Esta nueva victoria de los San Jose Earthquakes en el California Clasico les permite continuar con el sueño de los PlayOff´s al alcance de la mano. En la primera mitad se pudo ver a un conjutno local muy insistente sobre la portería de su rival, pero poco a poco fue diluyéndose hasta el punto que sólo consiguieron realizar un disparo sobre los tres palos. En el tiempo extendido, Qazaishvili consiguió aprovecharse de la pasividad defensiva para adelantar a su equipo. En la segunda mitad, a pesar de tener el control en los primeros minutos, la expulsión Smith provocó que los visitantes comenzasen a tener un partido más tranquilo, que reforzó con dos goles en los últimos minutos.

Miedo a no perder

Los primeros minutos del partido fueron de un claro dominio local, que mantuvo a su rival encerrado en campo propio, pero apenas consiguió convertir esta superioridad en ocasiones de peligro. Sin embargo fuero los ‘Quakes’ los que tuvieron la ocasión más clara cuando Ureña se hizo con un balón en el centro del campo y con sólo el portero por delante. Cuando el gol era lo más sencillo, el futbolista costarricense erró en la definición.

Esta acción de los visitantes les sirvió para sacudirse el dominio de su rival y comenzar a tener mayor protagonismo en el ataque, aunque esto no significó que las ocasiones llegasen. Esta circunstancia llevó a que el partido a ser un ir y venir de un área a otra sin que los guardametas tuviesen mayor protagonismo que sacar de puerta.

Cuando se superaba el minuto 20 de partido, la mala suerte volvió a aparecer en el equipo angelino. El lateral Van Anholt cayó al suelo tras un feo gesto de su rodilla, lo que obligó a tener que sacarle en camilla del terreno de juego.

Este suceso noqueó a los angelinos, que a partir de ese momento se convirtió en un equipo sometido a un rival que poco a poco estaba consiguiendo acumular una gran cantidad de ocasiones de peligro. Kempin tuvo que actuar en éxito en dos de ellas para conseguir mantener la portería a cero.

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En los últimos minutos de la primera mitad, el Galaxy volvió a hacerse con el control de la pelota, apoyándose en los hermanos Dos Santos, que estuvieron riendo al nivel esperado. Tanto fue así que Jonathan gozó de la ocasión más clara del partido hasta ahora, cuando estrello un disparo en el larguero.

Sin embargo, con el tiempo prácticamente cumplido, el equipo visitante consiguió adelantarse en el marcador. Salinas sacó un córner al segundo palo en donde apareció Qazaishvili que con una volea, mandó el balón al fondo de la red y adelantó a su equipo.

La luz de la Galaxia se apaga

Con el inicio de la segunda mitad, se vio a un conjunto local muy insistente, buscando la portería de su rival para empatar un encuentro que se les estaba poniendo cuesta arriba. En una de las acciones sobre la portería rival, los angelinos obtuvieron un penalti tras caer derribado Joao Pedro. Pero con ayuda del Video Assistant Referee (VAR), el colegiado marcó la falta fuera del área.

Pero las malas noticias para los locales no acabaron ahí, ya que unos minutos después se quedaron con un jugador menos. Nathan Smith dio una patada a destiempo a Imperiale, lo que obligó al colegiado a mostrarle la tarjeta roja y el camino a los vestuarios.

A partir de ese momento, el San Jose Earthquakes empezó a llevar la manija de un partido que se le ponía de cara, ante un rival que fue apagándose poco a poco. De manera continua, superaron a sus rivales, con ocasiones constantes, aunque no muy acertadas.

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A falta de diez minutos para el final del partido, los visitantes lograron la recompensa a la insistencia mostrada con anterioridad. De nuevo en un mano a mano con el portero, Ureña se aprovechó del espacio a la espalda de los defensas, y ante la salida de Kempin  lo superó con una gran definición.

Los Angeles Galaxy, con dos goles de diferencia, buscaron una heroica que les permitiese empatar el partido. Pero el equipo estaba completamente rendido, y fruto de ello su rival consiguió redondear la goleada. Un disparo de Amarikwa desde la frontal fue rechazado por el portero hacía una zona donde nunca debe ir, el interior del área. Apareció por esa posición el delantero Wondolowski que sólo tuvo que empujar el balón.

Esta victoria de los ‘Quakes’ les permite continuar en la lucha por los PlayOff´s ante unos Galaxy que queda noqueados en la lona y con vistas a comenzar a preparar el proyecto para la próxima temporada.