegaba su momento. Calzona llamaba al ex delantero del Genoa, que entraría por Gabbiadini. Tendría diez minutos para intentar estrenarse como napolitano. E iba a tener una clarísima para hacerlo. Callejón le dejó de cabeza en bandeja el balón, pero desde el punto de penalti, cayéndose, Pavoletti mandó el cuero por encima del larguero. Se reía el bueno de 'Pavoloso'.
Así se llegaba al final del partido. El Napoli conseguía el billete para los cuartos de final de Coppa. La Spezia, por su parte, se despedía de la competición, y los de Di Carlo mantendrán ya su cabeza en la Serie B en busca del ascenso. Los de Sarri recibirán este fin de semana al Pescara en San Paolo. Y los aquilotti visitaran a la Salernitana.