El Plásticos Romero Cartagena pasaba una racha muy difícil, azotado de lleno por las lesiones de sus jugadores que hacían que el plantel disponible para Juan Carlos Guillamón fuese reducido en recursos. Las lesiones de Enrique, Sergio Rivero, Rubén Zamora y Dani Gómez, entre otros, obligaron al club cartagenero a buscar nuevos refuerzos en el mercado invernal. Es ahí cuando apareció el nombre de Víctor López Real, cierre madrileño de 28 años que militaba en Primera División, en las filas de D-Link Zaragoza.

Su situación en el club aragonés facilitó su salida rumbo a Cartagena, donde llegó como un fichaje top tanto para el equipo portuario como para la Segunda División del fútbol sala español. Ya en sus primeras declaraciones como jugador naranja dejaba claro porqué venía al club, y se definía como "un jugador de equipo que buscará ayudar en todo lo posible para devolver al equipo a Primera División”, haciendo a su vez un guiño a toda la afición: “Espero que los resultados nos acompañen porque esta afición se merece regresar a la máxima categoría, donde ya demostraron una gran pasión por el fútbol sala, convirtiendo este pabellón en uno de los más difíciles de la Liga”.

Al cierre le costó algo de tiempo amoldarse al equipo al principio, pero conforme pasaban los partidos iba entonándose y haciendo ver a todos el porqué de su fichaje. Su único gol fue ante Hércules de San Vicente para abrir el marcador y recortar distancias en un partido que estaba muy complicado. Ha jugado un total de nueve partidos, uno de ellos en el cinco inicial, y le fueron mostradas dos cartulinas amarillas.

Su llegada a Cartagena supuso cubrir la baja de larga duración de Enrique y darle ese plus de robustez y seguridad defensiva al equipo, complementándose con Matía, Jesús y Patricio para hacer de la defensa cartagenera una de las más difíciles de sobrepasar. Su debut fue frente a Valdepeñas en aquel empate a cinco en el último segundo con gol para los manchegos, en un choque en el que Víctor se enfundó por primera vez la elástica naranja para sumar su primer punto como jugador cartagenero. La salida de balón y de presión del Plásticos Romero Cartagena denotó una mejoría con la llegada del madrileño, y gracias a su intensidad e implicación en cada minuto de partido ha logrado poner su granito de arena para retornar a la máxima división.

La anécdota de la temporada

El '4' contó su mejor recuerdo de una campaña para la historia: “Mi anécdota fue en el último minuto del partido contra el Betis en el que íbamos perdiendo, conseguimos empatar y ganar sobre la bocina. Al ver el entrar el balón y juntarnos todos en una piña en la pista con la parte de la grada. Fue un gran momento en el que todos reaccionamos de esa forma tan natural en la que se reflejó el sentimiento de alegría”.