Ya está aquí la decimosexta jornada de la Major League Soccer. Un fin de semana cargado de partidos de altísimo nivel en el que el líder de la Conferencia Este, Toronto FC, deberá derrotar al colista, DC United, para evitar que el Chicago Fire de Bastian Schweinsteiger le arrebate la primera posición. A priori todo apunta a una victoria local, sin embargo esto es la MLS, una liga donde no hay rival pequeño y todo puede ocurrir.
Ganar para seguir en lo más alto
Tras 15 encuentros disputados, Toronto FC lidera la Conferencia Este con un total de 29 puntos, solo uno más que su inmediato perseguidor, Chicago Fire. Un traspié ante DC United, unido a la victoria del Fire frente a New England Revolution, podría provocar que los canadienses quedaran apeados de la primera posición, algo que parecía altamente improbable hace apenas unas jornadas. ¡Las vueltas que da la vida!
Las bajas han golpeado duramente a los pupilos de Greg Vanney en los últimos tiempos, lo que ha provocado un bajón considerable en el rendimiento del equipo. No obstante, para este encuentro, el técnico estadounidense podrá alinear juntos de nuevo a Michael Bradley, Jozy Altidore y Sebastian Giovinco, algo que no ocurría desde hace más de mes y medio en la victoria por 2-1 ante Orlando City.
No todo son buenas noticias, y es que jugadores tan importantes como Nick Hagglund y Tosaint Ricketts continúan recuperándose de sus respectivas lesiones y no entrarán en la convocatoria para medirse a DC United.
A pesar de regresar de una complicada lesión y no estar al 100%, el hombre más peligroso de Toronto será, sin duda, Giovinco. La calidad del astro italiano es de sobra conocida por todos en la Major y, aún así, cuando está inspirado, es prácticamente imposible frenarlo. ¡Muy atentos a la `hormiga atómica´!
Abandonar el farolillo rojo
DC United está cuajando una temporada terriblemente mala. Actualmente es el colista de la Conferencia Este, con un balance de cuatro victorias, tres empates y siete derrotas en los 14 partidos que lleva disputados. Cifras nefastas que le sitúan muy lejos de la lucha por los puestos de PlayOff.
No obstante, la franquicia capitalina no quiere rendirse aún y considera que una victoria en el campo del líder podría proporcionarles ese "empujoncito" necesario para salir del fondo de la tabla y pelear por algo más en la presente campaña. Despedirse de cualquier opción de clasificación para la postemporada a estas alturas de la competición sería un mazazo demasiado fuerte para cualquiera de los 22 equipos que conforman la MLS.
Para este duro enfrentamiento, Ben Olsen, técnico de DC United, debe hacer frente a las bajas por lesión de Rob Vincent, Nick DeLeon, Sean Franklin y Patrick Mullins.
Los de Washington son, con diferencia, la franquicia menos goleadora del campeonato por lo que sus opciones de puntuar en un escenario tan complicado como el BMO Field pasan, en gran medida, por las manos de su guardameta Bill Hamid. A sus 26 años, el de Virginia se ha convertido en uno de los mejores cancerberos de la MLS y forma parte de los candidatos al relevo generacional de la portería de los USMNT.
Supremacía canadiense
En el global de encuentros entre ambas franquicias, Toronto FC sale ampliamente favorecido con 13 victorias frente a las cuatro de los capitalinos y un total de 9 empates. Del mismo modo, cuando la pelota rueda sobre suelo canadiense la ventaja sigue siendo para el cuadro local: ocho triunfos por una única victoria de DC United y cinco empates.
José Carlos Rivero, el encargado de impartir justicia
Este choque se disputará en el BMO Field, donde juega sus partidos como local Toronto FC. Además de ser utilizado para la práctica del soccer a nivel de clubes, este estadio es utilizado también por la selección canadiense de fútbol y el equipo nacional de rugby para sus encuentros en casa. Fue inaugurado en 2007, con césped artificial y con capacidad para 20.500 espectadores, sin embargo, con las últimas reformas, se ha instalado césped natural y se ha incrementado su aforo hasta alcanzar las 30.991 localidades.
El colegiado designado para este duelo es José Carlos Rivero. A sus 36 años, cuenta con una amplia experiencia en las distintas categorías y competiciones del soccer estadounidense pero nunca ha dirigido un encuentro internacional.
Posibles onces
