Ríos Renovables Zaragoza afronta una nueva temporada con el objetivo de intentar pelear por estar entre los ocho primeros. Los maños han llevado a cabo en las últimas temporadas un proceso completo de reestructuración, un proceso que ya el año pasado dio sus frutos sin hacer sufrir al equipo por el descenso. Ahora le toca dar un paso adelante para seguir subiendo peldaños.
Un calendario para no despistarse
La agenda de Zaragoza se convierte en un arma de doble filo para el conjunto de Santi Herrero. Los aragoneses van a tener que dar el callo en todos los partidos y ser bastante regulares si quieren llegar al objetivo marcado. El inicio será frente a dos recién ascendidos, primero visitando a Segovia y luego recibiendo a O Parrulo. La siguiente salida será una de las más complicadas a Murcia para jugar contra ElPozo. Tras un paso por la zona noble, en la jornada 7 se las verá con el Barcelona y después de jugar tres duelos prácticamente directos ante rivales de ‘su liga’ llegará el momento de vérselas con Movistar Inter.
Dos encuentros más factibles ante Gran Canaria y Aspil para finalmente terminar la liga ante dos conjuntos que con toda seguridad se estarán jugando muchas cosas. Complicado duelo ante Palma Futsal y visita ante Catgas Energía en la última fecha del campeonato. Exigente y obligando a que no haya grandes subidas y bajadas.
Pocos cambios pero necesarios
La directiva maña ha apostado por la continuidad de los futbolistas que mantienen al equipo en la máxima categoría en los últimos años. Pesos pesados como Nano Modrego, Retamar o Carlos García han renovado su contrato; jugadores de mucha proyección y futuro como Richi Felipe, Adri Ortego y el guardameta Iván también seguirán una temporada más; y no dejamos de lado al ala Óscar Villanueva. A todos ellos les acompañarán Anás, que llega desde Gran Canaria, Trasobares, que se fue cedido a Colo Colo para intentar el ascenso a Segunda y ahora regresa, y Thiago Cabeça, un refuerzo internacional para el pívot y concretamente llegado desde el Intelli FS.
Han dicho adiós a la entidad zaragozana tanto Jorge Santos, como Kosuke, como Marco Mandado, como Anuar. Casi todos jugadores de rotación que sin embargo parecen tener un gran recambio para esta nueva temporada.
Nano Modrego continúa de viejo rockero
Nano Modrego del Pino cumple su cuarta temporada de forma consecutiva en Ríos Renovables Zaragoza. Con 36 años aun tiene gas para continuar su andadura en Primera División y aunque ha ido bajando progresivamente sus números, sigue siendo una pieza clave en el esquema de su equipo. Ha ido cediendo poco a poco su rol de titular, pero aun así disputó 29 partidos el año pasado y fue el segundo máximo anotador de los suyos con 12 tantos.
El gol sigue corriendo por sus venas y eso es lo que realmente cuenta para que el entrenador no lo pierda de vista. La expresión de que la experiencia es un grado la cumple a rajatabla el jugador maño, que regresó a su ciudad tras pasar por Movistar Inter y parece decidido a terminar sus días en ella. Por ahora sigue teniendo mucho que dar.
Santi Herrero sigue siendo fiel
Los hombres de club abundan en la máxima categoría del futbol sala español. Santi Herrero es uno de ellos. Conoce la ciudad, conoce la disciplina y conoce a un Zaragoza al que lleva dirigiendo desde 2008. A pesar de todos los cambios y renovaciones que se han llevado a cambio en la entidad, la dirección no ha cambiado y con muy buenos éxitos.
Algunas temporadas sufrió por no tener el equipo tan competitivo que deseaba pero en las últimas campañas la plantilla va a más y su experiencia puede ser clave para llevar al equipo a buen puerto. Mucha dedicación y tiempo son las claves.
Un club de lucha constante durante toda su historia
Ríos Renovables Zaragoza ha sido un ejemplo de lucha y de reponerse de los palos que puede dar este deporte. Arrancó como un club amateur pero que pronto empezó a competir en el sistema de la LNFS. En el 95 logró ascender a la categoría de plata pero los recursos económicos fueron insuficientes y tuvo que renunciar. Un año después lo logró y en 1998 ascendió a la máxima categoría. Tras dos años en la élite consumó el descenso en una intensa fase de permanencia ante el Barcelona, aunque en la siguiente temporada subió de nuevo. En los años siguientes tuvo grandes actuaciones jugando el Play-Off por el título, pero sufrió una crisis que le llevó a descender en el 2007. Al año siguiente subieron de nuevo y hasta el día de hoy han competido en la Primera División. Se ha consolidado pero ahora quiere volver a estar entre los mejores.