La selección de Gales tocó el cielo con las manos el día diez de octubre del 2015. Tras casi seis décadas sin jugar un gran torneo de selecciones, el combinado galés se clasificó para jugar la fase final de la Eurocopa 2016, liderados por un jugador que registró unos números estratosféricos: Gareth Bale. Desde el Mundial de Suecia en 1958, en el que fueron liderados por John Charles y llegaron hasta los cuartos de final, Gales no había vuelto a jugar la fase final de un gran torneo.

Ni Ian Rush ni Ryan Giggs lograron clasificar a su selección para jugar la fase final de un gran torneo, dato que revela la monumental proeza que ha protagonizado Gareth Bale, el líder indiscutible del país. Los británicos lo intentaron en numerosas ocasiones y se quedaron a las puertas. En 1976, Gales estuvo a punto de clasificarse para la fase final de la Eurocopa de aquel mismo año, pero Yugoslavia los apeó en los cuartos de final del Campeonato de Europa de la UEFA. Los galeses sucumbieron ante los balcánicos en aquella eliminatoria a doble partido y se quedaron fuera de la fase final, que entonces, era de tan sólo cuatro equipos. El siguiente intento de los dragones rojos fue en el año 1984, pero de nuevo Yugoslavia, volvió a dejar a Gales fuera de la fase final de la Eurocopa. La última ocasión en la que los galeses volvieron a estar cerca de clasificarse fue veinte años después. En el año 2004, Gales llegó a disputar los play-off que les permitirían regresar a una fase final, pero esta vez la Selección de Rusia evitó la clasificación de los británicos en una apretada eliminatoria: el partido de ida fue en Moscú y terminó empate a cero, y en el partido de vuelta, los galeses cayeron en casa ante los rusos y volvieron a fracasar en el intento.

Sin embargo, gracias a un equipo comprometido con su país, Gales ha podido hacer su sueño realidad y estarán presentes en la Eurocopa de 2016 que se disputará en Francia. Los británicos han superado a sus peores fantasmas y volverán a la élite del fútbol de selecciones 57 años después. Estar presentes en Francia ya es una gran victoria para ellos, así que los galeses tienen licencia para soñar el próximo verano. Su objetivo está cumplido y ahora tendrán que verse las caras con Inglaterra, Eslovaquia y Rusia. Sí, de nuevo Rusia, pero esta vez el combinado galés tendrá ánimo de revancha. El destino ha querido que vuelvan a verse las caras.

Imagen del equipo de Gales en el Mundial de 1958. Los galeses fueron la revelación del torneo llegando hasta los cuartos de final. Imagen: Getty Images.

La fase de clasificación: un buen trabajo de los galeses

Gales realizó una fase de clasificación impecable. Tanto es así que la única derrota de los galeses en los nueve partidos jugados tuvo lugar en la última jornada, ante Bosnia (2-0), con el equipo ya prácticamente clasificado. La Selección de Gales superó a selecciones rocosas y de gran dificultad como Bosnia y especialmente, Bélgica, actual líder del ranking FIFA de selecciones. Finalmente, los dragones rojos terminaron segundos de grupo, obteniendo así su billete para clasificacarse de forma directa para la próxima Eurocopa. Los belgas fueron campeones de grupo, aunque tuvieron que sudar para lograrlo, pues no conseguieron superar a Gales en ninguno de sus dos enfrentamientos: perdieron en Cardiff (1-0, Gareth Bale) y empataron en Bruselas (0-0). Unos resultados que revelan la tremenda competitividad del conjunto dirigido por Chris Coleman, haciendo que una fantástica selección como Bélgica no pudiera derrotarlos en ninguno de los dos partidos. Sin embargo, los galeses desaprovecharon ambos resultados realizando partidos menos brillantes ante rivales de entidad inferior y terminaron cediendo la primera plaza a los belgas.

El balance de Gales en esta fase de clasificación es muy meritorio: los de Chris Coleman lograron seis victorias, tres empates y una sola derrota, con once goles a favor y cuatro en contra. 

El mejor partido de los galeses tuvo lugar el 12 de junio de 2015 en el Cardiff City Stadium, ante Bélgica. Los dragones rojos, liderados por un fantástico Gareth Bale, vencieron 1-0 a los belgas, rompiendo con todos los pronósticos y colocándose líderes de su grupo. 

