Cuando llevas una ventaja de más de un gol tras la ida, necesitas madurez, esa es la palabra clave, estás en un dilema, ¿juegas al ataque o te metes atrás a defender el resultado? Pues Simone Inzaghi lo hizo perfecto, supo mantenerlo y ha conseguido meter en la final de la TIM Cup a su Lazio rompiendo así la monotonía que se repartían entre Juventus, Roma y Nápoles.
En el once de la Roma hizo cambios Spalletti: Alisson siguió jugando la Copa, y en vez de a Bruno Peres sacó a Rudiger. En el medio sujetó a Paredes como pivote en vez de De Rossi mientras que arriba Perotti se quedó fuera para dar entrada a la delantera Salah-Dzeko-El Shaarawy.
En la Lazio, 3-5-2, por una parte defensivo por la acumulación de jugadores atrás, dejando solo dos delanteros arriba. En defensa, Bastos entró en los tres de atrás, en el medio, defendieron todos, pero Lulic y Milinkovic-Savic, dos jugadores algo más ofensivos, acompañaron a Biglia, Felipe Anderson como enganche, Ciro Immobile en punta la referencia.
La primera mitad fue de lo más vibrante, dominio total de la Roma, pero no se sentía tan incómoda la Lazio, es decir, muy abierta. Primero la tuvieron tanto Dzeko como El Shaarawy, pero el que la tuvo a la primera y la metió, fue Milinkovic-Savic, disparo de Immobile que paró Alisson, no perdonó en el rechace a placer el serbio.
Poco le duraría la alegría a los visitantes, antes del descanso y tras un centro desde la banda derecha que toca en un defensa, le cae el cuero a un espabilado El Shaarawy e 'Il Faraone' ponía el empate en el marcador para devolver las esperanzas al conjunto de Spalletti.
Tras el tiempo de vestuarios fue totalmente un asedio de la Roma, que hizo un cambio al descanso. Bruno Peres entró por Juan Jesús buscando velocidad y profundidad volviendo Rudiger al centro de la defensa. Hasta que otro contragolpe de la Lazio sorprendió y acabó con el sueño de los locales. Tras un pase al hueco, Ciro Immobile se plantó ante Alisson para acabar batiéndole en el mano a mano poniendo el 1-2 en el luminoso.
No estaba para tirar los brazos ante su gente el equipo de Spalletti, por lo que buscaron la remontada pero sabiendo que era prácticamente imposible. Hasta que llegó Mohamed Salah, el egipcio hizo un doblete al final del encuentro aprovechando dos rechaces para poner el 3-2 definitivo gracias a dos rechaces, el primero llegado tras un disparo al palo de El Shaarawy y el segundo tras un mal blocaje de Strakosha a un disparo de Strootman.
Con esta victoria, la Lazio consigue un gran objetivo, pasa a la final de la Coppa Italia, ya nos veníamos acostumbrando a la monotonía Nápoles, Roma y Juventus alternándose en los mejores puestos del fútbol italiano. Con esta victoria el equipo de Filippo Inzaghi la rompe para beneficio del fútbol.
Los tres últimos meses o incluso lo podemos alargar al 2017, ha sido tremendo el rendimiento de la Lazio, solo Juventus y Chievo han conseguido vencerles, dos empates -ante Milan y Cagliari- y todo lo demás, once victorias.
Además de ocupar una gran posición en la tabla de la Serie A, la Roma es la tercera víctima importante de la Lazio en esta edición de TIM Cup, anteriormente, Genoa e Inter habían sufrido la ira de los de Inzaghi quedándose fuera de la competición.
Un mes sin perder llevan en la Roma, pero no todo es eso, ha llegado el momento importante de la temporada y no van bien las cosas. Eliminados por el Olympique de Lyon en la UEFA Europa League y ahora por su máximo rival en la Coppa Italia, las cosas se tuercen para los pupilos de Spalletti.
Muchos en las últimas semanas vinieron avisando de que si no estaban los de Spalletti en la final de la TIM Cup, el entrenador italiano podría perder su puesto a final de temporada ya que sería considerada un fracaso, veremos cómo evolucionan las semanas dentro del feudo romano, pero acabar segundos o terceros en la Serie A es por desgracia algo común en los últimos años.