Las temporadas en el mundo del fútbol son muy largas y es más que habitual ver entrenadores que no cumplen con los objetivos. La imagen de mánagers siendo destituidos o que presentan su dimisión es mucho más habitual durante estas últimas semanas. Poco a poco se va acercando el final de la campaña y comienza la ansiedad por ganar uno u otro título, meterse en puestos europeos y también evitar el descenso.
Sin embargo, esta imagen de entrenador que abandona un equipo se está viendo con una asiduidad en el país vecino. Juan Luis Vives decía que "romper las reglas es tan perjudicial como ceñirse a ellas con exceso". Pues bien, prácticamente todos los equipos de la Liga Portuguesa terminarán la temporada con un entrenador diferente con el que empezaron la campaña. De los dieciocho equipos que conforman la Primeira Liga, tan sólo cinco (Benfica, Porto, Sporting de Portugal, Vitória de Guimarães y Vitória de Setúbal) mantienen al mismo inquilino en sus banquillos.
Unas cifras completamente desorbitadas
En total, la Liga Portuguesa ha visto hasta diecisiete entrenadores que han abandonado su club. Ya sea en forma de destitución, dimisión o por mutuo acuerdo, trece equipos se han deshecho del míster que tenían. Algunos como Estoril, o Nacional de Madeira han cambiado de entrenado dos veces y otros como Moreirense lo han hecho hasta en tres ocasiones.
Estos números cobran más importancia si se comparan con el resto de ligas principales en Europa. El lector podrá comprobar que Portugal prácticamente duplica al resto de Ligas del viejo continente. LaLiga Santander y la Bundesliga son las que ostenta la segunda posición, con diez entrenadores destituidos.
Liga | País | Número de destituciones |
Liga NOS | Portugal | 17 |
LaLiga Santander | España | 10 |
Bundesliga | Alemania | 10 |
Serie A TIM | Italia | 9 |
Barclays Premier League | Inglaterra | 8 |
Ligue 1 | Francia | 7 |
Todos los destituidos, uno por uno
Sporting de Braga (José Peseiro-Abel Ferreira)
A priori puede parecer algo sorprendente. Un histórico del fútbol portugués y que en estos momentos es el cuarto clasificado, sólo por detrás de los tres grandes de Portugal. ¿Cómo puede un equipo así haber tenido hasta tres entrenadores diferentes? La clave está en Euroopa. El Sporting de Braga empezó la temporada con José Peseiro en los banquillos y con el objetivo de pelear la tercera plaza y hacer un periplo envidiable en Europa League.
Ni lo uno ni lo otro. Pese a ir durante semanas en la tercera posición durante semanas en la primera vuelta, los bracanenses no supieron aprovecharse de la crisis deportiva del Sporting de Portugal y cuando los verdiblancos dieron síntomas de reanimación, adelantaron sin problemas a los rojillos. En Europa League la catástrofe fue aún mayor, quedando eliminados en la fase de grupos. La destitución de José Peseiro no se hizo esperar y Abel Ferreira, técnico del filial, asumió el mandato de manera interina durante varias semanas.
Finalmente y tras varias reuniones entre directiva y secretaría técnica, el Sporting de Braga se decantó por devolver a Ferreira al filial bracanenses y contratar a Jorge Simão, que hasta el momento estaba entrenando a Desportivo Chaves. El objetivo de Simão no es otro que el de consolidar la cuarta plaza, ya que el Sporting de Braga tiene como inmediato perseguidor al Vitória de Guimarães.
Marítimo de Funchal (Paulo César Gusmão)
El equipo madeirense fue el primero en desprenderse de su entrenador. Apenas había terminado la quinta jornada en Portugal y Gusmão acababa su período en Barreiros. El técnico brasileño tenía como objetivo dejar al Marítimo en una posición más cómoda y con cuatro derrotas en cinco partidos dejó claro que no estaba capacitado. El equipo, que llegó a estar en puestos de descenso, no dudó en cortar el problema de raíz.
Ahora, con Daniel Ramos en los banquillos, Marítimo ha dado con la tónica y lleva unos meses de progresión que no han pasado inadvertidos. El técnico luso ha llegado a encadenar ocho partidos sin conocer la derrota y ha levantado completamente la moral en Funchal. El equipo ha pasado de estar en los puestos de descenso a ponerse a sólo cuatro puntos de la zona europea.
Rio Ave (Nuno Capucho)
El fracaso en Europa League fue uno de los detonantes del relevo de banquillos en Rio Ave. El cuadro de Vila do Conde no pasó de la tercera fase previa cuando era uno de los favoritos para meterse en la fase de grupos. Pese a echo, la directiva mantuvo a Nuno Capucho en el puesto y le dio una segunda al técnico luso con la condición de volver a luchar por los puestos europeos. Nada más lejos de la realidad.
