El encuentro comenzó con dominio del Ajax que se adelantó en el marcador gracias a un gol Arkadiusz Milik. A pesar de que estaba controlando el encuentro, el equipo de Frank de Boer no terminó de llevar la iniciativa del juego en ningún momento, pues fue el conjunto local el que más ímpetu le estaba poniendo al ataque, el que estaba circulando el cuero a más velocidad, y el que más estaba dominando el balón en ataque, tratando de llegar a bastante velocidad por los costados, aunque principalmente estaba buscando opciones de pase jugando entrelíneas.

Dominio local tras un gran inicio del Ajax

Después de los primeros minutos, el equipo de Cocu siguió dominando la pelota, pero estaba siendo muy poco profundo en los últimos metros, a pesar de que estaba iniciando las jugadas tocando desde atrás. Mientras tanto, el conjunto de Amsterdam se mantuvo replegado en su campo, aunque se estaba defendiendo muy bien cerrando los espacios por las bandas, y presionando desde la segunda línea de presión al centro del campo. El PSV se estaba volcando bastante en ataque, desplegándose con los 10 jugadores en campo contrario, pero a pesar de ello, estaba cerrando muy bien las líneas de ataque rivales en las transiciones defensivas. El ritmo de intensidad no estaba siendo muy alto, y el dominio de los locales estaba siendo una constante en el encuentro.

Tras un tiempo, el conjunto visitante se hizo con la posesión de la redonda y empezó a tener más la iniciativa del juego en el partido a raíz de las posesiones largas que trazó en campo contrario, frente a un rival que ante las circunstancias, estaba optando por salir en velocidad por las bandas que estaban siendo una buena vía de peligro con Jetro Willems, que estaba participando mucho en ataque. Tras unos minutos, el conjunto dirigido por Phillip Cocu recuperó el dominio del encuentro, y siguió realizando ataques posicionales estériles, sin profundizar por ninguna vía de ataque. Al mismo tiempo, el Ajax de Amsterdam se volvió a replegar, aunque siguió saliendo de su campo en algunas ocasiones.

Dominio del PSV sin profundidad

El segundo tiempo comenzó con dominio de balón del PSV que estaba intentando llegar con peligro al área rival a base de iniciar las jugadas tocando desde atrás, pero no estaba consiguiendo crear peligro, ni buscando en largo a un Luuk de Jong desaparecido, ni combinando y abriendo el juego hacia las bandas. El ritmo de intensidad estaba siendo bastante bajo, y el Ajax se seguía manteniendo replegado en su campo aunque en ese momento del encuentro, únicamente se replegaba con las dos primeras líneas de presión, desplegándose más la línea de los atacantes, para ir a presionar a la defensa rival que no estaba teniendo dificultades para superarla.

Después de los primeros 20 minutos del segundo acto, el encuentro ganó en intensidad, y ambos conjuntos empezaron a encontrar muchos más espacios en la defensa del contrincante, y fue el Ajax el que creó más peligro en alguna jugada, como en las peligrosas internadas de Amin Younes por el costado izquierdo que no pudo concretar en gol, frente a una defensa rival que se mantuvo bien plantada en todo momento a pesar de que el equipo estuviera volcado sobre la portería contraria. El juego de los locales estaba siendo cada vez más atropellado, y el técnico local quitó a un hombre del centro del campo como Guardado, e introdujo a Gastón Pereiro para que le diera claridad al equipo por el interior, y fluidez en el último pase. El 0-2 llegó por medio de El Ghazi que batió a Jermain Zoet con un disparo raso y ajustado al palo de pierna derecha, desde la frontal del área.

Después del gol, el equipo de Frank de Boer tuvo su tramo de mayor control, teniendo el balón ante un PSV que sin la posesión empezó a deambular por el campo. Con el cuero, el conjunto local apuró sus últimas opciones de buscar una remontada que resultaría apoteósica, centrando balones al área, pero con el segundo gol, el equipo dio muestras inequívocas de haber pagado el tremendo desgaste europeo, en la pasividad de los jugadores cuando se centraban balones al área desde las bandas. Mientras tanto, el Ajax dio una lección magistral de como manejar el tempo de un partido, trazando posesiones largas, y parando el ritmo de juego a su antojo.