Se cumplió la típica frase del fútbol: "A entrenador nuevo, victoria segura". Así fue, el Leicester City se impuso por tres goles a uno al Liverpool FC del técnico alemán Jürgen Klopp en un encuentro que para los aficionados al fútbol les volvió a recordar al mejor Leicester City de la pasada temporada, en la que pese a no tener la posesión de balón, ganaban los partidos claramente a su rival.

Tras la conclusión del partido, se pudo ver a un Craig Shakespeare muy feliz en la rueda de prensa, donde atendió a los medios de comunicación con una gran sonrisa en la cara. "Ha sido un gran partido, todos estamos encantados con el resultado, las cosas que quería llevar a cabo se han conseguido, la solidez táctica de la que hablaba el otro día ha sido perfecta, además de la defensa, que ha estado muy seria durante los 90 minutos del partido. Estoy muy contento por mi trabajo, el de los jugadores y, sobre todo, por la afición, que se merecían por fin una victoria", declaró Shakespeare.

Un periodista preguntó al nuevo técnico interino de los foxes sobre la situación de los jugadores después del partido, a lo que respondió: "Imagínate, ganar este partido ha sido como quitarse de encima una gran losa que llevaban arrastrando desde hace semanas, ahora mismo están eufóricos, por ejemplo, Jamie Vardy necesitaba marcar para volver a reencontrase con el mismo, es cierto que consiguió un gol contra el Sevilla, pero necesitaba conseguir algún gol en la Premier League, como así ha sido".

El próximo fin de semana, los foxes se enfrentan al Hull City, rival directo por la permanencia en Premier League, el encuentro será el sábado cuatro de marzo a las 16:00 hora española, y ahí se podrá comprobar de verdad si el Leicester City ha cambiado de actitud o el partido contra el Liverpool fue un mero espejismo.