Mañana, domingo a las 12:30, el conjunto neroazzurro visita Bolonia con la intención clara de hacerse con los tres puntos y de esa manera conseguir competir con Roma y Nápoles: "Para llegar bien clasificados a nuestros encuentros directos con la Roma y el Nápoles, primero debemos ganar los partidos que tengamos hasta entonces". Insistió en la importancia de cómo afrontar estos enfrentamientos, incluido el de mañana: "Está claro que el próximo partido será una prueba que debemos afrontar con gran concentración y determinación de dejar lo máximo en el terreno de juego".
El extécnico de la Lazio pretende que los suyos sigan formando el conjunto sólido que ha conseguido ser desde su llegada al banquillo de la Beneamata. El entrenador del Inter sabe que aunque el Bologna no pasa por su mejor momento, cada partido es clave en sus aspiraciones de pelear con los mejores en Serie A: "Sólo hay que pensar en este partido tratando de hacerlo lo mejor posible y además ganar".
Dedicó gran parte de su intervención, Pioli, a hablar de sus jugadores y aspiraciones de cara al final de la temporada, dejó claro el parmesano que confía en su plantilla y que se siente afortunado de tener la oportunidad de elegir a la hora de hacer el once: "Siempre prefieres tener más opciones, los jugadores están trabajando bien, tengo una gran plantilla, por lo que hay posibilidades de elección y sin duda el equipo que estamos construyendo va a ser muy competitivo".
Para terminar, se le preguntó al técnico del Inter por el hecho de que, tras la eliminación en Coppa por parte la Lazio, su equipo ya solo ha de pelear por su posición en Serie A. Su desastrosa fase de grupos en Europa League permite a los milaneses centrarse en la competición doméstica: "Es evidente que tener semanas limpias viene bien para preparar nuestro objetivo, no tener compromisos entre semana nos permite llegar el domingo con las fuerzas intactas. Es también cierto que estamos hablando de enfrentarnos siempre a formaciones muy fuertes, el Bologna será un rival duro en un partido importante".
El discurso es claro, el objetivo es alcanzar a la Roma y al Nápoles y de esa manera meterse de lleno en la pelea por conseguir un puesto que dé acceso a la próxima edición de la Champions League, competición que los milaneses no disputan desde la 2011/2012, cuando cayeron en octavos a manos del Marsella. En Serie A, el Inter es tercero con 45 puntos, a seis del tercero, el Napoli, y a ocho del segundo, la Roma.