Benfica terminó la temporada 2016/17 conquistando dos títulos: primero se hizo con la Liga NOS, la número 36 de su historia, siendo el campeón por cuatro temporadas seguidas. El segundo trofeo fue la 26ª Taça de Portugal, la cual ganaron tras vencer en la final al Vitória Guimaraes. Por su parte, en la Champions League, el club portugués avanzó hasta octavos de final donde fue eliminado por el Borussia Dortmund.
Liga 2016/17: campeones otra vez
Benfica se coronó campeón de la Primera División de Portugal, por cuarta vez consecutiva. As Águias alzaron la 36ª liga en su palmarés, alcanzando 82 puntos de 102 posibles. Sus competidores directos, FC Porto y Sporting de Lisboa, hicieron 76 y 70 puntos respectivamente. De los dos partidos disputados contra el FC Porto, empató ambos a un gol y de los dos encuentros vs Sporting, ganó uno 2-1 y el otro lo empató 1-1. Para un total de 34 jornadas, registraron 25 triunfos, siete empates y solo dos derrotas. Los únicos juegos perdidos fueron ante Marítimo (2-1) y ante Vitória Setúbal (1-0).
El goleador del equipo fue Kostas Mitroglou con 16 tantos, tercer artillero en la general liderada por Bas Dost del Sporting con 34 goles y seguida por Soares del FC Porto con 19. Por otro lado, el mayor asistente del Benfica fue Pizzi con ocho asistencias. En total marcaron 72 goles y solo recibieron 18, para una diferencia de goles de 54 y el título de equipo más goleador de este torneo.
Taça de Portugal 2016/17: para hacerse con el doblete
Desde la temporada 2013/14, Benfica no se hacía con la Taça de Portugal. Tras dos campeones diferentes en Portugal (Sporting de Lisboa y Sporting Braga), As Águias volvieron al título. En total fueron siete partidos. En el 2016, comenzaron en la ronda tres, donde vencieron a Dezembro (2-1), luego en la ronda cuatro hubo festival de goles frente a Marítimo (6-0) y más tarde en los 16avos de final golearon a Real Sport Clube (3-0).
Ya en el 2017, empezaron ganando 6-2 a Leixões por cuartos de final. En la semifinal, enfrentaron a Estoril Praia, triunfando en la ida 2-1, y empatando en la vuelta en un frenético partido que terminó 3-3. La final se disputó el pasado 28 de mayo en el Estadio Nacional de Lisboa, como es costumbre, donde Benfica se coronó con un 2-1 a favor y goles de Raúl Jiménez y Eduardo Salvio.
Champions League 2016/17: Benfica, al margen de los octavos
Tras el sorteo de la Champions League efectuado en la ciudad de Mónaco, Benfica aumentó sus posibilidades de pasar a la siguiente ronda. Una vez más, gracias a ser campeón vigente de la Liga Portuguesa y pasar al bombo uno, evitando así a varios de los clubes más fuertes de Europa. Al ser cabeza de serie, se encuadró en un grupo con rivales más a modo para que el cuadro luso alcanzara los octavos de final. Estuvo ubicado en el Grupo B, donde disputó partidos con Napoli, Besiktas y Dynamo Kiev.
Dos empates con Besiktas, dos derrotas ante Napoli y dos victorias frente a Dinamo Kiev, hicieron que sumara ocho puntos en la tabla y se clasificara a la siguiente fase de la Liga de Campeones como segundo, por detrás del Napoli.
Uno de los momentos con más emoción y sobresalto para los aficionados del Benfica se vivió en el partido de la jornada cinco de la fase de grupos donde el entonces tricampeón portugués viajó a Estambul para enfrentar al Beşkitas. Tras irse al descanso con una inmejorable ventaja de 0-3 y un partido aparentemente resuelto, el conjunto de Lisboa dejó ir los tres puntos y terminó empatando 3-3 en un vibrante regreso del equipo turco que anotó dos goles en los últimos diez minutos y estuvo cerca de meter un cuarto gol, algo que hubiera significado la eliminación del Benfica en la Champions desde la fase de grupos.
