Como se ha hablado en muchas ocasiones, el crecimiento que está teniendo el soccer en los Estados Unidos, les lleva a superar sus límites a cada temporada que pasa.
La competición local, la Major League Soccer, está consiguiendo a cada temporada que pase mayor número de aficionados y de apoyos, que está haciéndola ser más conocida. Esta progresión lleva a que cada vez, surjan más franquicias que quieran incorporarse a la competición.
Esto conlleva un futuro muy importante para la liga, ya que desde un par de temporadas, todas las franquicias están obligadas a contar con una academia o categorías inferiores (como queramos llamarle). En ellas es donde realmente reside el futuro del deporte en un país en el que hasta hace poco se le consideraba menor.
Aunque esto no sólo pasa a nivel de clubes al máximo nivel, cada vez son más las escuelas y academias que se crean en el país norteamericano, lo que conlleva que una gran cantidad de niños quieran aprender a jugar a ese deporte de sus ídolos como Landon Donovan, Cristiano Ronaldo o Leo Messi.
Zelalem, Hyndman o Miazga son ejemplos de talentos exportados al futbol europeo
Esto ha hecho que a día de hoy estén apareciendo jóvenes talentos estadounidenses, que irrumpen en grandes equipos europeos como pueden ser Gedion Zelalem (Arsenal FC), Emerson Hyndman (Fulham FC) o Matt Miazga (Chelsea FC). Pero por encima de todos sobresale uno que ha irrumpido con mayor fuerza, es aún más joven (17 años), y en apenas dos años ha vivido un cambio radical en todos los aspectos, Christian Pulisic.
El centrocampista estadounidense dio el salto al panorama del futbol internacional, de la mano de su actual equipo, el Borussia Dortmund. Hasta este día, Pulisic ha superado una gran cantidad de obstáculos que le han hecho crecer como jugador.
La esperanza Yankee
Christian Pulisic ha vivido un ambiente futbolero desde su infancia, ya que su padre Mark, jugó para el equipo de soccer indoor Harrison Heat entre los años 1991 a 1999.
Comenzó a jugar al fútbol cuando apenas contaba con siete años, en los Michigan Rush, cuando su padre se encontraba entrenando a los Detroit Ignition de la Major Indoor Soccer League. Este fue el paso anterior a una decisión que cambiaría su vida por completo.
En el año 2011, Pulisic se unió a los PA Classics, una de las Academias de Desarrollo de la US Soccer más importantes del país, de donde han salido jugadores como Zarek Valentin o David Horst.
“Su humildad es incluso superior a su talento, lo que le está permitiendo tomarse las cosas con perspectiva e ir creciendo, dijo el director de PA Classics Steve Klein. “Siempre creímos que estas cualidades le ayudarían a ‘mantener los pies en la tierra’ para centrarse en su formación y objetivos”.
En los PA Classics continuó sobresaliendo por encima del resto de los compañeros, lo que hizo que fuera seleccionado para el combinado U-14 de los Estados Unidos para disputar varios torneos por Europa. Estos campeonatos le sirvieron a Pulisic para ser seguido por varios clubes del Viejo Continente, pero su físico (más pequeño que el resto de los compañeros para su edad), le llevó a que ninguno de estos confiara en él para incorporarlo a sus escuelas. Tres años después, Pulisic se incorporó a la U-17 Residency Program de Florida, junto a otros jóvenes jugadores estadounidenses.
Después de varios partidos de este combinados U-17 por diferentes países europeos, sólo un equipo confió en Pulisic, el Borussia Dortmund. El conjunto alemán incorporó al jugador en enero de 2015 para su equipo de la categoría U-17, pero tras seis meses, y muy buenas actuaciones, se unió a la plantilla de los U-19 en verano.
Al inicio de esta temporada, Pulisic fue llamado para disputar la Copa del Mundo U-17 con la selección de las ‘barras y estrellas’. El combinado no tuvo una buena participación ya que finalizó en la última posición de su grupo, con sólo un punto tras un empate con Croacia, donde además Pulisic fue uno de los goleadores. Pese a ello, el joven centrocampista tuvo una muy buena participación, que comenzó a llamar la atención del cuerpo técnico del primer equipo ‘borussen’.
