Dolorosa tarea la de verse en lo más alto y tener que aguantar todas las embestidas que quieren hacerte caer. Complica empresa la de jornada sí y jornada también tener que buscar con necesidad un buen resultado para no descolgarse de la fina cuerda que te sujeta a la cima. Una fecha más, ya la novena, el CSKA tendría que seguir luchando contra viento y marea y frente a otro conjunto que amenazaba su liderazgo, el Spartak de Moscú

Los de Slutsky ya pudieron con el Rostov en el cruce precedente gracias a un soñado debut de Bazelyuk que se doctoró aún siendo novato, pero querían y debían ir a por más. Para ello visitaron a sus vecinos de la capital, un Spartak de Moscú que llegaba también situado en la zona alta pisándoles los talones y tras vencer por la mínima al Volga.

El pitido inicial sonó, se supone, porque el ambiente era y fue durante los noventa minutos inmejorable, el aliento de los allí congregados fue atronador y se vivió con gran pasión del derbi moscovita de principio a fin. La batalla fue equilibrada en los primeros compases y costó que uno de los dos decidiera llevar la batuta del encuentro.

Los visitantes se mostraron más llegadores al principio pero sin inquietar demasiado con jugadas aisladas como un tiro lejano de de Tosic en el 4’ que quedó en nada o alguna contra fallida, hasta que la tormenta de desató pasados 20 minutos de juego.

Tino Costa, el mejor de la primera mitad

En el 23’ el mejor de la primera mitad, Tino Costa, protagonizaría la más clara hasta el momento al rematar una falta lateral que llegó desde el flanco izquierdo y que se marchó fuera de los tres palos cuando estaba todo a favor. Pero el argentino querría más. Avisaría primero pocos instantes después y haría suyo una pérdida del CSKA en banda derecha para conducir hasta su zona, una distancia media del arco, donde intentó hacer valer una de sus grandes cualidades, el tiro lejano, pero esta vez no salió como se esperaba. No contento con ello también repartió a sus compañeros. En el 31’ se entendió perfectamente con Kombarov en la esquina izquierda del área y el ruso se sacó un disparo peligroso tras recoger la pared del centrocampista. Más tarde sería protagonista.

Los líderes se resistieron a la derrota y reaccionaron en contadas ocasiones como en el 33’ con una gran jugada personal de Tosic que deshizo de los jugadores del Spartak desde la banda diestra hasta la frontal, se apoyó en Zuber, este conectó con él dentro del área sin suerte y casi al final, en el 41’, con un buen Musa que recibió dentro del área de espaldas, se giró armando el fusil rápidamente pero le salió centrado y Pesjakov lo contrarrestó.

Salvo estos pequeños detalles del CSKA, el partido estuvo dominado por los de Valeri Karpin que pudieron endosar una buena goleada pero unas veces por buenas paradas de Akinfeev como una a disparo lejano de Movsisyan en el 35’ y otras por grandes intervenciones de los defensores contrarios como una de Ignashevich en el 37’ que apareció salvador en línea de gol cuando Movsisyan se disponía a finalizar a placer varias conexiones de cabeza tras un saque de esquina, impidieron que la cosa fuera a más.

Finalmente el premio a la insistencia llegó en el 40’. Emanó de los pies de un pletórico Tino Costa que mandó un envío alto desde el costado zurdo que Ozbiliz remató a placer para confirmar quién era el que estaba mandando. Pusieron el primero y así se quedó el luminoso cuando los 45 minutos se extinguieron.

Repaso

La segunda mitad fue una continuación de la primera aunque con menor ritmo. Los de Valeri Karpin dominaron y fueron los que pusieron la actividad de cara a la portería pero con mayor efectividad que en el primer tiempo.

Menor ritmo, mayor efectividad

En el 51’ Movsisyan remató un centro desde la derecha y Akinfeev reaccionó otra vez para mandarla a córner, tuvo mucho trabajo el internacional ruso e hizo lo que pudo, bastante, a pesar de la goleada. Pero no aguantó con todo y en el saque de esquina Jurado enviaría el esférico al primer palo para que lo peinaran y en el segundo, totalmente solo, Kombarov metió el 2-0.

El remate, la última gota de agua fría para los visitantes, cayó desde la izquierda llevada por un Kombarov que desgarró el flanco izquierdo y centró para que Parshivlyuk pusiera el 3-0 y confirmara un gran resultado. El Spartak conquistó el derbi moscovita y empata a puntos en el liderato con un CSKA que encajó su primera derrota y deberá apretar, si quiere repetir éxito, en una ajustada lucha por el primer puesto a la que se puede sumar también el Zenit.

Fuente vídeo: @SovietSphera