En un partido vital para poner contra las cuerdas al Feyenoord, el Heracles recibió en su feudo al Pec Zwolle en el encuentro con el que concluían las actividades del sábado. Con un Heracles poco eficiente en las últimas jornadas (solo ha ganado uno de sus últimos cuatro partidos), la misión del Pec Zwolle parecía clara; acabar con la tranquilidad y poner el Polman Stadion patas arriba. Todo parecía indicar que no iba a ser tarea fácil; el Heracles solo ha sido derrotado en Almelo en una ocasión, contra el Ajax en octubre y además han sido los únicos capaces de robarle los 3 puntos al líder, el PSV. Y tampoco los de Zwolle pueden presumir de buenos resultados últimamente.

A ninguno de los equipos les interesaba un empate. Si el Heracles conseguía los 3 puntos descansaría al menos una noche en el top 3, por encima del Feyenoord mientras que el Zwolle con una victoria se catapultaría hasta casi llegar a los puestos de playoff. Los dos equipos revelación de la Eredivisie parecían estar dispuestos a todo por lograr la victoria, pero lo tenían que demostrar en el campo. 

Dominio local sin resultado

Los locales se adueñaron del balón prácticamente desde el inicio del encuentro, pero a pesar del gran monólogo que ofrecieron en los primeros veinte minutos, no consiguieron adelantarse en el marcador. Aunque tampoco el Pec Zwolle. Sobre el terreno de juego se encontraban dos equipos de porte similar; sólidos en defensa pero con llamativas carencias en ataque. Tampoco parecía que la solución a los problemas de ataque de los locales pasasen por Kada, el sucesor de Tannane, que no conseguía conectar ni con sus compañeros ni conseguía acertar de cara al gol. 

Los de Zwolle comenzaron a reaccionar a la contra alcanzada la primera media hora de juego y a molestar lo más posible a Castro, que presumió una vez más de buenos reflejos y no dejó que la mejor oportunidad visitante en la primera mitad, un disparo raso al primer palo de Becker, entrase. 

Lucha con beneficio

El centro de la mayoría de los problemas del equipo de Zwolle parecía ser Bel Hassani, que se mostró muy participativo en el medio del campo y lograba conectar con el tridente ofensivo local para complicarle aún más las cosas a van der Hart y a la defensa visitante.

Y fue recompensado. En un área prácticamente vacía a excepción de Darri y van der Hart, el delantero de Almelo sorprendía a los dedos azules y en vez de aventurarse a chutar a portería, optaba por cederle el balón a su compañero Iliass Bel Hassani, que desde la izquierda del portero del Zwolle lograba cruzar el balón a la derecha, convirtiéndose en imparable para el joven portero visitante. 1-0 en el marcador.

Los locales cometieron pocos errores tras el gol. Subir el balón por las bandas parecía la única manera de sorprender a un Heracles que se había cerrado muy bien atrás y que se aventuraba muy pocas veces a acercarse al área rival. El resultado, aunque ajustado, les servía para cumplir su objetivo, y mientras menos huecos dejasen, menos tendrían que lamentarse. Sin embargo, el Pec Zwolle trataba de aprovechar las pocas ocasiones que el encuentro brindaba, aunque en vano.

Los recién llegados y la tercera posición

Tuvieron que ser los suplentes del Heracles los que sentenciaron el partido. El uruguayo García, que no llevaba ni cinco minutos en el terreno de juego le dio un pase adelantado a su compañero Navratil, que también acababa de debutar en el partido, y este, en un uno contra uno frente al portero conseguía el 2-0 para su equipo. 

Al final no hubo sorpresa y el Heracles ganó una vez más en el Polman Stadion a pesar de la buena segunda mitad que firmó el Pec Zwolle. Con los 3 puntos conseguidos, el Heracles le roba la tercera posición de la tabla al Feyenoord al menos durante una noche, mientras que la derrota para el Pec supone quedarse a 4 puntos del acceso a la zona de playoff para acceder a Europa League. 

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