Segunda jornada de este Torneo Hexagonal para la clasificación a la Copa del Mundo 2018 y la selección de Estados Unidos se encuentra en apuros. En esta fecha se enfrentaba a dos de los favoritos junto a ellos para la clasificación, pero la derrota frente a México les pone en apuros a las primeras de cambio. Los costarricenses lograron comenzaron con buen pie y el historial de enfrentamientos entre ambos les hace ser optimistas, aunque contra un equipo de la importancia de los norteamericanos no pueden dejar nada al azar, ni confiarse.
Continuar con la historia
La selección ‘Tica’ es la tercera selección con mayores posibilidades de clasificarse para la Copa del Mundo. Aunque a priori se la suele considerar un escalón por debajo de las dos gigantes como son México y su rival de este partido (Estados Unidos), por lo que no conviene tomarlos a la ligera.
La importancia de iniciar con victoria los dos primeros partidos del campeonato Hexagonal, hizo que comenzaran a preparase para estos encuentros una semana antes, cuando todavía quedaban varios jugadores en sus respectivos equipos. El conseguir el primero de sus objetivos, comenzar con una victoria frente a Trinidad Tobago, les deja en el buen camino para continuar con el buen desarrollo de la competición. Esto, sumado a que el Estadio Nacional de Costa Rica en un fortín para la ‘Tri’, hace que creer al aficionado en las posibilidades de victoria.
Pese a lo temprano de este enfrentamiento, puede considerarse como una auténtica final para ambos. Una victoria frente a Estados Unidos sería algo muy importante ya que dejaría a un rival directo por la clasificación a seis puntos, una distancia muy complicada por salvar
Sin demasiada exigencia
En esta victoria lograda en la primera jornada frente a los caribeños, al selección costarricense planteó un partido muy inteligente en el que dio los primeros minutos la iniciativa a su rival, mostrándose así más cautelosos, a la espera de la propuesta del juego de estos. Este planteamiento hizo que los trinitenses tuvieran mucha circulación de balón, tratando de crear espacios en la defensa rival en donde aprovechar la velocidad de sus atacantes.
No fue hasta casi llegada a la hora de partido cuando la dinámica comenzó a cambiar a raíz de la entrada en el terreno de juego de Joel Campbell. La velocidad del extremo del Sporting CP se convirtió en un problema para la defensa rival, lo que conllevó a que su selección abriera el marcador gracias a un remate de Bolaños.
Con el combinado de Trinidad y Tobago completamente volcado al ataque, Bolaños organizó un contraataque en el que sirvió el balón a Matarrita para que este pusiera el definitivo 0-2 en el marcador, y que los tres puntos volaran para tierras centroamericanas.
Tras este encuentro, un hecho positivo sobrevuela la cabeza del seleccionador, y es que no ha sufrido ninguna baja importante en el plantel, lo que le permite contar con todos los jugadores seleccionados para este importantísimo partido.
La maldición se torna en contra
La selección de las ‘barras y estrellas’ es consciente de que no ha empezado con muy buen pie este Torneo Hexagonal, en donde se enfrentaba a las dos selecciones favoritas junto a ellos. Plantearon este comienzo como vital para el buen desarrollo del mismo, pero a las primeras de cambios sufrió un duro revés, perfectamente asumible.
Pero ya no ha sitio para más. Esta senda de malos resultados contra selecciones importantes tiene que acabar. El soccer tiene que comenzar a soportar sobre sus hombros la misma responsabilidad que la Major League Soccer a nivel local está llevando. El partido frente a Costa Rica es claramente más importante de lo que se piensa. La derrota no es una opción. Klinsmann está obligado a lograr una victoria si quiere mantener tranquilas a las masas de aficionados que llevan años viviendo una decepción tras otra.
Estados Unidos nunca ha ganado en Costa Rica
Pero la dificultad de este encuentro radica en una estadística más que demoledora. Si los mexicanos lograron poner fin a una maldición de más de cuatro años, en donde siempre perdían en Columbus por un marcador de 2-0. La selección norteamericana tiene la suya propia en el país centroamericano. Ha visitado la capital del Costa Rica en diez ocasiones en fase de clasificación para la Copa del Mundo, con una estadística muy negativa en la que perdió ocho encuentros y dos empates. Esta circunstancia pone un grado de dificultad al partido, haciéndolo más importante de lo esperado. Lograr una victoria le reportaría el resarcirse de la derrota frente a México y el final de una maldición histórica.
Luces y sombras
En su último partido disputado, el que le enfrentó a la selección azteca, los estadounidenses salieron derrotados por un marcador de 1-2, en donde no se vio reflejado lo ocurrido en el terreno de juego. Solo un gol del veterano central Rafa Márquez decantó el partido a favor de los visitantes, rompiendo la maldición del #DosaCero.
Durante la primera mitad, la selección mexicana fue absolutamente superior a su rival, que a causa de un planteamiento rácano de los norteamericanos, tuvo una gran cantidad de llegadas peligrosas al área. El primer gol fue de Miguel Layún al aprovecharse de un error en la salida de balón del rival.
