New York Ciry FC se llevó la victoria como visitante en un partido en el que Vieira realizó varios cambios en el once, dando entrada a muchos de los jóvenes del equipo. En la primera mitad los visitantes se pusieron rápidamente por delante en el marcador, pero poco a poco el Crew fue creciendo en el partido hasta conseguir el gol del empate. Estos también tuvieron varias ocasiones para haberse puesto por delante, pero el portero local estuvo muy acertado. En la segunda mitad, obtuvieron el gol tras la insistencia demostrada, pero surgió entonces la juventud de los ‘citizens’ para dar la victoria al equipo.

Columbus se queda corto

Desde el primer minuto, se pudo ver con claridad que sería un partido en el que los dos equipos  se disputarían la posesión del balón, y tratarían de llegar al área del rival, manteniendo el control del mismo. Los locales fueron los que más insistencia tuvieron, y los que lograron las mejores acciones, pero sin embargo, fue su rival el que logró anotar el primer gol.

Una recuperación cerca del área finalizó con un magistral pase de Maxi Moralez a la espalda de la defensa. Este balón fue recepcionado por Harrison, que sólo tuvo que colocar el pie para que el esférico se colase en el interior de la portería.

Hiaguaín anotó un buen gol de volea (Imagen: usatoday.com)

A pesar del gol, el conjunto local continuó llevando la manija del partido, mientras que un New York City desconocido, apenas estaba pudiendo generar acciones de peligro. Cada acción, conseguían que acabara unos metros más cerca de la potería. Y con esta dinámica, cerca de la media hora, los locales consiguieron el ansiado empate. Higuaín de volea remató un centro desde la banda izquierda, que ponía un empate más que merecido.

Con este gol, los ‘citizens’ se convirtieron en los dominadores del balón, teniendo gran posesión del mismo, y dejando a su rival durante muchos minutos sin salir de campo propio. Esto les permitió alejar el peligro de su propia portería, pero sin embargo, no estaban consiguiendo llevarla a la del rival. El control sobre el juego, estaba dando pie a una escasa profundidad de sus acciones.

Bajo esta circunstancia finalizó una primera mitad, y dio paso a un tiempo de descanso en donde los entrenadores deberían trabajar para conseguir su objetivo de una manera más rápida.

Herrera toma el mando

A la vuelta del segundo tiempo los locales salieron muy enchufados, lo que les permitió dar la vuelta en el marcador y anotar un gol. Presión muy alta del Crew que permitió a Finlay robar un balón en banda y pasar el balón al interior del área, donde Higuaín dejó pasar el balón entre sus piernas para que Kamara anotase a portería vacía.

Comenzó entonces el dominio del New York City FC que se hizo una vez más con el control del balón, buscando crear superioridad en el centro del campo, con unos jugadores técnicamente superiores. De esta manera, estaba consiguiendo tener un control sobre la pelota en campo rival, pero en ocasiones era una posesión inerte, ya que no conseguía profundidad en el área.

Yangel Herrera realizó un partido muy completo (Imagen: usatoday.com)

No fue hasta pasada la hora de partido cuando en una acción muy larga, con dos centros al área casi seguidos, igualaron el encuentro. El joven mediocentro Yangel Herrera, que hasta el momento estaba cuajando un buen partido, remató de cabeza el balón en el interior del área, poniendo de nuevo las tablas en el marcador.

El equipo visitante quería más, buscaba una victoria que le acercase de nuevo al primer puesto de la calcificación. Continuó llevando el peso del partido, dejando a su rival que sólo pudiese generar algunas contras con las que apenas llegó al área. Tanto fue así, que a escasos diez minutos para el final del tiempo reglamentario anotaron el gol que les volvió a poner por delante.

El mediocentro venezolano, Herrera, puso la guinda a su gran partido en una jugada en la que presionó un balón en la frontal del área rival, lo  recuperó y asistió a Harrison para que anotara el gol que a la postre, significaría la victoria.

A partir de ese momento, los dos entrenadores comenzaron a realizar un ‘baile’ de cambios, con intenciones claramente diferentes. Mientras que los locales dieron entrada a jugadores ofensivos para buscar un gol que les diera un punto. Su rival dio entrada a más defensores, con la idea de mantener el resultado.

Pero por más que asediaron la portería de su rival, la poblada defensa de los neoyorkinos les impidió generar acciones de claro peligro, lo que llevó al partido a finalizar con la victoria para el equipo visitante, que logra recuperar las buenas sensaciones.