La noche de las estrellas volvía a San Paolo, un santuario para los napolitanos -sí, es cierto que ya jugaron la previa ante el OGC Nice-. Tras ese siete de marzo en el que el Napoli rozó los cuartos de final, pero que acabaría cayendo con orgullo ante el que sería campeón de la Champions League por segunda vez consecutiva, el Real Madrid. Y lo hacía ante un clásico europeo, como es el Feyenoord de Róterdam. Precisamente, hoy se enfrentaban dos escuadras con rachas muy dispares. Mientras los italianos han arrancado como un tiro (colíderes en Serie A después de ganar las seis primeras jornadas); los holandeses, son sextos, cosechando tres derrotas en los últimos cuatro compromisos. Lo que es cierto, es que ambos coinciden en que se estrenaron en esta competición de igual forma: derrota. Por ello, este partido se convertía en trascendental para seguir aspirando a alcanzar la clasificación. Cabe destacar los emotivos mensajes hacia el jugador Arkadiusz Milik, quien se volvió a lesionar de gravedad tras romperse de nuevo el cruzado (esta vez de la derecha).

La plantilla del Napoli mandó ánimos a Milik esta noche. / Foto: sscnapoli.it
La plantilla del Napoli mandó ánimos a Milik esta noche. / Foto: sscnapoli.it

En cuanto a las alineaciones, Maurizio Sarri pondría en liza 'casi' su once de gala, ya que se quedó fuera Albiol (problemas en la espalda). Así, entraría en su lugar el central serbio Maksimović. El resto, los diez habituales. Todo esto después de la polémica que se creó en torno al equipo por la política de rotaciones (dejó sentados a Jorginho, Allan y Mertens) del técnico napolitano, y que le costó la derrota en Járkov ante el Shakhtar Donetsk.

En el bando rival, Giovanni van Bronckhorst tenía que realizar variaciones ante las bajas de piezas claves como Jørgensen, Botteghin y Vermeer. El entrenador de Róterdam cambiaría de esquema, pasando a dibujar un 4-4-2 en forma de rombo que, en ocasiones, mutaba a un 4-3-3, con Toornstra en una especie de falso '9'. Ya que, sorprendentemente, dejó en el banquillo al delantero Kramer, quien era la referencia, siendo la pareja de delanteros  y extremos, Boëtius y Berghuis. Sin olvidar la de Van der Heijden, un fijo en la defensa pero que, parece por problemas a última hora, no pudo vestirse de corto. Le reemplazó Tapia.

Dominio absoluto napolitano

El reloj comenzó a andar a la par que el cuero por el verde del San Paolo -algo desangelado esta noche-. Y con tan solo siete minutos en el luminoso, Insigne arrancó desde la zona de tres cuartos, y cuando asomaba por la medialuna del área, se sacó un disparo ajustado al palo izquierdo, estrenando el casillero de goles tras batir al australiano Jones. Dedicatoria incluida para Milik, mostrando una camiseta de su compañero. Arranque inmejorable para el Napoli en su estreno europeo. De inmediato, el Feyenoord se presentó con su turno de réplica. Boëtius se internó en la zona de castigo, pero su disparo salió algo flojo, atajándolo Reina sin problemas.

Pasada la media hora de juego, ambas áreas quedaban desiertas de acciones peligrosas. Un par de envíos diagonales por parte del Napoli a los que no encontraban al receptor correcto. Mientras que el cuadro holandés era incapaz de penetrar en una seria zaga partenopea, aunque tampoco, a decir verdad, generaron inquietud con a través de sus efectivos de ataque. Una vez cruzada la línea divisoria, chocaban una y otra vez con el muro que cimentaban los cuatro de atrás, más Jorginho y Allan (dos auténticos pulmones). El primero aguardaba, mientras que el segundo salía a 'morder'. 

Arranque calcado al primer tiempo

Pero al filo del descanso, los azzurri comenzaron a merodear con asiduidad la portería neerlandesa. Primero fue Insigne, pero el chut de la vespa napolitana se encontró con los guantes de Jones. Mismo resultado que la acción posterior, cuando Mertens filtró el cuero para que Callejón definiese. Y la tercera, otra vez el belga ejercía de asistente, dejándosela a Hamšík, quien entró cual tren de mercancías desde atrás, aunque su intentona se le marchó muy desviado del arco.

Mertens también tuvo su gesto para el polaco. / Foto: sscnapoli.it
Mertens también tuvo su gesto para el polaco. / Foto: sscnapoli.it

La segunda parte comenzó de la misma forma. En esta ocasión, Diks asistió de forma errónea a Mertens (con pasado en el Utrecht y PSV), quien venció en el mano a mano a Brad Jones, haciendo el segundo tanto de la noche. El belga también quiso dedicárselo a Milik, haciendo el gesto de la 'M' a la cámara. Y, como si de un calco a la primera mitad fuese, Berghuis sería el encargado de probar a Reina con un buen disparo lejano, aunque sin éxito. Justo después, el Feyenoord espoleado por el gol, El Ahmadi también estrelló su disparo contra el meta español. Minutos eléctricos de los holandeses.

'Doblete español' para sentenciar

No obstante, no sería el día de los visitantes. Especialmente para Toornstra, quien tuvo en sus botas meter a los suyos en el partido con un polémico penalti, pero Pepe Reina lo evitó con una gran parada. Y poco después, Callejón puso el 3-0 en el marcador tras la asistencia de Mertens. De este modo, el Napoli soltó el pie del acelerador ante un timorato Feyenoord, que maquillaría el resultado con el gol de Amrabat sobre la bocina. Sin embargo, siguen sumidos un partido más en la racha negativa. En cambio, los de Sarri se estrenan esta temporada en la fase de grupos de Champions League, encadenando su cuarta victoria consecutiva.

Reina tras parar el penalti de Toornstra. / Foto: sscnapoli.it
Reina tras parar el penalti de Toornstra. / Foto: sscnapoli.it

Así, el grupo F  queda con el Manchester City líder con seis puntos (ganó al Shakhtar Donetsk); los ucranianos y el Napoli igualados a tres unidades; y los de Van Brockhorst con cero. La próxima jornada medirá a Manchester City y Napoli, y a Feyenoord ante el Shakhtar el día diez de octubre.