Aunque soñaron con todas sus fuerzas y, por momentos, se veían cerca de conseguir la machada, los jugadores del Arsenal se quedaron sin acceder a la UEFA Champions League veinte temporadas después. El Liverpool ganó al Middlesbrough en Anfield y los Gunners solo pudieron contentarse con su victoria ante el Everton en un Emirates Stadium que fue lo único que pudo celebrar. Se pone fin de esta manera a una Premier League que, al menos para el Arsenal, no ha sido nada positiva. Aunque es cierto que han conseguido 75 puntos, los de Londres no pueden estar contentos con los nueve partidos perdidos, una cifra que, como no podía ser de otra manera, ha tenido el suficiente peso como para considerarla importante en esa no consecución del objetivo final. Tras el encuentro, y como es habitual, Arsène Wenger compareció en sala de prensa para atender a unos medios de comunicación que, por si no había sido suficiente, centraron la gran parte de sus preguntas en el futuro de un entrenador que sigue sin dar ninguna pista.

"Desde enero el entorno ha sido muy difícil por diferentes razones"

Reconociendo que “la situación ha sido difícil” por lo visto fuera del terreno de juego en lo que a la grada se refiere, Wenger deja claro que “en absoluto”, su vuelta de honor al estadio fuera una despedida: “Ha sido difícil. Mi situación personal ha contribuido a ello, pero no debe ser cuestionado, soy profesional. Mientras estoy en un lugar, trabajo hasta el último día. No se puede cuestionar mi amor o lealtad a este equipo porque dije no a todos los clubes del mundo por estar aquí”. Seguro de que haber desvelado antes su futuro no hubiera mejorado el camino de la temporada, el francés pone como ejemplo otros banquillos de los que se desligó con anterioridad: “He dejado otros lugares cuando todavía tenía contrato y trabajaba con el mismo compromiso hasta el último día”.

Catalogando de “triste” la no clasificación para el máximo torneo continental, el entrenador del Arsenal focaliza el inicio de 2017 como punto de inflexión: “Nunca hemos comenzado una temporada sin Champions, por lo que es muy triste. Se puede mirar a muchos sitios, pero desde enero el entorno ha sido muy difícil por diferentes razones. Algunas ya se conocen, y eso es complicado para un grupo de jugadores. De otras, hablaremos otro día. Psicológicamente, el entorno para este vestuario fue terrible y estoy muy orgulloso de lo que han hecho, la forma en la que respondieron y en la que han terminado la temporada”. Finalizando con este tema, cree que “se han perdido muchos partidos”, pero aprovecha para contrastar los veintitrés encuentros ganados de esta temporada con los 26 del “Arsenal de los invencibles”.

"Hay que mantener el noventa por ciento de los jugadores"

Por otro lado, aprovechó para valorar el cambio de esquema y todo lo que puede dar la próxima temporada: “Nos ayudó porque estábamos muy mal en defensa. Creo que reparó y dio más estabilidad defensiva. Quizás, fue demasiado tarde. De todas formas, creo que este grupo de jugadores puede volver el año que viene. Han aprendido mucho y han pasado por momentos difíciles de los que se han recuperado de una manera muy fuerte”. Sobre las altas y bajas que pudieran producirse en el equipo a lo largo del verano, deja claro que “hay que mantener el noventa por ciento de los jugadores y encontrar uno o dos más que fortalezcan el grupo”, por lo que queda por ver si el mercado es ajetreado para los Gunners o no.

Finalmente, valoró la victoria ante un Everton que no le puso las cosas nada fáciles a pesar de no jugarse nada. Los Toffees, que han sido uno de los equipos revelación de esta temporada, comenzaron perdiendo por el tanto de Bellerín a los ocho minutos de partido. Sin embargo, la expulsión de Koscielny al cuarto de hora condicionó un choque en el que el Arsenal bien podía haber empatado: “Hemos jugado bien, muy bien. Estábamos con diez hombres muy pronto, por lo que ganar el partido significa que hemos demostrado lo que hemos hecho recientemente: fuerza, unión y espíritu de lucha”. Precisamente, el central francés será baja en una final de FA Cup que también se perderá Gabriel, quien tuvo que dejar el terreno de juego lesionado. Descartado, prácticamente, por Wenger, desea que la exploración a la que será sometido diga lo contrario. De esta forma, Mustafi y Holding parecen los únicos centrales con los que se medirá al Chelsea el próximo sábado.