Para el sorteo de octavos de final, Benfica sabría que enfrentaría a un difícil rival que saldría de entre los líderes de grupo. Este año le tocó enfrentarse al Borussia Dortmund, un rival de categoría. Abrieron en casa y ante 55.614 personas, hicieron un partido inteligente, donde Ederson fue el MVP, llevándose la victoria gracias a un gol de Mitroglu en el 48’ que definió a cinco metros de la portería tras un remate de Luisão y con el arquero del Dortmund vencido.
La ida de esta llave se vio marcada también por algunas imprecisiones del Borussia Dortmund, ya que generó varias llegadas claras pero no tuvo ese último toque para definir. Ederson, el guardameta brasileño de 23 años del Benfica, protagonizó una polémica jugada en la primera parte donde, tras una entrada contra Dembelé cometió penal a las afueras del área pero al árbitro del encuentro, el italiano Nicola Rizzoli, no le pareció falta y dejó correr el juego. Más tarde, Ederson se convertiría en el héroe del partido, primero atajando un difícil disparo de Łukasz Piszczek y para completar su gran actuación tapó un penal a Aubameyang.
Para la vuelta, Benfica sufrió un doloroso 4-0 ante una de las mejores noches en la carrera de Aubameyang, que se redimió con creces del partido de ida anotando un hat-trick, llevándose el balón a casa y eliminando a la escuadra de las águilas. Los goles del gabonés cayeron al 4’, 61’ y 85’. El estadounidense con ascendencia croata de 18 años, Christian Mate Pulisic, también aportó a la goleada en el 58’.
Por segundo año consecutivo, el verdugo del Benfica fue un equipo alemán, recordando que la temporada anterior cayeron a manos del Bayern Munich en cuartos de final. Una temporada en la que el Benfica cumplió en el papel, pero que sin duda alguna y tras la hegemonía en Portugal, sembrará una ambición mayor de cara a lo que intentarán conseguir la siguiente temporada donde repetirán siendo cabezas en la competición más prestigiosa a nivel de clubes.
Fichajes y ventas: una temporada más retando la capacidad de renovarse
Cada año, existen equipos que cuentan los días del calendario que restan de la ventana de traspasos con la esperanza de que no les desmantelen el equipo llevándose a sus jóvenes promesas o estrellas.
A diferencia de eso, Benfica se da a la tarea de llevar a cabo su conocida fórmula que, entre otras cosas, es lo que lo hace un equipo poderoso económicamente. Probablemente ya lo has escuchado o tú mismo lo has dicho, pero la manera en que Benfica funge como formador o potenciador de jóvenes promesas del fútbol, que vienen de equipos con pocos reflectores para partir a los clubes más prestigiosos del mundo, es para destacarse.
El club portugués siempre suele obtener buen rendimiento en sus fichajes, con jugadores que le hacen conquistar títulos y después ganar buenos dividendos. Entre los ejemplos más destacados están jugadores como Ángel Di María, Axel Witsel, Fábio Coentrão, David Luiz, Nemanja Matic o esta temporada con Renato Sanches y Nico Gaitán.
El canterano Renato Sanches, quien causó sensación en todo el mundo por su manera de jugar al fútbol con una edad tan corta, cautivó la atención del campeón de Alemania. El anuncio oficial se dio durante la Eurocopa de 2016, competición donde Renato tuvo una gran actuación coronándose campeón al final del certamen, formando así una de las primeras bajas de cara a la temporada 2016/17 para el Benfica. Pese a que existió una polémica con su edad tras unas acusaciones que indican que el futbolista tenía en realidad 24 años, y no 18 como se pensaba, el Bayern Múnich había pagado ya 35 millones de euros. Finalmente se comprobó que sí tenía 18 años y actualmente es considerado como uno de los jóvenes más prometedores del fútbol mundial.