En sus catorce partidos dirigiendo a Rio Ave, Nuno Capucho sólo logró tres victorias. Tras haber acumulado siete partidos seguidos sin ganar y sobre todo tras haber sido eliminados a las primeras de cambio en la Taça de Portugal, la decisión de destituir al técnico era inevitable. En su lugar, Rio Ave decidió hacerse con los servicios de Luís Castro.
El tiempo ha decidido que la elección de Castro haya sido muy correcta. Aunque el ex entrenador del Porto B no ha encadenado una racha de resultados muy positiva, ha devuelto a Rio Ave a la lucha por Europa y los de Vila do Conde son ahora mismo los séptimos clasificados. ¿Lograrán meterse en la Europa League? Parece una hazaña casi imposible, pero al menos tendrán la oportunidad de luchar por ello. Meses atrás, era impensable.
Boavista (Erwin Sánchez)
El cuadro axedrezado es otro de los equipos que más han crecido desde el cambio de entrenador. La temporada la comenzó el boliviano Erwin Sánchez pero con resultados más que deseables. Sólo dos victorias en ocho partidos y eliminados en primera ronda de la Taça da Liga. Boavista pedía a gritos un relevo antes de que el problema fuera más grande y la decisión no tardó en efectuarse.
El elegido, Miguel Leal, ha supuesto una bocanada de aire fresco para las panteras negras. Boavista ha encadenado una racha de resultados tan positiva que ya no son candidatos al descenso. Los axedrezados son ahora octavos y si siguen en esta línea, todo apunta a que terminarán la temporada de manera muy tranquila.
Desportivo Chaves (Jorge Simão)
El Chaves tenía un reto muy complicado por delante, como siempre ocurre con los recién ascendidos. El camino a la permanencia se estaba cumpliendo con Jorge Simão en los banquillos, pero según los rumores, la relación dentro del vestuario era bastante tensa. En un momento donde los resultados no acompañaron, se pidió la cabeza de Simão. Y el técnico no lo dudó. Vio la oportunidad de subir su caché en Braga e hizo las maletas.
Como sustituto, el Chaves optó por Ricardo Soares. De momento, el técnico portugués está manteniendo una buena línea, con sólo cuatro derrotas en sus primeros doce partidos. Los azulgrana están en la novena plaza y muy alejados de los puestos de descenso. Aprobado y con buena nota para el nuevo técnico flaviense.
Belenenses (Julio Velázquez)
Por potencial de plantilla y por los resultados en las últimas temporadas, Belenenses se fijó como objetivo para esta temporada terminar en los puestos europeos o al menos estar en la brega en la zona noble de la clasificación. Con sólo dos victorias en las primeras siete jornadas ligueras, quedaba claro que los azulones no lo lograrían con Julio Velázquez. El ahora técnico del Alcorcón fracasó en su segunda etapa en Restelo y fue de los primeros entrenadores en ser destituidos.
Belenenses dio la oportunidad a Quim Machado, que por aquel entonces entrenaba al Santa Clara en la Segunda Liga. Poco a poco, los azulones intentan escalar puestos en la clasificación. Ahora mismos están en décima posición, aunque a sólo tres puntos de la séptima plaza.
Feirense (José Mota)
Fue el técnico que logró ascender al cuadro de Santa María da Feira, pero nada de eso importó. Mota comenzó la temporada obteniendo buenos resultados y logrando victorias importantes para cumplir el objetivo de la permanencia. A día de hoy sigue sin entenderse lo que ocurrió para que Feirense diera tal bajón en la clasificación. El equipo acumuló nueve partidos seguidos sin conocer la victoria, con seis derrotas consecutivas. La destitución era cuestión de lógica.
Llegados hasta este punto, Feirense optó por la cantera y por un entrenador formado en casa. Nuno Manta cumplía con ese requisito y de momento su trabajo está siendo irrepochable. Quince puntos por encima del descenso, Santa María da Feira verá a su equipo una vez más en la máxima categoría del fútbol portugués.
Arouca (Lito Vidigal-Manuel Machado)
Cual montaña rusa, Arouca terminó la pasada temporada en lo más alto y la caída en picado de esta campaña está siendo más que evidente. Lito Vidigal afrontaba la temporada con optimismo. Los amarillos jugarían por primera vez en su historia la previa de la Europa League y pese a que no se clasificaron para la fase de grupos, dieron una muy buena imagen.
