El conjunto local se quedó con los tres puntos después de un partido en el que apenas tuvo dominio sobre el balón como en otras ocasiones, pero su pegada fue la necesaria para lograr la victoria. En la primera mitad el equipo del Real Salt Lake se mostró bastante superior, pero una acción en la que cogió al equipo mal posicionado, fue aprovechada por el rival para adelantarse en el marcador. A partir de ese momento el dominio visitante fue absoluto, pero no consiguieron transformarlo en ocasiones de gol. Esto hizo que los locales aprovechasen las contras para finiquitar un partido muy cómodo.

Gol y a guardar

Ya desde un inicio quedó demostrado que el equipo local quería poner el partido de cara lo antes posible. Buscó con insistencia la portería del rival, teniendo mucho control sobre la pelota, y apenas dejando que su rival tuviese ocasión de disputársela.

Pero poco a poco, el Real Salt Lake fue adquiriendo protagonismo con el balón, buscando sobre todo no verse asediado por su rival, y tener ellos también sus opciones de llevarse un resultado positivo. Sin embargo, los locales aprovecharon una situación en la que su rival se encontraba saliendo con el balón jugado, y tras varios pases buscando crear espacios, el balón le llegó a Feilhaber que con un disparo ajustado al palo, adelanto a su equipo.

Sánchez y Rusnák disputan un balón (Imagen: usatoday.com)

El Real Salt Lake no bajó los brazos a pesar del resultado y continuó con su idea de tener el control del juego. Sin embargo, esta superioridad que estaban logrando no tenía sus frutos en el ataque, ya que la presión que si rival le ejercía en la zona de creación, imposibilitaba las llegadas. Tan sólo hubo una jugada de peligro en este período, acabando la misma en gol, pero el colegiado lo anuló por fuera de juego.

Los ‘Wizs’ tenían claro su planteamiento, con el marcador a favor, continuarían aguantando las acometidas del rival sobre su portería, permaneciendo bien posicionados y sin apenas dar espacios. A pesar de ello tampoco se olvidaron del ataque, y cada recuperación de balón se convertía en una veloz transición en la que conseguían generar peligro, o por lo menos finalizar la jugada con un disparo sobre los tres palos.

Hasta el final de la primera mitad, el equipo visitante continuó buscando el gol, no bajó los brazos, pero el entramado defensivo de su rival, le negó la opción de gol en cada una de sus acciones.

Un Real Salt Lake poco efectivo

En la segunda parte, los visitantes continuaron teniendo el control del balón, pero apenas estaban consiguiendo llegar al área. Sin embargo, la historia volvió a repetirse, y en un balón en largo desde la defensa, Dwyer se hizo con la posición y controló el esférico. Encaró portería soltó un derechazo que introdujo el balón en el palo más alejado. Un gol de nuevo psicológico que dejaba muy tocado al equipo rival.

Los ‘Claret & Cobalt’ continuaban insistiendo, pero al igual que hasta el momento, no lograban darle la profundidad necesaria a sus acciones para poder anotar un gol. La gran mayoría de las jugadas que conseguían elaborar, finalizaban en los pies de los defensas.

Dwyer volvió a anotar para SKC (Imagen: usatoday.com)

El Sporting Kansas City siguió a lo suyo. Los dos goles de ventaja en el marcador y el poco acierto de su rival en el ataque les estaba dando la posibilidad de tener un cómodo encuentro. Esto no significaba que descuidase el ataque y en varias ocasiones Dom Dwyer tuvo opciones al contraataque en las que se quedó sólo ante el guardameta, pero no estuvo acertado en la definición.

En los minutos posteriores, el conjunto visitante no cejó en su empeño de conseguir el gol que les ayudase a acercarse en el marcador y de incluso buscar el empate un empate con épica. Pero no tuvieron suerte. Este no fue el mejor partido para los ‘Royals’ que a pesar de tener mayor control del balón y de tratar de generar mayor peligro, no consiguieron la recompensa del gol.

Sin embargo, el equipo local consiguió en la última jugada, anotar un gol que redondeaba la goleada y aseguraba la victoria de nuevo en su estadio.