Empate entre dos equipos que se espera, estén a final de temporada en la lucha por los PlayOff´s. La primera mitad tuvo un cierto dominio del juego por parte de los locales, pero sus delanteros no pudieron superar a una defensa bastante solida. Sin embargo el conjunto visitante aprovechó una de las pocas acciones de peligro de las que contó para adelantarse en el marcador. La segunda mitad si  que estuvo más disputada, y solo un error de la defensa ‘taurina’ hizo que el conjunto local empatara el encuentro.

Wright-Phillips abre la lata

Desde el inicio del partido se vio a dos equipos volcados al ataque y buscando un juego muy directo, que les diera la oportunidad de sorprender a su rival con un gol tempranero. Esta circunstancia casi fue aprovechada por los Orlando City SC, que por medio de Cyle Larin a punto estuvieron de adelantarse en el marcador. A partir de ese momento el encuentro comenzó a tener un color púrpura, donde el equipo que llevaba las riendas era el local.

Poco a poco, el equipo visitante le estaba logrando disputar el control del juego a su rival, teniendo mayor presencia en campo contrario. Y tras algún acercamiento con peligro, los taurinos consiguieron adelantarse en el marcador. Un fenomenal desmarque de ruptura de Bradley Wright-Phillips, dejó al delantero en un mano a mano con el portero, al que superó con una mejor definición.

Grella disputa el balón con Cerén (Imagen: Bernie Walls)

Durante los siguientes minutos, el partido estuvo mucho tiempo parado, a causa de una serie de faltas de manera continua, que apenas dejaba jugar. Pese a ello, el equipo local volvió a llevar la iniciática en el juego, pero la experimentada defensa de los Red Bulls, impedía que Larin pudiera generar alguna ocasión de peligro.

En los minutos previos al descanso, el conjunto local continuaba asediando la portería de su rival, mientras que New York Red Bulls, comenzaba a encontrar espacios en la fuerte defensa de su rival. El marcador no sería modificado en estos primeros 45 minutos y el colegiado señaló el camino a los vestuarios con todo por decidir.

Molino continúa en racha

La segunda mitad  no pudo tener mejor inicio. Los dos equipos se volcaron al ataque, sin importarles lo más mínimo el aspecto defensivo. Esto llevó a que de manera continua se repitieran ocasiones en ambas porterías, que transformaron el partido en algo muy vistoso para el espectador. La ocasión más clara de este período llegó en los pies de Kaka, que a punto estuvo de sorprender con un disparo pegado al palo, después de controlar un balón libre de marca en el área pequeña.

Con el paso de los minutos, el equipo local comenzaba a sobresalir en el juego más que su rival. Sus llegadas estaban siendo cada vez más peligrosas y en la primera ocasión en la que Larin contó con una acción en la que demostrar su potente zancada, su equipo logró el empate. El joven delantero canadiense se aprovechó de un balón a la espalda de la defensa de rival, y tras superar a su marcador, puso un balón al segundo palo donde se incorporó Molino para empujar el balón a la red.

Cuando apenas quedaban 15 minutos para el final del partido, el entrenador visitante realizó un cambio bastante sorprendente, en el que quitó a su delantero para dar entrada a un lateral. Esto fue considerado como una declaración de intenciones de estar de acuerdo con llevarse un punto de este encuentro.

Con el partido entrando en su fase final, pareció que los dos equipos se quedaron sin recursos ofensivos, ya que los centrocampistas comenzaron a ser los protagonistas del partido, disputándose entre ellos el balón. Cuando apenas restaban cinco minutos para el final, Higuita tuvo un fallo en la salida de balón y al tratar de recuperar el balón, realizó una entrada muy fea a Felipe, con la que vio la tarjeta roja, dejando a su equipo con un jugador menos.

En los minutos finales hubo mucho más juego interrumpido por faltas o sustituciones. Esto hizo que el partido llegara a los 90 minutos reglamentarios con un empate en el marcador, que apenas sirve de mucho a ambos equipos.