Antes de afrontar una nueva temporada y después de la marcha de Luis Enrique del banquillo culé, en Can Barça se abrían las puertas para recibir a Ernesto Valverde como nuevo técnico.

Después de que muchos entrenadores sonaran para reemplazar al asturiano, los rumores cobraron vida en la figura del técnico cacereño, que llegaba del Athletic Club a aportar una nueva seña de identidad en el Camp Nou con ganas de afrontar su segunda temporada en el club después de haber vestido la elástica blaugrana entre 1988 y 1990.

El técnico extremeño dejaba huella en la tierra de 'los leones' después de haber dirigido a los vascos durante cuatro temporadas y aterrizaba en tierras barcelonesas para afrontar un reto después de haber pasado por algunos equipos como lo fueron el Espanyol, el Olympiacos, el Valencia o el Villarreal.

Ernesto Valverde en la rueda de prensa de su presentación | Foto de Gerard Franco, VAVEL
Ernesto Valverde en la rueda de prensa de su presentación | Foto de Gerard Franco, VAVEL

El fichaje del técnico extremeño se sumaba a los de Nélson Semedo y Paulinho, que llegaban en la ventana de verano del mercado de fichajes para comenzar un nuevo proyecto lejos del Benfica y del Guangzhou Evergrande respectivamente.

Nélson Semedo, el primer refuerzo de la era de Valverde | Foto de Óscar Yeste, VAVEL
Nélson Semedo, el primer refuerzo de la era de Valverde | Foto de Óscar Yeste, VAVEL
Paulinho, el segundo refuerzo de la era de Valverde | Foto de Ernesto Aradilla, VAVEL
Paulinho, el segundo refuerzo de la era de Valverde | Foto de Ernesto Aradilla, VAVEL

El balón comenzaba a rodar pronto para los azulgranas. De cara a una nueva temporada y después de conseguir alzarse con la Copa del Rey contra el Alavés, los jugadores volvían a los entrenamientos el 12 de julio con el objetivo de pulir los últimos detalles para preparar la gira americana que llevaron a cabo del 19 al 30 de julio. 
Habiendo jugado contra la Juventus, el Manchester United y el Real Madrid, la máquina culé aterrizaba engrasada en tierras barcelonesas para afrontar el Trofeo Joan Gamper, el primer duelo en el que con una nueva seña de identidad, un título estaba en juego.

Ernesto Valverde en la presentación de la plantilla llevada a cabo en el Trofeo Joan Gamper | Foto de Ernesto Aradilla, VAVEL
Ernesto Valverde en la presentación de la plantilla llevada a cabo en el Trofeo Joan Gamper | Foto de Ernesto Aradilla, VAVEL

Entonces se ponía todo a punto para vivir la fiesta del Gamper. Los jugadores del primer equipo y Adrián Ortolá y Carles Aleñá, jugadores inmersos en la dinámica del filial, pisaban el césped de la Ciutat Esportiva Joan Gamper para entrenarse por primera vez bajo las órdenes de Ernesto Valverde de cara a vivir una semana trepidante.

Llegaba el momento de afrontar los primeros duelos y el estilo y planteamiento del cacereño ya se hacían notar entre las cuatro paredes del feudo culé.

La 52ª edición del Trofeo Joan Gamper

Tiempo antes de disputar el primer duelo en el que el primer trofeo estaba en juego, el club confirmaba la fecha del estreno del primer equipo en el Camp Nou, en el que es el tradicional torneo de verano, que este año tuvo como invitado al Chapecoense, el equipo brasileño que en el mes de noviembre del año pasado sufrió un grave accidente aéreo. La previa del duelo se convirtió en los prolegómenos de una noche emotiva por el hecho de que el único superviviente de la tragedia, Alan Ruschel, volvería a los terrenos de juego por primera vez.

Con André Gomes y Thomas Vermaelen fuera de la convocatoria por lesión y habiendo cerrado los amistosos de la pretemporada con triunfo, la noche del Gamper comenzaba con un homenaje al equipo brasileño minutos antes de que rodara el balón en el feudo culé. Los azulgranas cerraban una noche de emotividad y fútbol con un 5-0 en el marcador gracias a los goles de gracias a los goles de Gerard Deulofeu, Sergio Busquets, Leo Messi, Luis Suárez y Denis Suárez y ya miraban hacia el primer partido oficial que tenían apuntado en el calendario: la ida de la Supercopa de España.