Sin embargo, su andanza en Liga no ha sido tan positiva. Pasaban los meses y parecía que el cuadro arouquense no volvería a luchar por la zona noble, así que Vidigal fue despedido y en su lugar entraba Manuel Machado. Había sido destituido del Nacional de Madeira y se encontró con el mismo destino en Arouca. Cinco partidos y cinco derrotas, Machado ha sido el último entrenador en abandonar un banquillo en Portugal, esta vez por mutuo acuerdo.
Paços de Ferreira (Carlos Pinto)
La pasada temporada, el Paços se quedó a un sólo punto de entrar en la fase previa a la Europa League. En estos momentos es decimocuarto en Liga. Ya con esos dos datos el lector puede hacerse una idea de cómo ha sido la crisis deportiva en el equipo canarinho. El equipo comenzó la temporada con Carlos Pinto y el balance no pudo ser más pobre para el equipo amarillo: cuatro victorias en catorce partidos.
Con la salida de Pinto, la situación no mejorado demasiado con Vasco Seabra. Bien es cierto que en estos momentos el Paços lleva una racha de cinco partidos seguidos sin perder, pero los puestos europeos se ven desde muy abajo y el objetivo para el equipo es rearmarse de cara a la nueva temporada.
Estoril-Praia (Fabiano Soares-Pedro Gómez Carmona)
Otra de las grandes decepciones de la temporada está siendo Estoril. El equipo de Cascais, acostumbrado a llegar al tramo final de la temporada con aspiraciones europeas, está sólo cinco puntos por encima del farolillo rojo a estas alturas de la temporada. Se empezó la temporada con Fabiano Soares, pero a medida que la posición de Estoril en Liga comenzó a bajar, el equipo no tardó en destituirle.
Cogió el relevo un español, Pedro Gómez Carmona, aunque apenas duró dos meses en Cascais. Sólo una victoria en ocho partidos confirmó que el proyecto de Estoril perdía cada vez más abales. Para evitar la debalce, el equipo se trajo de Chipre a Padro Emanuel. El nuevo técnico cuenta sus dos primeros partidos por empates. Eso así, parece que ha logrado detener la hemorragia y evitar así que el equipo se desangrara más.
Moreirense (Pepa Marques-Leandro Mendes-Augusto Inácio)
Por increíble que pueda parecer, el actual campeón de la Taça da Liga ha tenido hasta cuatro inquilinos diferentes para sus banquillos. La crisis en Moreira de Cónegos es más que evidente pese haber alzado el título copero. Sólo un puesto por encima del descenso, la secretaría técnica del equipo no ha parado de probar proyectos nuevos. El de Pepa Marques no tardó en echar aguas a principios de temporada y Leandro Mendes asumió el cargo de entrenador de manera interina.
Con Augusto Inácio se logró la Taça da Liga, pero las tristezas seguían siendo más grandes que las alegrías. Petit asumió el mando después de que la directiva de Moreirense decidiera rescindir nuevamente otro contrato con un entrenador. Algo completamente inconcebible en el fútbol profesional y que no ha parado de levantar críticas en la ciudad.
Nacional de Madeira (Manuel Machado-Predrag Jokanovic)
La temporada en Choupana va de mal en peor y la situación ha sido tan nefasta que, para levantar los ánimos en Funchal, Portugal viajará a Madeira para jugar un amistoso contra Suecia. Nacional llevaba tres años luchando por llegara los puestos europeos y ahora mismo se encuentra al borde del abismo. A cuatro puntos de la salvación y con un pronóstico muy desfavorable, el tiempo de Manuel Machado se agotó en la primera parte de la temporada y ahora con Jokanovic también se ha terminado.
Los números del entrenador serbio han sido los peores de los últimos años en Portugal. Once partidos y ni una sola victoria (cinco empates y seis derrotas) hicieron que Nacional volviera a efectuar una destitución, una de las últimas en la Liga. João de Deus, entrenador durante dos años del Sporting B, tendrá por delante la dura misión de sacar a los blanquinegros de se ese oscuro pozo.
Tondela (Petit)
El actual colista de la Liga Portuguesa siempre ha tenido que remar contracorriente. Los auriverdes, al igual que la pasada temporada, salvaron los muebles en las últimas jornadas tras un esfuerzo titánico en una misión casi imposible. En esta campaña sólo han ganado tres partidos y esa crisis deportiva motivó la marcha de Petit, ahora en las filas de Moreirense.
Lo curioso es que el actual entrenador de Tondela es precisamente un ex de Moreirense, Pepa Marques. Con este tipo de situaciones, el aficionado luso ha tachado de "poco seria" a esta edición de la Liga Portuguesa. Lo cierto es que tras diecisiete destituciones, y entrenadores que vienen y van, la gran afectada es sin duda la competición.