Por su parte, el pedido del 'Cholo' Simeone fue Nico Gaitán. Al argentino lo vendieron en por 25 millones de euros, una gran cifra considerando que tenía 28 años y que había costado 8,4 millones cuando llegó de Boca Juniors. Se marchó tras seis temporadas al máximo nivel. 251 partidos, 41 goles y 87 asistencias. 16,60 millones de euros de ganancia por un jugador que ayudó durante seis años al equipo a conquistar títulos y mantenerse en lo más alto del fútbol portugués, una operación sencillamente redonda.
Para el mercado de invierno, el Benfica es el segundo club que más dinero ingresó (€45M), solo por detrás del Wolfsburg, gracias a las ventas de la joven promesa Gonçalo Guedes al PSG por €30M y de Helder Costa al Wolverhampton de la 2ª división inglesa, que pagó €15M por el extremo derecho de 23 años. Y solo gastaron poco menos de €6M, reforzándose con dos laterales. Marcelo Hermes, lateral izquierdo de 22 años, brasileño procedente del Gremio, y Pedro Pereira, lateral portugués por la banda de la derecha con tan solo 19 años. Pedro Nuno, quien fue cedido, y Filipe Augusto completaron las operaciones de incorporaciones invernales del Benfica.
Sin embargo, a comienzos de temporada, en el mercado de verano, Benfica se reforzó de manera importante, ya que tuvo dos bajas muy sensibles, firmando así varias incorporaciones: unas para suplir estas bajas y otras tantos elementos para pensar en el futuro.
El fichaje estelar del Benfica fue Rafa Silva, una de las promesas más importantes del fútbol portugués con 23 años. Pagaron €16,40M al Braga por sus servicios. El peruano André Carrillo, quien ya ha demostrado sus condiciones y su desequilibrio en el fútbol portugués llegó como agente libre del acérrimo rival, el Sporting de Lisboa, algo que no se ve todos los días. Pese a ser un referente en su equipo anterior, en el Benfica aún no le hace de un puesto en el once inicial y ve la mayoría de los partidos desde la banca o entrando como relevo.
Otra transferencia, al menos administrativamente hablando, fue la del delantero griego de 29 años, Konstantinos Mitroglou, de quien liquidaron el pago al Fulham inglés que tenía la carta de propiedad del jugador, que ha demostrado que es capaz de tener rachas goleadoras muy interesantes.
En el ataque, el club apostó por dos jóvenes argentinos que venían de la liga de su país Franco Cervi y Óscar Benítez. Sin embargo, Benítez fue cedido al Braga para que tenga tiempo de juego en su periodo de adaptación al fútbol europeo. Otra incorporación pensando en el futuro fue la de Guillermo Celis. El pivote colombiano llegó del Junior por una moderada cifra de 2,3 millones de euros.
Momentos curiosos: lo que nos deja el fútbol
Esta temporada, Benfica, que tiene acostumbrados a sus aficionados a ser un club ganador, vivió además de títulos y goleadas, varios momentos que no se ven todos los días. El partido disputado entre el Besiktas y el Benfica correspondiente a la jornada cinco de la fase de grupos de la Champions League nos regaló una de las jugadas más espectaculares de la temporada en todo el mundo del fútbol, ya que el tercer gol del Benfica vino de una pelota parada y tras tres remates de cabeza que pegaron en dos ocasiones en el travesaño y una más en el poste para que finalmente viniera el mediocampista serbio Ljubomir Fejsa, tomara el rebote y definiera con un agónico remate de zurda. Todo esto emuló una típica jugada de ‘Fifa’ que todos los amantes de este videojuego habrán experimentado alguna vez.
Por otra parte, en el último partido de la temporada para los encarnados, donde se alzaron campeones de la Taça de Portugal, hubo una de las entregas más inusuales de balón al árbitro central en todo el fútbol. Es común que el colegiado tome el balón antes de entrar a la cancha de un pedestal o base, que un niño se lo lleve en señal de juego limpio o que ya lo traiga desde el vestidor. Pero eso no entraba en los planes de los organizadores, quienes decidieron que el árbitro Hugo Miguel recibiría el balón de un hombre montado en un dron que llegaría a la cancha volando al estilo del duende verde de Spiderman.
