La Champions League llega a Inglaterra y será el Liverpool el encargado de abrir la competición con la fase previa. Sin embargo, el primer encuentro de los Reds será lejos de Anfield, concretamente en Hoffenheim, un equipo que Klopp conoce por su pasado en Bundesliga.

El entrenador alemán ha planteado el choque como lo que es, un todo o nada para el conjunto inglés. Un buen resultado en el Rhein-Neckar-Arena podría ser clave para asegurar el pase a la fase de grupos: “El último partido de la pasada campaña, contra el Middlesbrough, fue a finales de mayo. Luchamos muy duro por tener esta oportunidad. Después de ese día, sabíamos que seríamos cuartos pero no teníamos ni idea de si seríamos cabeza de serie o no. Por la noche, cuando celebramos el cuarto lugar, alguien vino y dijo que seríamos cabeza de serie. Estábamos muy contentos entonces por ello y vimos lo que podríamos conseguir y pensamos ‘ahora tenemos que hacer el trabajo’”.

La espera del club como de los aficionados ha sido larga y tubulenta, ya que desde que se aseguraran la clasificación vía Premier League, han pasado muchas cosas en el equipo de Liverpool: “Durante tres meses he estado esperando con ansia este partido. Ahora estamos aquí con buenas sensaciones, sabiendo de la calidad del oponente. La dificultad del choque y del reto está clara, pero es bueno estar aquí después de tanto tiempo”.

El Hoffenheim, cuarto en la pasada Bundesliga, no será un trámite sencillo antes de alcanzar la fase de grupos. Así lo sabe Klopp, que ha estado estudiando al equipo alemán durante los últimos días: “Sabemos mucho más sobre ellos de lo que tú puedes saber. Lo sabemos todo. Eso es lo que he dicho y diré al equipo. No para hacerlos más fuertes, si no para decirles a quién nos enfrentamos y la calidad con la que se medirán. Por supuesto, en el fútbol hay también debilidades. Hoffenheim es fuerte, nosotros lo somos. Ambos tenemos un objetivo que es entrar en la fase de grupos y eso lo hace muy emocionante”.

Una de las debilidades del Liverpool podría ser la falta de experiencia del club y de la plantilla en estas situaciones. Con jugadores que no están habituados a jugar la Champions temporada tras temporada, puede ser un punto débil para este partido en Alemania. Pero el entrenador Red cree que eso no será un problema de cara al choque: “No estoy muy interesado en la experiencia que tienen los rivales. Tienes que aprender algunas cosas, tienes que hacer algunas cosas y conseguir tu propia experiencia. En general, no me interesa eso. Hemos estado juntos durante meses y siempre intentamos dar el mejor análisis a nuestros jugadores para que ellos tomen ese análisis como la verdad  saber qué está pasando con el rival”.

Uno de los métodos de Klopp es la visualización de algunos partidos del equipo contrario y mostrar a su plantilla los gestos más comunes en el juego rival: “Vemos unas imágenes y son bastante claras, hablan por sí mismas. Tenemos un oponente que tiene mucha confianza y es agresivo. Es parte del partido. Sabemos de su calidad y lo que hacen en el campo. Un nombre o experiencia no me interesan. Aun así, sabemos que será difícil, siempre lo es en Champions League”.

Su homólogo en el Hoffenheim, Julian Nagelsmann, también ha sido estudiado para este partido, ya que Klopp ha negado que hayan podido conocerse antes de que dejara el Borussia Dortmund: “Es un entrenador con mucho mucho talento. No nos conocemos bien porque nunca hemos tenido tiempo. Cuando dejé Alemania, no estoy seguro de si él seguía siendo entrenador sub 19 o algo así. Pero desde que está en Bundesliga, hemos hablado por mensajes y cosas así, yo le sigo desde entonces porque me gusta el fútbol y obviamente su equipo está jugando buen fútbol y es interesante. Es un buen ejemplo de entrenadores jóvenes en Alemania. Hay un mercado de entrenadores muy interesante en este país”.

Finalmente el técnico alemán tuvo que tratar el asunto del mercado de fichajes. Aunque parece haberse calmado un poco la situación, todavía sigue abierto el mercado y eso sigue dando preguntas a Klopp que debe responder. El teutón confirmó ser de los que opina que el mercado debería haber terminado al comienzo de la temporada y no medio mes después, como actualmente sucede: “Nos habría ayudado este año y, en general, siempre. Ocurre algo y la gente empieza a buscar respuestas, soluciones. En general, creo que tiene sentido que cuando la temporada empieza, el planning de la plantilla esté cerrado. Pero entiendo que algunas cosas necesitan un poco más de tiempo. No diría que llegara a ser más difícil, solo cambiaría. El mercado completo cambiaría y el comportamiento de la gente también. Es bueno estar con tu equipo entero en el campo de entrenamiento para que todos se conozcan y así jueguen bien juntos. Entonces, casualmente, tienes nuevos jugadores para completar el grupo. Lo mejor sería que el equipo estuviera unido durante 4-5 años. Se que es difícil decir algo así, sé que el mercado ha cambiado y está empezando a ser ajetreado, pero nosotros estamos felices hoy, no pondríamos eso como excusa. Tenemos un buen equipo y estamos felices de estar aquí”.

El culebrón del verano en Anfield sigue siendo la situación de Coutinho. Con el jugador apartado del equipo por una supuesta lesión, el club mantiene que no venderá al brasileño este verano y eso fue lo que comentó Klopp: “Nada ha cambiado en los últimos días, ni en un lado ni en el otro. No está disponible por ahora, ese es el problema principal si quieres verlo así. No puede jugar con el Liverpool en este momento y, como todo el mundo imagina, eso es bastante malo para nosotros. Hemos sabido en los últimos días esto, así que podemos preparar el partido sin él como tenemos que hacerlo sin Lallana y Sturridge”. El delantero inglés también ha visto actualizada su situación en la rueda de prensa previa al choque: “Está en el buen camino. Hemos hablado esta mañana y estaba muy cerca. Estaba bien ayer. Dos días más y estará listo para el fin de semana”.