Gran oportunidad la que tiene por delante el Arsenal para volver a la senda de la victoria fuera de casa. Los de Wenger vienen de perder 1-0 ante el Tottenham en Wembley y a buen seguro querrán resarcirse de una derrota que les deja prácticamente fuera de las opciones por los puestos de UEFA Champions League.

En esta ocasión, y ya en la UEFA Europa League, los Gunners viajan hasta Suecia para medirse al Östersunds, un rival desconocido para muchos pero que ha logrado clasificarse para estos dieciseisavos de final tras quedar segundo en el Grupo J, justo por detrás del Athletic Club de Bilbao y por delante de Zorya Luhansk y Hertha de Berlín. Las condiciones climatológicas y su particularidad con un césped sintético serán las dos primeras probaturas que tendrán que superar los de Wenger antes de derrotar a los suecos.

"No importa, no tenemos que hacer un gran problema de ello"

Sobre estos dos pequeños hándicaps habló el técnico alsaciano en la rueda de prensa anterior al choque. Reconociendo que eligieron terrenos de juego similares a este en la ciudad deportiva del Arsenal, Wenger no quiere “hacer un gran problema de ello”. “Hemos jugador algunas veces en Colney. He escuchado que aquí utilizan 4G y que allí tenemos 3G, por lo que es diferente, también por fuera, pero no importa, no tenemos que hacer un gran problema de ello”, añadió un entrenador que, sobre el tiempo, realizó una comparación con la climatología de Londres en esta época del año.

“Tenemos que adaptarnos rápidamente porque en este tipo de desplazamientos nuestro nivel técnico debería ayudarnos. La temperatura en este momento no es muy diferente a la de Londres, también tenemos viento frío similar a lo que sucede aquí, así que no creo que sea un gran problema”.

En lo que tiene que ver directamente con el equipo surge la duda de ver qué tipo de alineación saca el técnico francés. Hay que recordar que en la fase de grupos Wenger utilizó un once alternativo al que juega competiciones inglesas, lleno de jugadores teóricamente suplentes y otros de categorías inferiores.

El rendimiento, visto lo visto, ha sido bastante bueno, pero ahora el entrenador reconoce que esto son duelos directos y que habrá que elegir a los mejores: “Entramos en duelos directos, por lo que el riesgo es mayor. Somos ambiciosos en esta competición y ahora tenemos más experiencia que antes”.

Por otro lado, no cree que la mala posición liguera incida directamente en su decisión: “Lo hubiera hecho de todos modos, sin importar lo que ocurra en la liga. Nosotros, por supuesto, nos centramos en la liga, pero también hubiéramos traído un equipo experimentado aquí”.

Pues bien, en ese equipo experimentado no estarán algunos nombres propios. El primero es el de Wilshere, que se queda fuera “por precaución” tal y como ha confirmado Wenger. Tampoco viaja Koscielny, que tiene “un problema en su talón de Aquiles”.

En Londres se quedan también Cech, Aubameyang y Ramsey. Sobre este último, que no fue de la partida ante el Tottenham por un problema de última hora, Wenger ha reconocido que es “un caso algo delicado”. “Esperábamos que mejorara un poco más en su problema en la ingle, pero no avanza tan rápido como queríamos. Hoy podría decir que, seguramente, no esté ni para el partido de vuelta ante el Östersunds”.

"Por unanimidad en todas partes de Europa, ahora los clubes están en contra de esta regla"

Finalizando con las bajas, llama la atención la ausencia del recién fichado Pierre-Emerick Aubameyang, que no puede disputar esta competición por haber participado con su anterior club, el Borussia Dortmund, en la UEFA Champions League, competición de la que los alemanes quedaron eliminados y por la que ahora juegan también la UEFA Europa League.

Contrariado por esta norma, Wenger no duda en arremeter con fuerza para posibilitar un cambio: “Cuando te fijas en las cantidades de dinero que se gastan ahora, que hay que gastar en torno a cincuenta, sesenta o setenta millones a mitad de temporada por un jugador, te das cuenta que no puede jugar. Por unanimidad en todas partes de Europa, ahora los clubes están en contra de esta regla”.

Así pues, con el gabonés fuera por esta norma y con Lacazette lesionado, el referente arriba será Welbeck, que por fin puede volver a vestirse de corto. Su entrenador acepta que está “muy fuerte” físicamente, algo a lo que ha ayudado su preparación física tras su recuperación: “Jugando en el centro del ataque es donde lo prefiero, personalmente, y es donde creo que tiene la oportunidad de hacerlo bien. Ha tenido que esperar para volver al equipo, pero le ha dado tiempo a trabajar su estado físico y ahora está mejor de lo que ha estado en mucho tiempo”.

Por último, otro que ha confirmado que va a jugar es Mesut Özil, a pesar de haber disputado el partido ante el Tottenham del pasado sábado: “Jugará. Queremos hacerlo bien en esta competición. Jugamos el sábado y ahora el jueves por la noche. Durante el fin de semana no tenemos partido, así que tenemos una semana sin competición. Es importante que nuestros jugadores mantengan el nivel competitivo”.

Así pues, con un equipo con más habituales de los que se pudieron ver en la fase de grupos, el Arsenal se medirá a un Östersunds que tiene, además del premio de jugar esta competición, la posibilidad de hacerlo ante uno de los históricos del fútbol mundial. Los suecos están viviendo un auténtico sueño del que esperan no despertarse.