A lo largo de la primera parte de la temporada con el equipo U-19, el joven estadounidense logró jugar 15 encuentros en los que anotó diez goles y repartió ocho asistencias. Esto hizo que en el parón invernal de la Bundesliga, Pulisic fuera llamado por el primer equipo para entrenar con ellos en este período. Durante este mes disputó los segundos 45 minutos de dos encuentros, en los que anotó un gol y dio una asistencia.
En apenas un año se hizo con un puesto en el primer equipo del Dortmund
Su buena impresión hizo que a partir de ese momento pasara a formar parte de la primera plantilla del Borussia Dortmund. Su debut llegó el 30 de enero de 2016 en un partido frente al FC Ingolstadt, en donde sustituyó a Adrián Ramos en la segunda mitad. Pulisic continuó participando como suplente en algunos partidos, hasta que llegó su primer encuentro como titular, un mes después frente al Bayer Leverkusen. Su segunda titularidad fue frente al Schalke 04 en el ‘Revierderby’, un partido de mucha importancia dentro del fútbol alemán.
Frente al Hamburgo SV, unas semanas después, consiguió anotar su primer gol en la competición, posicionándose como el cuarto jugador más joven (no alemán), en anotar un tanto. Hasta final de temporada le dio tiempo a jugar algún partido más, hasta sumar un total de nueve, en los que lograría anotar un segundo gol.
Su explosión en el ‘Planeta Fútbol’ y crecimiento exponencial, llevó a Jürgen Klinsmann a convocarlo para un partido de la Fase De Clasificación para la Copa del Mundo 2016, antes de que Croacia (otra posibilidad para Pulisic), le diera tiempo a contar con él. Su debut llegó en esa serie de partidos, en el enfrentamiento que tuvieron los USMNT frente a la selección de Guatemala, en donde los estadounidenses vencieron 4-0. Pulisic salió como suplente, sustituyendo a Graham Zusi.
Posteriormente, llegó uno de los momentos más importantes en la prematura carrera del joven centrocampista. El seleccionador de origen alemán le seleccionó entre los 23 jugadores que disputarán la Copa América Centenario, por delante de muchos futbolistas en su misma posición que están rindiendo a buen nivel.
La participación de Pulisic en esta competición no fue demasiado amplia. Pese a que su selección ha llegado a jugar el 100% de los partidos posibles, él sólo tuvo la oportunidad de disputar tres de los mismos, y en ellos siempre ha contado con pocos minutos.
Curioso es que su participación fue en aquellos partidos en los que su equipo marchaba por detrás en el marcador. En el primer partido frente a Colombia saltó al campo en el minuto 66 cuando su selección ya estaba por detrás en el marcador. En este partido se le vio impetuoso y con ganas de participar, pero apenas pudo dejar unos destellos de su calidad.
Su siguiente encuentro no fue hasta las semifinales frente a Argentina, en la dolorosa derrota que su selección sufrió. Salto al campo en el descanso, pero la superioridad de la selección sudamericana, apenas le dio la posibilidad de participar en el juego.
Su última participación en el torneo fue en la pelea por el tercer y cuarto puesto frente a Colombia de nuevo, saliendo en los últimos minutos del partido y con su selección perdiendo de nuevo.
La participación de Pulisic en esta Copa América Centenario fue una buena toma de contacto en una gran competición a nivel de selecciones para que pudiese ir adquiriendo experiencia de cara a futuras convocatorias.
La irrupción de Pulisic en el panorama del fútbol internacional, ha hecho que muchos aficionados, sobre todo estadounidenses, le comiencen a comparar con la mayor estrella del soccer, Landon Donovan. Las similitudes entre ambos en el inicio de sus carreras, hace que los más optimistas vean en él, al claro sucesor y quien pueda volver a ilusionarles con este deporte. Los dos dieron a conocerse en una Copa del Mundo U-17, tras la cual dieron el salto al fútbol europeo, aunque no tuvieron la misma suerte.
El ‘Capitán América’ sólo estuvo un año en el fútbol alemán, ya que no consiguió adecuarse ni a la cultura, el estilo de juego, ni la vida en el país europeo. Sin embargo, el ‘pequeño’ futbolista de origen croata sólo ha necesitado seis meses para demostrar todo su nivel y demostrar a todos aquellos que no confiaron en él por su físico, se equivocaban.
Si le dejan continuar su formación paso a paso, y el jugador se centra en seguir creciendo, posiblemente estemos ante uno de los mejores jugadores de fútbol de los Estados Unidos.