El Brighton sabe a lo que juega
El encuentro comenzaba con un ritmo pausado, con dos equipos que parecían tantearse en los primeros minutos. El West Ham parecía algo desordenado, acumulando muchas pérdidas de balón en el centro del campo y una línea ofensiva desaparecida. Los visitantes aprovecharon ese desconcierto en los rivales para adelantarse en la primera ocasión que tenían en el partido.
Glenn Murray anotaba el primer tanto del partido tras rematar de cabeza una falta botada por Pascal Gross. El delantero inglés superaba a Joe Hart con facilidad, reflejando la superioridad que en estos primeros instantes estaban mostrando los visitantes sobre el césped.
El West Ham parecía meterse en el encuentro, creando un par de ocasiones con el que demostrar que aún tenían mucho que decir. Los locales trataban de llegar al área rival por medio de sus laterales, que conseguían llegar con mucha libertad para avasallar con centros que buscaban a hombres como Arnautovic y Chicharito.
El Brighton estaba mucho mejor plantado sobre el terreno de juego, saliendo con suma facilidad desde atrás y realizando grandes combinaciones de pases que causaban estragos en la defensa del West Ham. Los visitantes estaban ganando la batalla en el centro del campo, no obstante la posesión era para el conjunto Hammer, pero ser los dueños del balón no les permitía crear peligro.
El partido seguía su curso y el West Ham continuaba sin sentirse cómodo. Cada vez que perdían el balón, los rivales salían velozmente al contragolpe, plantándose con suma facilidad en el área local. Los hombres de Slaven Bilic tan solo habían realizado un tiro entre los tres palos en cuarenta minutos de encuentro.
En el último suspiro de la primera parte, el Brighton conseguía el segundo gol. Esta vez, José Izquierdo conseguía sortear a varios rivales y sacarse un remate con el que superar al guardameta del West Ham. El Brighton daba un golpe sobre la mesa en el London Stadium, dejando en una situación muy comprometida al conjunto local.
Sin respuesta local
En la segunda mitad, el West Ham buscaba el gol desde el primer momento. Sin embargo, acumulaba muchas llegadas al área rival, pero ninguna de ellas terminaba en peligro. El Brighton estaba llevando el partido donde quería, pues defendían muy bien las acometidas de los rivales y amanaban la portería rival con cada aproximación.
Los locales no encontraban ninguna jugada con la que obtener el gol que les metiera de nuevo en el encuentro. El tiempo se agotaba y el nerviosismo se notaba en el ambiente, pues los Hammers estaban siendo superados en todos las facetas.
El Brighton continuaba tranquilo sobre el césped, manejando muy bien la ventaja con la que contaban desde la primera mitad. En estos segundos cuarenta y cinco minutos a penas habían sufrido ningún susto y esperaban encontrar la oportunidad que les permitiera sentenciar el partido.
En uno de los contragolpes del Brighton, Zabaleta cometía penalti y los visitantes tenían la ocasión de anotar un nuevo gol. Glenn Murray sería el encargado de transformar la pena máxima, rematando con potencia al centro de la portería rival. El West Ham estaba recibiendo un duro correctivo en casa, algo que inquietaba a su público, pues estaban viendo una imagen muy pobre del conjunto Hammer.
Los últimos minutos del encuentro estaban siendo agónicos para los locales, que veían como se les escapaban tres puntos más. El West Ham finalizaba los noventa minutos habiendo realizado tan solo un tiro a puerta. El Brighton, sin embargo, seguía demostrando el gran nivel en el que se encuentra, dejando claro que la Premier League no les queda nada grande. El equipo de Slaven Bilic se encuentra en un momento crítico de la temporada, pues lo más seguro es que termine esta jornada en puestos de descenso.