El estadio de St. Mary’s se vestía de gala en una soleada mañana, para recibir al Leicester City el vigente campeón de Inglaterra —aunque muy lejos del nivel demostrado en la temporada pasada—, en un partido en el que ambos equipos buscaban alejarse de la zona de descenso lo máximo posible.
Sin embargo, el choque se lo llevaron los Saints que llevaban una racha de cuatro derrotas consecutivas en los últimos cinco partidos —si hubieran sido derrotados hoy, igualarían la cifra del 1998, cuando acumularon cinco derrotas consecutivas—, consiguieron hacer un partido muy completo, uno de los mejores de la temporada. El Leicester City, acumuló dos empates, una victoria y dos derrotas en sus últimos cinco partidos.
Leicester City, tocado y hundido
El Southampton llegaba con muchas bajas algunas de ellas importantes como la de Steven Davis, Matt Targett o Charlie Austin; y a la reciente despedida de José Fonte al West Ham, uno de los jugadores claves en defensa. El Leicester City por su parte, sigue contando con las ausencias de Mahrez, Amartey y Slimani, los tres en la Copa de África de Naciones.
Los de Claude Puel, dominaron el balón desde el comienzo del partido, teniendo la primera ocasión en el minuto seis, tras un buen balón de Tadic, que cayó a la banda izquierda, y el disparo de Redmond que se marchó sobre la meta de Schmeichel. El Leicester no mostraba ninguna acción ofensiva, y los locales avisaban constantemente con jugadas de peligro.
Así fue como en el minuto 25, Ward-Prowse marcaba el primero para el Southampton. Cédric dejó atrás el cuero para que el jugador inglés la cazara dentro del área y disparara con efecto pegada al palo; pudo hacer más Schmeichel que se lanzó tarde a por el balón. James Ward-Prowse marcaba así su segundo gol en esta temporada.
El Southampton acumulaba muchos jugadores en el área contraria; Tadic estuvo muy participativo y muy metido en el encuentro. El Leicester no contaba con la construcción de juego en el centro del campo; Ndidi y Mendy estaban desaparecidos y Drinkwater se encontraba incómodo estando escorado a la derecha.
El único que trató de hacer algo fue Gray con dos arrancadas por la banda izquierda en dos contraataques del Leicester City, y en una falta a la media hora de partido en el borde del área, la cual disparó por encima de la portería defendida por Forster. Se le veía con mucha confianza y en un buen estado de forma; tal vez, el único con la voluntad de querer hacer algo de los foxes.
En el minuto 39, el Leicester City tuvo un despiste defensivo; tras la falta de Mendy sobre Ward-Prowse, este último votó un balón aéreo que ganó Yoshida a Huth y Morgan, y luego del rebote, Rodríguez hacía el segundo para los Saints, su cuarto esta temporada.
El Leicester se hundía en un encuentro en el que no estaba generando nada en ataque y en el que tenía muchos fallos defensivos. Un marcador justo y un dominio claro del Southampton, que a pesar de que había tenido solo cinco ocasiones claras en la primera mitad, marcó dos, recuperando la puntería que le había faltado en anteriores partidos.
La sentencia de ‘Los Santos’
El Leicester City tenía que mejorar muchísimo en la segunda mitad si buscaba realmente remontar el partido; Ranieri optó por retirar a Mendy del terreno de juego e ingresar en su lugar a Albrighton, en el descanso. Más, los cambios en los foxes no afectaron para nada la poca capacidad de reacción que mostraron, además de falta de actitud.
En el minuto 49, Vardy hacía una falta sobre van Dijk, jugador que se marchaba cinco minutos después, con problemas en su tobillo izquierdo. Hojbjerg tuvo varias ocasiones, pero su falta de puntería hizo que lanzara todas desviadas. En el minuto 60, un error de Fuchs —la defensa del Leicester no estuvo nada acertada—, dejaba al danés mano a mano con Schmeichel en un gol cantado que, sin embargo, falló.
El partido en ese momento estaba más cerca de que el marcador subiera a un 3-0 que de acercarse a un 2-1; el Southampton demostró que quería más y encerró a los foxes en su área. Gray dejó de aparecer tanto, Cédric le tapó con gran resultado, pero aun así, el joven inglés era el único que seguía intentando algo junto a Albrighton.
En el 74 de partido, Michael Oliver, el colegiado encargado de arbitrar el encuentro, anulaba un gol a favor del Southampton por fuera de juego de Yoshida; el gol lo había metido Morgan en propia puerta en un intento de despeje. Sería el mismo Morgan quien diera la oportunidad momentos después, cuando hizo un penalti a Shane Long, para que el Southampton de mano de Tadic hiciera el tercero, sentenciando ya totalmente el partido.
Se superaba la estadística de goles encajados del Leicester la pasada temporada —36 goles—, siendo ya 37 los que ha encajado en 22 jornadas.
El Leicester terminó el partido con un juego muy pobre y falta de actitud. Tiene que rearmarse de fútbol, confianza y que tiene que mejorar si no quiere meterse en más problemas. El Southampton, en cambio, completó uno de los mejores partidos de la temporada.