El fútbol está lleno de supersticiones y de historias peculiares, y el Burnley en su vuelta a la Premier League no ha conseguido superar una maldición que dura ya casi 50 años. El West Bromwich Albion destrozó en la noche del lunes a los Clarets por 4-0 y sigue manteniendo la irregularidad en su regreso a la mejor liga del mundo pues en los últimos diez encuentros ha cosechado tres victorias, dos empates y cinco derrotas.

"Aquí me rompí la rodilla y casi se termina mi carrera"Tras el terrible encuentro Sean Dyche se presentó en la rueda de prensa y recordó un capítulo de su pasado que le hizo confesar que algo raro pasa en las West Midlands. "No creo en las supersticiones pero cuando tenía 17 años me rompí la rodilla jugando aquí con el Nottingham Forest y casi se termina mi carrera como futbolista. Por suerte no fue así y con el tiempo pude convertirme en el entrenador del Burnley, pero la verdad es que no hemos ganado aquí desde entonces. Es una de esas cosas extrañas", rememoró el técnico.

Rondón cerró la cuenta. Foto: Premier League
Rondón cerró la cuenta. Foto: Premier League

"Este tipo de cosas pueden afectarte psicológicamente y siempre piensas que el destino te debe una y crees que esta siguiente va a ser la buena, pero se ve que tampoco pudo ser. Según sonó el pitido inicial sientes que en este campo pasan cosas raras", explicó el preparado del Burnley.

"Nos han superado en todo y no nos hemos merecido nada"Sobre el desempeño de los suyos sobre el terreno de juego también tubo unas palabras de crítica pues no todo es la mística en el fútbol. "Yo como entrenador creo en mis futbolistas y en mi equipo pero hoy no hemos sido nosotros mismos. Nos han superado en absolutamente todo desde el comienzo en fuerza, en juego y en cualquier aspecto durante los 90 minutos. Ellos se han merecido todo y nosotros absolutamente nada", analizó.

"No se pueden tener actuaciones así en la Premier League, estuvimos a kilómetros de distancia de lo que es habitual en nosotros. Tuvieron un poco de fortuna en el comienzo con el primer gol pero desde entonces estuvieron por delante en todo y eso no nos afectó en nada. Es muy frustrante porque Tony Pulis como técnico nunca esconde lo que va a hacer o cómo va a jugar su equipo y aunque lo sabíamos no pudinmos pararles", explicó con tristeza el joven entrenador. "Lo hicieron muy bien y no ofrecimos lo suficiente para afectar su juego", añadió.

Por último lanzó un mensaje a sus jugadores de cara a los próximos partidos y aunque aún se encuentran cuatro puntos por encima del descenso, deben mejorar mucho si no quieren sufrir a final de temporada. "Es difícil recibir y aceptar resultados así en la Premier League pero es que no estuvimos nada cerca de lo que podemos hacer en la primera mitad. No se puede esperar esto de nuestro equipo ni en casa ni fuera pero sobre todo a domicilio y tenemos que mejorar mucho en este sentido. En la segunda mitad lo hicimos un poco mejor pero en ningún caso nos acercamos a nuestra mejor versión", finalizó muy disgustado.