Gareth Bale dio la victoria a Gales con un buen gol con su pierna derecha. Imagen: BBC Sport.

Grupo B: Inglaterra, el último verdugo y un rival peligroso

La Selección de Gales no tendrá nada fácil superar la fase de grupos, pues tendrá que verse las caras en primera instancia con Inglaterra, un fantástico equipo, siempre peligroso a pesar del mal momento, repleto de grandes futbolistas y estrellas. Su segundo rival será Rusia, una de las bestias negras de los galeses. Por útimo, se enfrentarán a Eslovaquia, una selección difícil de batir, ordenada y con armas para hacer daño a cualquier rival, como ya pudo experimentar la Selección Española en su grupo de clasificación.

Inglaterra: puesto 9 en el ranking FIFA

Wayne Rooney, máximo goleador histórico de Inglaterra. Imagen: Goal

A priori, la selección más dura del grupo y el máximo rival de Gales. Los de Roy Hogdson esperan realizar un buen papel en Francia y acabar de una vez por todas con la mala racha en las últimas fases finales, en las que Inglaterra ha dejado mucho que desear. Comandados por Wayne Rooney, su principal problema es la creatividad en el medio campo y la fragilidad defensiva. Dependen en exceso de la imaginación del jugador del Manchester United, que agradecerá jugar por detrás de un delantero para poder influir más en el juego de su equipo. Harry Kane tiene muchas posibilidades de portar el número 9 en la Eurocopa, que será su primera gran cita con la Selección Inglesa. La defensa dependerá del momento en el que lleguen los futbolistas. Chris Smalling es hoy en día un central de garantías, y si la Eurocopa fuera hoy, jugaría seguro como titular. John Stones parece contar con la confianza del seleccionador y si continúa con su buen nivel en el Everton, puede ser de la partida, al igual que otro diablo rojo, Phil Jones. Otra opción para la zaga es el jugador del Chelsea Gary Cahill, que por el momento está muy por debajo de su nivel y ha visto peligrar su puesto con Inglaterra.

En el lateral derecho, la batalla está servida. Kyle Walker y Nathaniel Clyne son dos jugadores del gusto de Hogdson y la titularidad dependerá de la temporada de cada uno. Por el momento, Kyle Walker parece llevar la delantera. En el lateral izquierdo, Leighton Baines ha sido un fijo siempre, pero la dura lesión de la que ya se ha recuperado puede influir en su rendimiento. Habrá que ver cómo llega el jugador del Everton al final de la temporada. Como alternativa, el seleccionador contará con Ryan Bertrand (Southampton), un jugador rápido y habilidoso, pero despistado en defensa.

Las dudas llegan en el medio campo. Inglaterra no cuenta con un mediocentro que haga jugar al equipo y eso se nota en el campo. Milner puede bajar al centro del campo, donde ya le ha probado Hogdson, pero el seleccionador parece estar muy atento a la progresión de Dele Alli y Eric Dier, dos jóvenes que están realizando un papel sobresaliente en el Tottenham. Veremos por quién se decanta el míster. En la parte ofensiva, Inglaterra tiene mucha calidad. Harry Kane, Wayne Rooney, Raheem Sterling y Ross Barkley parecen fijos. Habrá que ver el ritmo que sigue Vardy, que de momento parte como suplente a pesar de ser el máximo goleador de la Premier League.

Sin duda alguna, Inglaterra cuenta con un equipo plagado de calidad, pero muy irregular. Está por ver su rendimiento ante grandes selecciones, pero lo cierto es que ha realizado una fase de clasificación impecable, con pleno de victorias.

Rusia: puesto 24 en el ranking FIFA

La selección soviética es muy peligrosa. Comandados por Kerzhakov, su gran referente con 80 internacionalidades y 25 goles, cuentan con jugadores de mucha calidad como el madridista Cheryshev, Kokorin, Zhirkov, Dzagoev, Denisov, o el portero Akinfeev. Todos ellos jugadores verticales, con clase, que forman una selección con armas suficientes para acabar con muchos equipos. Se caracterizan por el orden defensivo y la verticalidad, suelen dejar jugar al rival para matarlo a la contra.  La Selección de Gales tendrá un partido difícil ante los rusos, pues ellos también suelen dejar jugar a su rival, por lo que habrá gran disputa por el balón y ambos conjuntos tendrán que buscar alguna alternativa en su juego para hacer daño a su oponente.

