Noche de fiesta en Algarve, la selección lusa cerraba un mágico 2016 con un partido en casa ante su afición. Un partido que comenzó con claro dominio de los lusos, que tuvieron en Ricardo Quaresma - autor de un doblete- a su mejor hombre. Con esta victoria la Seleção se mantiene segunda de grupo a tres puntos de Suiza.

Dominio desde el primer minuto

Pese a que el primer gol de los de Fernando Santos tardó casi media hora en subir al marcador, el partido comenzó con un claro dominio de los lusos que vieron como el meta visitante, Andris Vanins, atajaba con seguridad los disparos que llegaban a la portería letona.

El primer acercamiento llegó antes de los cinco primeros minutos del encuentro y las ocasiones se fueron sucediendo e intensificando hasta que en el minuto 26  Nani era derribado dentro del área y el colegiado escocés Bobby Madden no dudaba en señalar penalti. Acto seguido Cristiano Ronaldo anotaba la pena máxima y el 1-0 subía al marcador.

Iban pasando los minutos y el dominio de los lusos se fue intensificando con llegadas al área letona que eran repelidas por la defensa o atajadas por el meta Vanins.  

Se llegaba al descanso con un dominio incontestable de los lusos y con el marcador reflejando el 1-0. Un resultado engañoso, pues el conjunto de Fernando Santos podría haber hecho mayor esa diferencia si hubiese materializado las ocasiones de las que dispuso a lo largo del primer tiempo.

La segunda parte se inició tal y como se había dejado la primera, con Portugal dominando sin tener grandes ocasiones para ampliar su renta en el marcador y con una Letonia que tenía en los contraataques a su mejor aliado.

Poco después de la reanudación del encuentro, en el minuto 57, André Gomes era claramente derribado dentro del área y el árbitro señalaba el segundo penalti del partido favorable a Portugal. El penalti lanzado por Cristiano Ronaldo daba en el palo y era rechazado por el portero letón. Se llegaba a un momento incierto para la Seleção, pues habían dispuesto de varias ocasiones sin llegar a transformarlas y el fantasma del empate comenzaba a sobrevolar en el Estádio Algarve.

En el minuto 60 el seleccionador letón, Marians Pahars, daba entrada a Arturs Zjuzins y el mismo jugador, siete minutos después, anotaba el gol del empate para Letonia en un balón rechazado por la defensa lusa que le caía en los pies y definía a portería para empatar el partido y meter el miedo en el cuerpo de los aficionados lusos.

La entrada de Quaresma, la llave que dio la victoria a la Seleção

Dos minutos antes del gol de Letonia, Fernando Santos decidía dar entrada a Ricardo Quaresma en lugar de Nani para que actuase como revulsivo, viendo que su selección no acababa de generar peligro en la portería de Vanins.

Y Ricardo Quaresma cumplió con creces su función en el encuentro. Tras el batacazo que supuso el empate de Letonia la Seleção fue en busca del segundo gol para volver a adelantarse en el marcador y lo consiguió a los dos minutos por mediación del centrocampista del Sporting William Carvalho, que remató un centro de Quaresma para volver a adelantarse en el marcador. 2-1 y la tranquilidad volvía a las gradas del Estádio Algarve.

William Carvalho celebra el gol con sus compañeros | Foto: FPF/Francisco Paraíso
William Carvalho celebra el gol con sus compañeros | Foto: FPF/Francisco Paraíso

Pasaban los minutos y Portugal dominaba el partido sin dejar espacios a Letonia para que pudiese montar un contraataque y volviese a igualar el marcador. En el minuto 84 otra vez Quaresma ponía un centro al área que Cristiano Ronaldo remataba de forma espectacular para poner el 3-1 en el marcador y dejar el partido sentenciado.

A partir de ese momento la selección letona bajó los brazos y los aficionados lusos comenzaban a festejar la victoria, pero aún quedaba otro momento de emoción para los locales. El veterano defensa central Bruno Alves remataba a portería un centro de Raphaël Guerreiro y anotaba el 4-1 para los lusos.

Con el 4-1 finalizaba el encuentro, Portugal conseguía tres puntos importantes para seguir aspirando a la primera posición del grupo y Ricardo Quaresma nos dejaba una sensacional actuación saliendo desde el banquillo que cambió radicalmente el partido y dio los tres puntos a la Seleção.