Joey Barton ha vuelto a ser el centro de atención en la Premier League tras confirmarse su sanción por 18 meses al inclumplir la normativa de la FA sobre las apuestas de futbolistas.
Ya cuando el ex internacional inglés regresó al Burnley procedente del Rangers, los Clarets conocían la posibilidad de que dicha sanción se confirmarse, pues Barton siempre fue claro con los directivos del club. Tras reconocer su adicción al juego, al alcohol y sus problemas para controlar su ira, el centrocampista deberá dejar el fútbol por el año y medio de castigo, algo que sin duda Sean Dyche considera que es excesivo. "Joey está muy triste y decepcionado, y nosotros lo estamos también por él, porque también creemos que es una sanción demasiado dura", explicó el técnico en rueda de prensa.
"Cantona tan solo fue sancionado con nueve meses por darle una patada de Kung-Fu a un chico en la cara""Hay que poner todas estas cosas en perspectiva y no tengo muy claro quién hace balance de ellas. Cuando yo era joven , no hace mucho, una leyenda como Eric Cantona fue sancionado con tan solo nueve meses por darle una patada de Kung-Fu a un chico joven de la grada", recordó Dyche con humor. "Todos conocemos las reglas, no se puede apostar en el fútbol si eres futbolista, es así de siempre y Joey lo sabe. Pero la FA tiene también muy claro que no hubo intención alguna más allá de realizar unas apuestas inofensivas, no se intentó nunca cambiar el desarrollo de los partidos", recordó.
"18 meses me parecen demasiado, especialmente teniendo en cuenta algunas de las cosas que he visto en el mundo del fútbol, pero tenemos que respetar la decisión, y lo hacemos. Está claro que están tratando de mostrar su poder con decisiones individuales como estas", analizó el preparador de los Clarets.
"Espero que ahora pasen al resto de engaños, piscinazos y caídas fortuitas en el fútbol. Eso es lo que necesitamos de verdad""Supongo que con esto la FA está mandado un mensaje, y que ahora van a ir a por los tramposos del mundo del fútbol. Espero que ahora vayan a por aquellos de los que llevo hablando ya un año o dos, los que se tiran, fingen lesiones, piscinazos y que intentan engañar a los árbitros. Esos son los que necesitamos de verdad eliminar del mundo del fútbol", dijo con dureza. "Si miramos a estos casos de manera individual, perfecto, hagámoslo así. En cualquier caso espero que no se quede aquí y vean el bien mayor para tratar de mejorar la Premier League y la Football League por medio de decisiones como estas".
Por último salió al paso de los rumores que aseguran que en la zona noble de Turf Moor no se conocía la investigación de la FA que deja al club sin un jugador importante para el tramo final de temporada: "Sabíamos que existía la posibilidad de perderle cuando le trajimos. Desde un punto de vista económico siempre tuvimos cuidado y Joey lo entendió, pero no podíamos negar la obviedad de que era un jugador importante para nosotros que queríamos recuperar, algo que además ha probado en estos últimos meses". "El momento de la sanción es terrible, pero tenemos que mirar hacia delante y es una buena oportunidad para otros chicos de entrar en el equipo. Aún está por ver el efecto que tendrá en la plantilla", finalizó Dyche.