Salía muy serio el entrenador italiano del AS Roma a rueda de prensa tras el partido frente al Inter. Salió con ganas de defender a sus jugadores ya que consideraba una "falta de respeto" que los miembros de la disciplina del Inter culpen al árbitro del resultado.

Dejando clara su opinión, Luciano quería emplearse únicamente en hablar del desarrollo del partido: "Estoy interesado en las prestaciones del equipo, la Roma mereció ganar y punto. Se ha hablado durante toda la semana de los malos arbitrajes al Inter y a mi eso no me interesa".  Evitando con ello pronunciarse con las jugadas polémicas como el supuesto penalti de Strootman sobre Eder no señalado o una mano de Nainggolan. Añadió que en las posiciones altas de la tabla siempre se habla de arbitrajes. "Unas veces te dan y otras te quitan pero el partido se ha llevado a cabo correctamente". Parece ser que Spalletti sabe de lo que habla ya que según él "ha leído los cambios disciplinarios del reglamento y se ha enterado de todo lo sucedido en las reuniones de los árbitros", zanjando así el tema.

Le preguntaron también por la actuación de su rival a lo que no dudó en responder: "Me esperaba un Inter difícil de batir, pusieron en problemas a la Juventus a pesar de que perdieron y sabíamos que D'Ambrosio pondría un punto más de calidad y guiaría a su equipo". Lo que le derivó en un análisis de la preparación de este encuentro y el estudio que hicieron al adversario: "Sabíamos que Perisic, que jugó con Dzeko en Wolfsburgo, podría hacer toda la banda. Puse a Jesús para controlar Candreva. Jesús fue extraordinario tácticamente, ese agujero que conseguimos aislando a sus jugadores lo aprovecharon Dzeko y Nainngolan". El belga estuvo sensacional marcando un doblete compuesto por dos golazos.

De este modo, el Inter se lleva otro batacazo más en la lucha por los puestos de Champions League y la Roma afianza más si cabe su segunda plaza con la derrota del Nápoles. Motivo por el que Spalletti se siente satisfecho y demuestra la gran labor del técnico.