Steven Bergwijn es uno de los jugadores más prometedores de la Eredivisie y del PSV, tanto es así que ya se ha hecho un hueco en el cuadro dirigido por Phillip Cocu. A sus 19 años, ya ha acumulado 37 partidos en esta temporada con  cuatro goles y tres asistencias, saliendo de suplente en la mayoría de encuentros.

A pesar de que este delantero nació en Ámsterdam y jugó en las categorías inferiores del Ajax, siempre supo que ese no era su sitio: “Cuando jugaba en el Ajax pensé: quiero jugar en el PSV”. Y lo consiguió, cambió de equipo y comenzó a jugar en el filial del equipo de Eindhoven.

Comentó la fuerte relación con su familia que siempre le apoyó en todo, incluso con su marcha al PSV: "Ellos siempre están ahí para mí, por lo que ahora también están en el PSV”. Explica que él siempre ha sido el más pequeño del equipo y si físico no mejoró hasta que no se embarcó en las filas del PSV: “Yo era siempre el más pequeño del equipo. Todos esos tipos eran mucho más grandes y más fuertes que yo. Una vez jugué con y contra Jeffrey Bruma, es entonces cuando me senté en el gimnasio mucho, me ayudó. Me encuentro ahora físicamente mejor".

Su paso por la Juliper League, antes de llegar al primer equipo, le ayudó mucho a progresar: “Sí, creo que es un buen paso. Es diferente a la Primera División, sobre todo físicamente, pero se aprende mucho". Bergwijn es un jugador multiusos, puede moverse pror todo el frente de ataque, sobre todo por banda izquierda, aunque de delantero centro y extremo derecho, también cumple. Su velocidad es su principal arma, muchos ya le veían como el próximo Memphis Depay, por su posición en el campo y sus características de velocidad y regate. Aunque sin tanto disparo como el actual jugador del Lyon.