Vuelve la Copa de la Liga a Inglaterra y con ello la tensión del todo o nada que generan los eliminatorias a un encuentro. El nerviosismo se masca hasta en los minutos finales, más aún cuando tenemos en octavos un partidazo como es el que disputarán el rejuvenecido Liverpool de Jürgen Klopp frente al dominador Tottenham de Mauricio Pochettino.

Dos equipos históricos de Inglaterra, los dos últimos segundos puestos de la competición, se batirán el cobre por pasar a cuartos. Así es, ambos clubes han llegado a la final en los últimos años para salir derrotados. Hace dos temporadas fue el equipo londinense el que sucumbió frente al campeón, casualmente su vecino, el Chelsea. La temporada pasada fueron los reds los que se llevaron la amarga recompensa de quedar segundos en un torneo eliminatorio. Ambos equipos han cambiado mucho desde entonces.

Duelo de entrenadores

La temporada 2014/15 fue la primera del  argentino en el banquillo del norte del Londres. La modificación de las maneras de los spurs ya estuvieron a punto de dar resultados. El estilo de juego se transformó y pasó a ser más creativo, no tan directo. Una técnica de compenetración que fue innovadora por aquel entonces en el país británico. A día de hoy, con trabajo duro y una extraordinaria plantilla con jugadores como Dele, Kane o Eriksen, el juego se ha visto incrementado exponencialmente hasta estar cerca de ser campeón de Premier League la temporada pasada.

 

Por su parte, el Liverpool también ha mejorado mucho sus características y ha tapado algunas carencias. Desde el aterrizaje del mánager alemán en Merseyside se respira calma en una mitad de la ciudad. El inicio desastroso de la campaña pasada provocó el despido de Brendan Rodgers lo que hizo la magia. Klopp, en su primer partido se tuvo que enfrentar a su rival del martes, y su presencia se notó hasta tal punto que no concedieron ningún gol (el partido acabó en empate sin goles) frente a un equipo de grandes virtudes ofensivas. El crecimiento fue tal que, contra todo pronóstico, llegaron a la final de la Capital One (saliendo subcampeón por penaltis) y a la de la Europa League (derrota frente al Sevilla por 1-3).

Actualmente ha cambiado la situación. Un magnífico  arranque de campaña de los londinenses es ensombrecido por una racha de dos empates que les ha hecho caer a la quinta posición pese a no haber caído ninguna vez en la derrota. El Liverpool va un punto por delante, siendo una de las grandes sensaciones de la liga. Ha logrado victorias épicas por la mínima como las de Stamford Bridge o la del Emirates Stadium en la primera jornada.

Sus últimos enfrentamientos están cargados de una tremenda dosis de igualdad. Tres partidos, tres empates. Pocos goles, el Tottenham a la carga y el replegado Liverpool a la espera de su oportunidad al contraataque. Cualquiera diría que están cansados de verse las caras.

Pero la copa es algo muy distinto, es el torneo donde un minuto te separa de gloria y te hace caer al pozo de los recuerdos. Es la competición de los equipos más modestos. Pocchetino ya advirtió después de la victoria en tercera ronda por cinco a cero al Gillinham que habría rotaciones: “Para mí no son chavales, son jugadores que pueden mostrar que tienen la capacidad de estar en el primer equipo. Es lo mismo jugar en Whiter Hart Lane contra el Gillingham que contra el Liverpool en Anfield”. Posiblemente no ha pronunciado jamás unas palabras más desatinadas, claro está que no es lo mismo, ya sea simplemente por el factor casa.

La batalla, como suele ocurrir en la Copa de la Liga, promete ser apasionante e imprevisible.

Posibles onces inciales

Resulta complicado predecir el once que dispondrán ambos técnicos pues involucrados en la lucha por los puestos de arriba de la tabla de la Premier League, deberán variar sus alineaciones titulares iniciales.

Klopp probará su 4-3-3 con Ings, Sturridge y Origi en ataque mientras Pochettino confiará en los jóvenes Onomah, N'Koudou y Janssen para tratar de superar la defensa Red.