Con apenas dos cambios en el 11 de los leones respecto al partido de Champions ante el Real Madrid el Sporting se presentaba en Porto ante un partido crucial para ellos ya que, tras caer eliminado de la UEFA Champions League, podía haberse dejado puntos importantes en la visita a Boavista que lo hubiesen alejado de la primera posición de la Liga Nos.
La idea estaba clara, querían seguir en la pelea por el liderato de la liga y no estaba permitido otro pinchazo. El Boavista llegaba al choque en una posición cómoda en la tabla pero aspirando a dar la sopresa y conseguir algún punto. Pero los de Jorge Jesus salieron mentalizados y desde el primer minuto impusieron su juego y demostraron cierta superioridad ante su rival, dejando al Boavista en un papel secundario en el partido.
Control del partido desde el primer minuto
Nada más comenzar el encuentro los lisboetas se pusieron manos a la obra y dominaron la posesion del balón para evitar contraataques peligrososo de Boavista que pudiesen acabar en una ocasión de gol. Se iban sucediendo los ataques de los de Jorge Jesús –interrumpidos por alguna contra de Boavista que acababa fuera de los tres palos sin generar mucho peligro en la portería de Rui Patricio–, pero no fue hasta el minuto 25, en el que Bas Dost remataba un centro puesto por Gelson Martins, en que el Sporting se pudo adelantar en el marcador. Merece una mención aparte la acción individual de Gelson Martins anterior algo, zafándose de dos jugadores y poniendo un centro perfecto al área que Bas Dost sólo tuvo que rematar placenteramente para anotar el 1-0.
Siguió la primera parte con un dominio incontestable del Sporting que veía amenazada la portería de Ruí Patricio en contadas ocasiones; no se movió el marcador –pese a algún acercamiento del Sporting– y se llegaba al descanso con el marcador reflejando un justo y quizás algo corto 0-1.
Conformismo por parte de los visitantes
La segunda mitad se iniciaba tal y como terminaba la primera, el Sporting controlaba el juego y generaba algo más de peligro que no se llegaba a materializar en forma de gol. Iban pasando los minutos y se comenzaba a ver como una especie de sensación de conformismo aparecía en los jugadores del Sporting que, poco a poco, iban durmiendo el partido conscientes que el 0-1 era válido para sus aspiraciones.
En el minuto 56 Ruben Semedo veía su primera cartulina amarilla, vería la segunda en el minuto 83 y se iría al túnel de vestuarios dejando a su equipo con diez jugadores sobre el campo. Expulsión que ha sido criticada por Jorge Jesus al final del encuentro cuando dijo que “Una de las amarillas que vio Semedo fue sacada por el colegiado por la presión de los jugadores de Boavista. No me gustó el arbitraje”.
Se llegaba al final del partido con el solitario gol de Bas Dost en el marcador que daba la victoria a los lisboetas y les daba tres puntos que los colocaban provisionalmente en la segunda posición de la liga con 24 puntos, a dos del líder.
Con la derrota el conjunto de Porto se mantiene en la zona media de la clasificación y ya se prepara para el encuentro de dentro de dos semanas ante Paços de Ferreira. Mientras que el Sporting se mantiene en la lucha por el liderato de la Liga Nos y, a la espera de otros resultados, se coloca en la segunda posición de la liga y se mantiene en la lucha por la primera posición y sigue dentro de las posiciones que dan acceso a la Champions League.