La segunda mitad se vio un partido completamente diferente al anterior, con los USMNT siendo los claros dominadores y consiguiendo empatar al poco de volver del descanso. Tras varias ocasiones a lo largo de los 45 minutos en donde Talavera se convirtió en el héroe del equipo, fue Márquez en los minutos previos al final consiguiera el gol de la victoria.
Si Klinsmann no quiere meterse en problemas a las primeras de cambio, una victoria es obligatoria.
Fortín inexpugnable
El Estadio Nacional de Costa Rica es todavía territorio por conquistar para los norteamericanos. A pesar de que en enfrentamientos históricos sean estos los que dominan con una victoria sobre su rival (de 33 enfrentamientos entre ambos, 14 victorias fueron para los Estados Unidos, 13 para Costa Rica y seis empates), en fase de clasificación para la Copa del Mundo nunca han conseguido conseguir la victoria.
El último enfrenamiento entre ambos en esta fase de clasificación data de septiembre de 2013, en donde con la clasificación casi asegurada, los estadounidenses perdieron por un contundente 3-1. Muchos de los jugadores que disputaron aquel partido, siguen siendo parte de la actual selección de las ‘barras y estrellas’, incluso repitiendo titularidad.
Aunque el último partido oficial que ambos equipos disputaron fue el pasado verano en la fase de grupos de la Copa America Centenario, celebrado en el país norteamericano. En ese partido, los que ejercían como locales lograron golear de manera sorprendente a su rival, en un partido en el que los ‘ticos’ comenzaron con mucha intensidad, encerrando a su rival en campo propio, pero un penalti ‘tonto’ permitió a estos adelantarse en el marcador. Siguieron controlando el juego durante la primera mitad, pero los estadounidenses aprovecharon sus acciones a la contra para poner una distancia casi insalvable en el marcador con dos goles más. La segunda mitad continuó siendo un monólogo de los costarricenses, en donde su rival solo se defendía, hasta que lograron cerrar la goleada en los minutos finales.
Convocatoria
Costa Rica
El seleccionador costarricense, Óscar Ramírez, mantiene al mismo plantel de jugadores y apenas ha realizado cambios en el mismo, por lo que contará con los 23 seleccionados la semana pasada:
Porteros: Keylor Navas (Real Madrid/España), Patrick Pemberton (CD Alajuelense/Costa Rica), Esteban Alvarado (Trabzonspor/Turquía).
Defensas: Michael Umaña (CD Alajuelense/Costa Rica), Cristian Gamboa (Celtic/Escocia), Johnny Acosta (CS Herediano/Costa Rica), Bryan Oviedo (Everton FC/Inglaterra), José Salvatierra (CD Alajuelense/Costa Rica), Francisco Calvo (CD Saprissa/Costa Rica), Ronald Matarrita (New York City FC/Estados Unidos), Kendall Waston (Vancouver Whitecaps FC/Canadá), Pablo Salazar (CD Herediano/Costa Rica).
Centrocampistas: Celso Borges (Deportivo La Coruña/España), Christian Bolaños (Vancouver Whitecaps FC/Estados Unidos), Randall Azofeifa (CD Herediano/Costa Rica), Yeltsin Tejeda (Lausanne-Sport/Suiza), Johan Venegas (Montreal Impact/Canadá), David Guzman (CD Saprissa/Costa Rica), Rodney Wallace (Sport Recife/Brasil).
Delanteros: Bryan Ruiz (Sporting Club/Portugal), Joel Campbell (Sporting CP/Portugal), Marco Ureña (Brøndby IF/Denmark), Ariel Rodríguez (Bangkok Glass/Tailandia).
La selección de Estados Unidos ha sufrido una variación con respecto a la pasada jornada, ya que el portero Howard se ha marchado por una lesión en el abductor, lo que deja la convocatoria en 25:
Porteros: Brad Guzan (Middlesbrough FC/Ingalterra), Ethan Horvath (Mölde FK/Noruega), William Yarbrough (Club Leon/México).
Defensas: Matt Besler (Sporting Kansas City/Estados Unidos), Steve Birnbaum (DC United/Estados Unidos), John Brooks (Hertha Berlin/Alemania), Cameron Carter-Vickers (Tottenham Hotspur FC/Ingalterra), Timmy Chandler (Eintracht Frankfurt/Alemania), Omar Gonzalez (Club Pachuca/México), Fabian Johnson (Borussia Mönchengladbach/Alemania), Michael Orozco (Club Tijuana/México), DeAndre Yedlin (Newcastle United FC/Ingaterra).
Centrocampistas: Alejandro Bedoya (Philadelphia Union/Estados Unidos), Michael Bradley (Toronto FC/Canadá), Lynden Gooch (Sunderland FC/Inglaterra), Julian Green (FC Bayern München/Alemania), Jermaine Jones (Colorado Rapids/Estados Unidos), Sacha Kljestan (New York Red Bulls/Estados Unidos), Christian Pulisic (Borussia Dortmund/Alemania), Caleb Stanko (FC Vaduz/Liechtenstein), Graham Zusi (Sporting Kansas City/Inglaterra).
Delanteros (4): Jozy Altidore (Toronto FC/Canadá), Aron Johannsson (Werder Bremen/Alemania), Jordan Morris (Seattle Sounders FC/Estados Unidos), Bobby Wood (Hamburgo SV/Alemania).
Posibles Onces
