Trabajada victoria de un Benfica que dominó el primer tiempo y que, tras ver como Charles evitaba un par de goles, dejaba sentenciado el encuentro tras diez minutos en los que anotaron tres goles y dejaron el partido prácticamente sentenciado.
Jonas, con un doblete, se convertía en el protagonista del encuentro, protagonismo que compartió con Charles, el meta de Marítimo fue providencial para que su equipo no se fuese de Do Dragao con una goleada más severa.
El primer tiempo fue de dominio para el Benfica, pero el gol no llegaba gracias a las intervenciones de Charles. Los últimos diez minutos del primer tiempo iban a ser claves, pues Benfica anotó tres goles y dejo el partido visto para sentencia. La segunda mitad bajó el ritmo y el nivel del encuentro, por lo que el marcador no se movió y el encuentro terminó 3-0.
Recital de Benfica que deja el partido sentenciado
Benfica sabía que necesitaba dejar el encuentro sentenciado cuanto antes para evitar cualquier sorpresa. Salió a arrollar y dispuso de grandes ocasiones, pero Charles tuvo un par de grandes intervenciones y evitó que el gol de Benfica llegase.
Mitroglou tuvo la mejor, pero Charles detenía el disparo tras aguantar un mano a mano con el heleno. Charles seguía deteniendo todos los disparos de Benfica, pero finalmente iba a ver como su portería era perforada.
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Una jugada de infortunio tras una gran cabalgada de Rafa Silva que terminaría con un centro al área. Mitroglou era el destinatario y parecía que marcaría, pero Luís Martins, en un intento por desviar la trayectoria del balón, se introducía la pelota en su portería y el 1-0 subía el marcador.
Marítimo se acogió al dicho de que las desgracias nunca vienen solas y encajó el segundo de la tarde en dos minutos. Rafa Silva cedía el balón a Pizzi para que el luso mandase un centro que Jonas anotaba sin mucha dificultad el 2-0.
El descanso estaba al caer y parecía que Benfica se iría con el 2-0 a los vestuarios, pero en la última ocasión del primer tiempo llegaría el tercero. Alex Grimaldo ponía el centro y Luisao peinaba la pelota para que Jonas disparase, Charles detenía el primer disparo pero el rechace le caía al propio Jonas que, a placer, anotaba el 3-0.
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Tras el segundo gol de Jonas el colegiado señalaba el descanso y los dos equipos se iban a los vestuarios. Los benfiquistas estaban contentos tras haber dejado el partido encarrilado, mientras que los de Marítimo estaban cabizbajos tras haber encajado tres goles.
Benfica evita cualquier sorpresa
La segunda mitad iba a tener un guión distinto. Si en el primer tiempo se iba a ver goles y ocasiones, en el segundo el ritmo del partido descendió vertiginosamente y las ocasiones se sustituyeron por posesión del Benfica y un Marítimo buscando una remontada que no se iba a producir.
Benfica controlaba la posesión y minimizaba los riesgos para no verse sorprendidos en algún contraataque rápido o en alguna pérdida en el centro del campo. Salvio tuvo las dos más claras del encuentro, pero el balón no llegó a entrar en la portería.
Lindelof, en un remate de cabeza, y un centro que casi termina en autogol fueron las dos últimas ocasiones del encuentro, pero ninguna de ellas terminaba siendo gol y el partido parecía estar en un punto en que ambos conjuntos no querían gastar energías y se conformaban con el resultado.
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El partido iba a terminar con Luisao salvando un balón bajo palos que podría haber supuesto el 3-1. Los dos equipos se marchaban al vestuario tras un partido que se decidió con unos diez minutos excelentes de Benfica.
Los de Rui Vitória mantienen la primera posición una semana más y esperan el resultado de Porto en la visita a Braga. Marítimo pierde una oportunidad para distanciarse de la séptima plaza y podría ver como, al final de la jornada, sus rivales se acercan peligrosamente a esa sexta plaza que da acceso a la UEFA Europa League.