La selección italiana sub-21 venció con comodidad en su segundo amistoso del parón FIFA del mes de octubre de 2017. 4-0 ante Marruecos que demostró tener un nivel inferior a la del combinado junior europeo. Es el segundo triunfo contundente de este parón tras el 2-6 conseguido en Hungría hace apenas unos días. Pese a no ser rivales potentes, el equipo italiano ha demostrado que de pegada va sobrado.

Marruecos dio facilidades en defensaEl encuentro fue casi un monólogo italiano. En el primer tiempo Parigini se mostraba como uno de los jugadores más activos del inicio de partido. Avisaba con un disparo desde fuera del área que no encontraba portería por muy poco. Acto seguido y en el ecuador de la primera mitad repetía disparo que esta vez se colaba por la escuadra de la meta de Marruecos. Antes del descanso llegaría el segundo de la sub-21, con un remate a placer de Cutrone tras una asistencia magnífica desde la parte derecha de Calabria.

Con el 2-0 Italia bajó la guardia en el comienzo de la segunda parte, lo que estuvo cerca de aprovechar Marruecos para acortar distancias. Audero salvó el remate de Kiyine con dificultades. Cutrone perdonaba en el mano a mano para firmar su particular doblete y Bonazzoli hacía el tercero en un gol muy similar al anterior con un centro desde la parte derecha que volvía a pillar desprevenida a la defensa del combinado sub-21 de Marruecos.

En el tiempo de descuento Vido cerraba la goleada con un buen control que le dejó en el mano a mano con el meta africano, cruzando el esférico y logrando el 4-0 definitivo. Es la tercera victoria en cuatro partidos amistosos de la sub-21, que solo ha perdido con España desde su eliminación en el último europeo sub-21 de cara a seguir preparando el campeonato de Europa de 2019 que se celebrará en el país transalpino.