El empate a uno en la ida en el Amsterdam ArenA había sido como una bendición para el PAOK. El Ajax había sido superior durante el encuentro, y sobre todo en los últimos cuarenta y cinco minutos, en los que consiguieron empatar gracias a un gol de Dolberg. A pesar de haber perdonado en exceso, el Ajax sabía que tenían una oportunidad de remendar sus errores en la vuelta, y así fue.

Bosz sacó un once titular inusual. El nuevo entrenador del Ajax optó por un esquema táctico inusitado y complejo: un 3-5-2, haciendo además debutar a Westermann, que jugó como central. El plan de Bosz era el de sorprender; y si además conseguía el efecto deseado se lo pondría muy difícil al PAOK, que salió con el mismo once titular que en el partido de ida.

Pero el plan de Bosz se desmoronó nada más comenzar el encuentro. Cillessen envió el balón a córner tras una buena parada que habría supuesto el 1-0 de no ser por su intercepción. El saque de esquina lo ejecutó Rodrigues y le cayó a Stefanos Athanasiadis, que únicamente tuvo que saltar y cabecear el balón para meterlo en la portería. El cronómetro marcaba el minuto cuatro.

El partido se le puso cuesta arriba al Ajax desde entonces. Tenían que marcar dos goles para avanzar, y una vez los marcasen un empate del PAOK sería lo de menos: seguirían avanzando. Pero los minutos pasaban y el Ajax parecía estar totalmente desaparecido en el encuentro: poca profundidad y aún menos peligro. La primera ocasión que tuvo el equipo visitante ocurrió alcanzado el minuto treinta y cuatro. Mateo Cassierra remató a puerta, aunque Glikos detuvo su disparo.

Davy Klaassen, capitán y salvador

A tan solo unos minutos del final de la primera mitad, la fortuna le sonrió al Ajax. El árbitro pitó falta a favor del Ajax, y tras el lanzamiento de Gudelj, Viergever corrió para interceptarlo, pero Marin Leovac tumbó al defensa neerlandés y Anthony Taylor no lo dudó: penalti a favor del Ajax. El árbitro no cambió su decisión a pesar de las protestas del PAOK y Davy Klaassen lanzó el balón de cara a la portería de Glikos. El portero se lanzó a su derecha, mientras que el capitán del Ajax chutó el balón al centro de la portería. La eliminatoria volvió a estar igualada.

Poco a poco el Ajax se fue sintiendo más cómodo en el encuentro. No generaron demasiado peligro en el área contraria, pero tampoco permitían que el PAOK se acercase demasiado a la portería de Cillessen. El encuentro adquirió un ritmo lento. Ninguno de los dos conjuntos parecía querer marcar, y la segunda mitad estuvo plagada de faltas y pases largos que acababan en nada. Conforme el reloj se acercaba al minuto 90 la posibilidad de treinta minutos adicionales se hacía más y más posible.

Pero alcanzado el minuto 88 de juego esa idea se esfumó por completo. Mateo Cassierra, que había aparecido muy poco en el encuentro, lanzó un centro al área y Anwar El Ghazi lo interceptó con la cabeza y lo dejó atrás con la suficiente precisión como para que Davy Klaassen probase suerte desde dentro del área. Glikos no pudo hacer nada para evitar el gol del Ajax, el segundo de Klaassen. El encuentro se acababa, y el PAOK debía marcar dos goles más para pasar, pero finalmente esos goles no llegaron y el Ajax se clasificó, aunque con mucha dificultad.

Los posibles rivales del Ajax, cabeza de serie, en la siguiente ronda, la última antes de la fase de grupos, son la Roma, el Steaua de Bucarest, el Monaco, el Young Boys y el FC Rostov. El sorteo se realizará este viernes hacia el mediodía.