Los saints arrasaron con el Sparta de Praga en la primera jornada de la fase de grupos de la Europa League. Desde el comienzo del partido, Tadic, Austin, Long y compañía asediaron la portería rival dejando a todos los aficionados presentes en el St. Mary's Stadium con un gran sabor de boca tras ver a su equipo imponerse ante un club que en la edición pasada alcanzó los cuartos de final, lo que hace soñar a los hinchas del Southampton que esperan ver a su conjunto luchando por hacerse un hueco entre los mejores del continente.

Un comienzo arrollador

El comienzo del encuentro se vio marcado por el dominio ofensivo del Southampton y por el alto nivel de intensidad que provocó un gran número de faltas, factor que supo aprovechar a la perfección Duçan Tadic ya que en el minuto cinco el serbio se internó en el área rival para provocar que Nhamoinesu Costa cometiera una polémica y discutida mano tras una entrada demasiado arriesgada que provocó la pena máxima favorable a los saints. Charlie Austin fue el encargado de ejecutar el penalti, y con mucha sangre fría el delantero inglés fue capaz de batir a Koubek para poner el 1-0 en el luminoso y marcar el que ha sido para él su primer gol en competiciones europeas.

Lejos de conformarse con ir por delante en el marcador, los chicos de Puel mantuvieron el excelente nivel de juego al que habían estado hasta el momento y en el minuto diez, una gran contra conducida por Shane Long provocó un peligroso córner en el que Van Dijk remató un balón que finalmente se marchó rozando el travesaño. A paritr de entonces, el ritmo del partido bajó considerablemente pero, conscientes de la importancia que tiene la diferencia de goles en una competición como la Europa League, los locales metieron una marcha más a partir del minuto 20 que iba a derivar en un nuevo asedio ofensivo local.

Austin lanzando el penalti que significaría el 1-0. Fuente: Southampton
Austin lanzando el penalti que significaría el 1-0. Fuente: Southampton

De los errores se aprendeTras una gran jugada colectiva, Duçan Tadic puso un balón medido en la cabeza de Charlie Austin pero el artillero inglés se encontraba en posición antireglamentaria por tan solo unos centímetros. Tras esta última acción, el balón llegó de nuevo a esa banda derecha que tanto daño estaba haciendo al Praga y Cuca Martina creó un centro inmejorable que, esta vez en posición correcta, remató Austin para poner el 2-0 en el marcador consiguiendo de este modo un doblete en su debut europeo.

Fue entonces cuando el conjunto visitante intentó reaccionar, el Sparta Praga comenzó a desplegar un juego muy distinto del que se pudo ver en los primeros minutos de partido. Depués del segundo gol, los visitantes tuvieron el control de la posesión y tanto Lukas Julis como Josef Sural pusieron a prueba a la zaga del Southampton que supo reaccionar muy bien a este cambio de planes dejando su portería a cero antes de que el colegiado señalase el camino a los vestuarios.

Cambio en el guión

El segundo tiempo comenzó con el Southampton recuperando el dominio de la posesión pero el alto ritmo de juego al que se habían semito ambos equipos en en inicio del duelo no tuvo nada que ver con lo refeljado en el terreno de juego durante los primeros minutos de la segunda parte. La intensidad bajó considerablemente, y por tanto las ocasiones eran precebidas por largas y elaboradas jugadas con las tanto locales como visitantes lograron llegar a las respectivas áreas rivales.

Hojbjerg fue uno de los jugadores claves del partido. Fuente: Southampton
Hojbjerg fue uno de los jugadores claves del partido. Fuente: Southampton

El primero en golpear fue Tadic, el mediocentro ofensivo fue uno de los más activos durante todo el partido y en el minuto 53 gozó de una gran ocasión en la que superó con facilidad a la defensa para despues quedarse sólo ante Koubek que detuvo, con alguna dificultad, el disparo del número 11. Poco después, el Sparta provocó una serie de córners en los que momentáneamente amenazó la portería de Forster, la oportunidad más clara la tuvo Kadlec que en el minuto 58 remató un rechace desde el bórde del área que no llegó a pasar por los tres palos ya que rebotó en el cuerpo de un rival.

Pasada la hora de partido, nuevamente un balón rechazado cayó en las botas de un jugador del Sparta Praga, en este caso David Lafata, que sin pensarselo ni un instante disparó sin piedad a la portería defendida por Forster que se estiró de manera increible para salvar un gol que pareciía cantado. Los minutos restantes se vieron marcados por las faltas y tarjetas que recibieron jugadores de uno y otro equipo, el Southampton supo coger las riendas del encuentro en los instantes finales y, aprovechando las carencias defensivas del rival, los atcantes locales conducieron una contra que terminó con gol de Jay Rodríguez para cerrar un gran debut en su re-aparición en competiciones europeas.