Imagen: UEFA

Rusia fue una de las bestias negras de Gales. En la última ocasión en la que los galeses estuvieron rozando una fase final de Eurocopa, los soviéticos les dejaron con la miel en los labios. El destino ha querido que ambos vuelvan a verse las caras ya en una fase final. La revancha está servida para Gales, que tratará de hacer lo mismo con los rusos y dejarles fuera en la fase de grupos.

Eslovaquia: puesto 26 en el ranking FIFA

Imagen: UEFA

Los eslovacos son un rival con el que Gales no debe confiarse. A priori, son los más débiles del grupo, pero ya dieron un susto y vencieron a la Selección Española en la fase de clasificación.

Liderados por su capitán Martin Skrtel, y por su estrella, Marek Hamsik, son un equipo compacto, que defiende bien y sabe utilizar muy bien sus armas. Basan su juego en las bandas y en las botas de Hamsik, en quien recae toda la creación a pesar de ser muy ofensivo. Además, cuentan con jugadores peligrosos como Vladimir Weiss o Miroslav Stoch, capaces de hacer grandes jugadas y de poner en aprietos a cualquier defensa.

Lo normal es que, en su enfrentamiento con Gales, esperen atrás y dejen que los galeses lleven el desgaste para hacerles daño con su velocidad. Los británicos deberán andarse con ojo y tomarse muy en serio a este equipo si no quieren ser sorprendidos.

Conclusión

La selección de Gales no ha tenido un sorteo favorable, pero sí tienen muchas posibilidades de pasar de ronda. Los tres equipos a los que se enfrentarán los galeses les pondrán en dificultades, pero si muestran el notable nivel de competitividad que ya han demostrado en la fase previa, lo normal es que superen a Rusia y Eslovaquia y se jueguen ser líderes con Inglaterra. Todo puede pasar en un grupo tan competitivo, pues con Inglaterra y su irregularidad puede ocurrir cualquier cosa. Además, Rusia planteará batalla y será muy difícil de batir, y Eslovaquia será un rival incómodo para todos. El resultado lo veremos en Francia. 

Gareth Bale y diez más

Es la estrella. Gareth Bale. Imagen:BBC

Es indiscutible. Gareth Bale ha conducido a su selección a lo más alto. Ha logrado una hazaña que no pudieron lograr ni Giggs ni Rush. El mérito es impresionante. El futbolista del Real Madrid es el líder absoluto, la estrella de la Selección de Gales. Ha marcado seis goles en la fase de clasificación y ha dado numerosas asistencias. Su participación en el juego de su equipo es total y con 26 años ha sido capaz de echarse a las espaldas a toda una nación, que hoy en día está rendida a su héroe. Gales no es un equipo que impresione, pero su eficacia tiene un nombre: Gareth Bale. Cuántos puntos ha dado con goles o asistencias a su selección durante los últimos años este jugador, un hecho que hace que nadie dude de él en su país. Gareth ha logrado agotar todos los calificativos para sus compatriotas y se ha convertido en héroe nacional. La Eurocopa 2016 puede ser su gran confirmación como futbolista.

A pesar de que en el pasado le tantearon la posibilidad de jugar con Inglaterra, el natural de Cardiff fue claro. No dudó ni un instante que jugaría con Gales y así lo confirmó tras clasificar prácticamente él sólo a su país: ''Es el sueño de mi carrera'', decía emocionado el expreso de Gales.

Su fiel escudero y compañero de batallas en Gales es Aaron Ramsey. El jugador del Arsenal lleva el control en el centro del campo y forma una parte indispensable del equipo. Es el equilibrio y hace funcionar la maquinaria para que Gareth Bale pueda efectuar su trabajo. Digamos que es el trabajador incansable en la sombra, el motor de Gales. Sin él, la figura de Bale en el equipo disminuiría, pues incide en gran parte del juego de su selección. Es la brújula, un fantástico jugador que también merece los elogios.

Aaron Ramsey, el motor de Gales. Imagen: Mirror. 

Sin duda alguna, dos jugadores sobresalen del resto, pero la Selección de Gales es todo corazón. Son un equipo, con todas las letras. Cada jugador se compromete con su compañero y se deja la vida en cada partido, se la deja por su camiseta, por su país. Ojalá, los galeses vean recompensado todo su esfuerzo y dedicación en la Eurocopa 2016. Suerte, héroes.

Los héroes de Gales. Imagen: UEFA