No está siendo una temporada fácil para el Inter de Milán y después de que el propio club, ayer, emitiera un comunicado donde anunciaba el despido del que hasta la fecha era el entrenador nerazurri, Stefano Pioli, habrán sido tres los entrenadores que habrán ocupado el banquillo del Giuseppe Meazza la presente temporada.
El comunicado donde se anunciaba el despido de Stefano Pioli fue publicado alrededor de las 22:30h y en él se especificaba que tanto el entrenador italiano como todo su staff técnico habían sido destituidos y que serían sustituidos por Stefano Vecchi, el actual entrenador del equipo Primavera neroazzurro.
En el comunicado también se daba las gracias a Pioli y a su equipo técnico por "su dedicación y el duro trabajo realizado en el Club en los últimos seis meses de una temporada difícil" y se confirmaba que "a partir de ahora, el club empezará a trabajar en la próxima temporada".
El principal motivo de su despido fueron los últimos resultados del equipo de Milánen la Serie A, donde no ha ganado ninguno de los últimos cinco partidos que ha disputado -cuatro derrotas y un empate- y ve como la clasificación europea se aleja. Curiosamente, algo parecido le ha sucedido al otro equipo de Milán, el AC Milan, que de los últimos cuatro partidos de liga ha perdido dos y ha empatado dos aunque en su caso aprece que Montella no corre peligro en su puesto, al menos hasta final de temporada.
Stefano Pioli ha desarrollado toda su carrera como entrenador en Italia. Su debut como entrenador profesional fue en la temporada 2003-2004 cuando entrenó a la Salernitana, de la Serie B, y posteriormente ha entrenado, entre otros, al Parma, Sassuolo, Chievo Verona -también entrenó a su filial-, Palermo, Bologna y Lazio.
Llegó al Inter de Milán en la jornada 12 después de que el anterior entrenador del conjunto italiano, Frank de Boer, fuera destituido dejando al Inter en la duodécima posición en la Serie A. Con la llegada de Pioli, la dinámica de los italianos cambió y se postularon como un claro candidato para luchar por una plaza europea. Pero la última racha negativa de resultados ha condenado al entrenador italiano que, según su representante: "no se esperaba el despido, está triste, para él ha sido una sorpresa".