El Atlanta United volvió a ganar por goleada al Chicago Fire en un partido que se acabó a los 11 minutos. Dos fallos en los primeros minutos del encuentro declinaron en partido a favor de los locales con un gol y una expulsión. A partir de ese momento el dominio local fue constante hasta que consiguieron encontrar los espacios en la defensa rival y decantar partido a su favor. Dos goles de Josef Martínez y otro del ‘Tito’ Villalba redondearon una goleada que mantiene a los aficionados con las esperanzas de lograr algo grande.

Sin más historia

Solamente necesitó 11 minutos el equipo de Atlanta United FC para poner el partido completamente de cara. En la primera acción de los locales sobre la portería de su rival, Gressel realizó un robo en salida de balón y tras encarar a la defensa disparó a puerta, pero fue el lateral visitante el que se introdujo el balón en su propia portería.

Unos minutos después, el Chicago Fire volvió a perder otro balón, lo que generó una contra en la que Josef Martínez fue derribado cuando se dirigía sólo frente al portero. Esta acción provocó que el central visitante Kappelhoff viera la tarjeta roja directa, obligando a su entrenador a realizar un reajuste en esta línea para fortalecerla.

Garza disputa un balón alto sobre Solignac (Imagen: usatoday.com)

A partir de ese instante, el dominio de los locales pasó a ser abrumador, tanto que la posesión del balón estaba siendo de 82% para estos. A pesar de ello, el Fire no se amedrentó y tuvo algunos acercamientos esporádicos sobre la portería local, pero en unas ocasiones el portero y en otras la defensa, detuvieron todas las acometidas.

Los minutos pasaban, y los locales no estaban consiguiendo transformar su dominio en ocasiones. La expulsión obligó a los de Illinois a formar con dos líneas muy juntas sobre el borde del área, que impedía darle profundidad a sus acciones. La única manera en la que conseguían poner en peligro la portería rival, eran con balones en largo o centros desde la banda, que eran muy fáciles de despejar.

En el tiempo previo al descanso, los locales se dedicaron a mantener una posesión de balón inerte, esperando que el colegiado marcara el camino de los vestuarios.

Los espacios aparecen y los goles llegan

La segunda mitad comenzó con la misma sintonía con la que acabase la anterior. Mucha circulación de balón con la clara intención de crear espacios en la defensa rival, algo que hasta el momento estaba pareciendo imposible.

Cerca de la hora de partido, el Chicago Fire comenzó a confiarse y adelantar unos metros sus líneas, pero contra los locales no pueden confiarse. Los del ‘Tata’ Martino robaron de nuevo un balón en salida del rival y Almirón colocó un pase entre líneas a las espalda de la defensa para Josef Martinez. Al delantero venezolano no le tembló el pulso en el momento de definir para aumentar la distancia en el marcador y en la tabla de goleadores (cuatro goles en total).

A partir de este momento, el partido se abrió, con unos visitantes que realizaron una sustitución con la que sumaban un efectivo al ataque, con clara intención de buscar el empate. Esta sustitución cambió la dinámica del juego del Fire permitió que se generasen más espacios en una defensa rival que comenzaba hacer aguas. Fue así como Almirón centró un balón al punto de penalti, y un defectuoso despeje de la defensa, le otorgó la oportunidad de disparo a Villalba, que con un potente golpeó anotó su primer gol en liga.

Asad disputa un balón con Accam (Imagen: @ariellec)

En el tiempo que restaba hasta el final del encuentro, todo el juego se desarrolló por completo en campo de Chicago. Fueron continuos los acercamientos para tratar de perforar de nuevo la portería de Bava, lo cual consiguieron a falta de tres minutos. Josef volvió a realizar un extraordinario desmarque de ruptura que le posicionó frente al guardameta, y tras quitárselo de encima y casi sin ángulo, anotó el que sería cuarto y definitivo gol del encuentro.

Con este gol finalizaría la segunda victoria de la temporada del equipo y expansión, y la primera frente a sus aficionados.

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Sobre el autor
Manuel Vaquero Rodríguez
Apasionado del deporte rey. Disfruto con todo lo que tenga que ver con el fútbol, ver, escuchar, jugar, escribir. Entrenador de fútbol base, disfruto enseñando, pero más aprendiendo. Un buen entrenador es aquel que se hace así mismo, de campos de tierra a grandes estadios. Amante del fútbol internacional y poder descubrir jugadores desconocidos.