No corren buenos tiempos para Slavisa Jokanovic en el oeste de Londres, pues su Fulham ha cosechado cuatro derrotas y tres empates en los siete encuentros previos a este duelo frente al Barnsley

Los recién ascendidos llegaban a esta jornada como uno de los equipos más goleadores de la categoría (23 en 12 partidos) aunque su fragilidad defensiva les ha impedido situarse en la parte alta de la tabla. A pesar de esta derrota como locales, su undécima posición sigue siendo digna de alabar para un conjunto que hace unos meses vagaba por los terrenos de juego de la League One.

Jokanovic en un encuentro en Craven Cottage. Foto: Fulham
Jokanovic en un encuentro en Craven Cottage. Foto: Fulham

Una primera mitad de locura

El sábado el partido era especialmente importante para los Liliwhytes que en los próximos días tendrán que enfrentarse a rivales tan complicados como Norwich City, Aston Villa, Sheffield Wednesday, Huddersfield Town y Brighton and Hove Albion, todos ellos candidatos al ascenso a la Premier League.

Malone dio una asistencia en cada mitadA pesar de las urgencias de los visitantes fueron los locales los que se adelantaron a los cuatro minutos de partido gracias a un tanto de Marley Watkins que aprovechó un grosero error en defensa de Stefan Johansen. El Fulham comenzó desde ese momento a dominar por completo el partido y obtuvo su ansiada recompensa en el minuto 37 por medio de Lucas Piazón que no perdonó la gran asistencia de Scott Malone. El lateral izquierdo dobló como es habitual en él a Aluko que al llevarse a su par dejó solo al canterano de los Wolves que con un gran pase atrás encontró solo en el área grande al brasileño que de un zurdazo batió al guardameta del Barnsley.

La alegría les duró a los londinenses cuatro minutos, que fue lo que tardó su defensa en volver a dejar solo a un delantero rival. Sam Winnall encontró un buen pase entre líneas para batir por raso a David Button que nada pudo hacer. Sin embargo de nuevo poco tiempo después y antes del descanso Sone Aluko empató el partido en una jugada iniciada por Malone que encontró en el borde del área a Johansen que de tacón asisitió al internacional nigeriano que con un gran disparo con la izquierda.

Los jugadores del Fullham celebran el tanto de Malone. Foto: Fulham
Los jugadores del Fullham celebran el tanto de Malone. Foto: Fulham

Expulsión y cierre

El partido cambió por completo en el comienzo de la segunda mitad, pues nuestro MVP de la jornada se sumó a la fiesta goleador en el minuto 46  con el que sin duda alguna es el gol de la semana. Tras un maravilloso recorte hacia dentro realizó un lejano disparo (o quizá centro, dependiendo de como se mire) desde el costado izquierdo del área para batir por la escuadra a Davies.

En el minuto 65 de nuevo el lateral con alma de extremo se incorporó por la izquierda para con un centro medido dejar a en bandeja a uno de los fichajes más sorprendentes del verano, Chris Martin, el cuarto y definitivo gol de la tarde. Si sobre el primer centro hubo dudas sobre la verdadera intención del ex jugador de Milwall o Cardiff entre otros, en este cuarto tanto del partido su guante en la pierna izquierda colocó el esférico exáctamente donde quería.

El encuentro sin embargo aún tenía una última sorpresa guardada y fue la dura entrada a destiempo de Josh Scowen sobre el capitán visitante, Scott Parker, que además volvía a la titularidad este sábado pasado.

Así pues tras unas primeras 11 jornadas donde los delanteros han sido los protagonistas, Scott Malone se cuela en nuestro MVP desde el lateral izquierdo del Fulham para con un gol y dos asistencias convertirse en el jugador de la semana.

Malone posando con los colores del Fulham. Foto: Fulham
Malone posando con los colores del Fulham. Foto: Fulham