Menos de un año ha pasado desde el final de la temporada 2015-2016 y la visión de la misma es totalmente dispar dependiendo de los ojos con los que se mire. Las miradas neroverdi se tornan cristalinas y emocionadas al recordar esa histórica sexta posición que les hizo disfrutar de la primera competición europea de toda su historia; en el otro bando muchas miradas laziales querrían no haber visto con sus ojos o haber podido olvidar la octava posición que los condenó a vagar por Italia sin ninguna posibilidad de un sueño europeo.

Las cosas han cambiado mucho en ese tiempo y son ahora los aficionados del Lazio los que miran a la clasificación orgullosos antes de jugar el partido que abrirá la trigésima jornada de liga. A falta de nueve encuentros se encuentran en cuarta posición, con una distancia de dos puntos frente a Inter y Atalanta –que sería el equipo que cerraría la zona europea- y con una ventaja de cuatro sobre el Milan. La temporada está dando sus frutos y los buenos resultados parecen devolver al equipo a la tan ansiada senda europea.

La situación de los aficionados del Sassuolo es completamente contraria, de acabar sextos el año pasado han pasado a marchar esta temporada en la decimoquinta posición con 31 puntos. A pesar de no tener que preocuparse por caer hasta posiciones de descenso ya que el Palermo ocupa la decimoctava posición con menos de la mitad de puntos que ellos –suman quince en todo el campeonato- en Reggio Emilia esta temporada cae como si se tratase de un descenso de categoría debido al gran bajón colectivo provocado en gran parte por las dificultades del mercado y de las lesiones.

El fortín del MAPEI como último recurso

La situación en la que llegan los locales a un partido de estas características no es la más apropiada a nivel psicológico. Se enfrentan con un rival poderoso y encadenan cuatro partidos seguidos sin ganar –un empate frente al Crotone y tres derrotas frente a Milan, Bologna y Roma-, pero los hombres de Di Francesco cuentan con dos ases bajo la manga.

El primero tiene nombre y apellidos y se ha convertido en pieza clave del equipo a su temprana edad, lo que le ha llevado a levantar el interés de varios conjuntos de la Serie A. Se trata de Lorenzo Pellegrini, que vuelve al equipo tras un parón de selecciones en el que se consagró en el centro del campo de la Azzurrini con dos grandes actuaciones y un gol frente a España. El italiano será junto con Berardi una de las piezas más importantes para lograr sacar algo positivo del complicado encuentro que se les viene encima.

Pellegrini en la pugna con Milinkovic | Foto: Lazio
Pellegrini en la pugna con Milinkovic | Foto: Lazio

El segundo comodín de Di Francesco es su propio estadio. Desde el inicio de la temporada el MAPEI Stadium se ha convertido en un feudo muy complicado de conquistar por los equipos más poderosos del campeonato. Tan solo Roma, Inter y Juve han logrado sacar los tres puntos del fortín teñido de verde y negro –con la excepción de la victoria administrativa del Pescara por 0-3 debido a irregularidades en la alineación local-, por lo que el entrenador buscará que el ambiente sea el más propicio para motivar a sus jugadores hacia el objetivo final.

La puerta acabará cayendo

En el momento en el que el hasta entonces guardameta titular Federico Marchetti comenzó a tener problemas esta temporada, las alarmas se dispararon en las oficinas del Lazio. El veterano guardameta de 34 años constituía uno de los pilares básicos del equipo de Simone Inzaghi, pero desde el otro lado del canal de Otranto llegó una inesperada solución a los problemas en la meta laziale con la aparición en escena del joven portero albanés Thomas Strakosha.

Marchetti podría verse relegado al banquillo | Foto: Lazio
Marchetti podría verse relegado al banquillo | Foto: Lazio

Condenado a un segundo plano evidente que le llevó a marcharse como cedido en busca de minutos al Salernitana, su gran oportunidad llegó en la quinta jornada del campeonato liguero contra el mismísimo Milan de Montella. El arquero se mostró nervioso e indeciso, pero a pesar de la derrota por 2-0 y de esa inseguridad logró atajar varios balones para evitar así una goleada mayor. Ese fue el punto de inflexión en su carrera ya que hoy por hoy, con una convocatoria con la selección absoluta de Albania y 12 partidos con la camiseta del Lazio rindiendo a muy buen nivel, el joven albanés se ha ganado la confianza de su entrenador y de todos sus aficionados a base de buenas actuaciones que le han servido para estar cerca de la renovación y han alejado a Marchetti de su futuro en el club.

Immobile festeja con Parolo | Foto: Lazio
Immobile festeja con Parolo | Foto: Lazio

Él es el último obstáculo que tendrán los hombres de Di Francesco a la hora de encontrar el gol, pero para generarlo el hermano del Pippo Inzaghi cuenta con tres certeras balas en la recámara ya que tanto Keita como Felipe Anderson llegan al partido en buenas condiciones e Immobile –la última punta del tridente ofensivo- lleva anotados 17 goles en liga, rindiendo a un nivel excelente desde que salió del Sevilla.

Convocatorias

Las listas de convocados no han sido facilitadas.

El Sassuolo no podrá contar con Gazzola, Magnanelli y Biondini. Los lesionados del conjunto visitante son Marchetti y De Vrij.

Posibles alineaciones