El Trofeo Joan Gamper más emotivo | Foto de Ernesto Aradilla, VAVEL
El Trofeo Joan Gamper más emotivo | Foto de Ernesto Aradilla, VAVEL

El primer partido oficial de la temporada

En Can Barça, ya con Ernesto Valverde al frente e inmerso en la dinámica culé, se afrontaba el primer partido oficial de la temporada: la ida de la Supercopa de España.
Ese duelo marcó un antes y un después en la temporada. En el partido de ida, al Fútbol Club Barcelona se le escapó la victoria y el primer título al que aspiraba. Con los goles de Cristiano Ronaldo y Marco Asensio, los madridistas se llevaban la victoria al Santiago Bernabéu, donde días más tarde, en el partido de vuelta, dictaría sentencia con otras dos dianas, anulando las posibilidades de remontada del rival.

La Supercopa de España marcó un antes y un después en la temporada | Foto de Álex Gallardo, VAVEL
La Supercopa de España marcó un antes y un después en la temporada | Foto de Álex Gallardo, VAVEL

Un fichaje con futuro para recobrar la ilusión

Después de que Neymar abandonara la disciplina culé para poner rumbo al Parc des Princes, el club hacía un fichaje de futuro para reemplazar la vacante que quedaba en la zona de ataque. Ousmane Dembélé llegaba al Camp Nou procedente del Signal Iduna Park, pasando de vestir de amarillo a azulgrana, firmando para las próximas cinco temporadas y con ganas de afrontar los mejores partidos para demostrar su desequilibrio, su polivalencia y su velocidad.

Ousmane Dembélé en su presentación | Foto de Miguel López Mallach, VAVEL
Ousmane Dembélé en su presentación | Foto de Miguel López Mallach, VAVEL

A pesar del infortunio que se le presentó con su lesión, el extremo francés ha sabido reaccionar con buenas dosis de fútbol en algunos partidos y su adaptación en el feudo culé parece ir viento en popa mirando hacia la próxima temporada y con la oportunidad de coger rodaje en Rusia, donde yendo convocado por Didier Deschamps para representar a los galos en la próxima cita mundialista, espera recobrar la ilusión y el fútbol que otros jugadores como Rivaldo, Overmars, Zambrotta, Bojan Krkić, Jeffren, Thiago y Neymar han podido regalar al barcelonismo con el dorsal 11 a sus espaldas.

La primera despedida

En Can Barça, esta temporada ha estado marcada por la emotividad, plasmada en las distintas despedidas que se han llevado a cabo, en la que algunos jugadores del primer equipo han dicho adiós de cara a afrontar nuevos retos de menos exigencia.

El primero en hacerlo era Javier Mascherano. El jugador argentino se despedía del club después de haber vestido la elástica blaugrana durante ocho temporadas.

Javier Mascherano en el acto de su despedida institucional como culé | VAVEL
Javier Mascherano en el acto de su despedida institucional como culé | VAVEL

Recibiendo una despedida institucional por parte del conjunto azulgrana en el Auditorio 1899, Josep Maria Bartomeu y toda la plantilla del primer equipo le decían adiós al compromiso personificado horas antes de hacerlo en el feudo culé en los prolegómenos del partido de Copa del Rey que disputaron contra el Espanyol.

Javier Mascherano se marchaba de la dinámica culé después de haber estado durante siete años y medio levantando títulos. El argentino, que fue presentado el 30 de agosto de 2010, ha sumado dieciocho títulos como culé y bajo el apodo de 'Jefecito', habiendo disputado 334 partidos en total y habiendo jugado bajo las órdenes de entrenadores como Pep Guardiola, Tito Vilanova, Tata Martino, Luis Enrique y Ernesto Valverde, asumiendo el rol de los cinco técnicos que han visto en Mascherano una mezcla de pasión y táctica desde su debut.
El argentino cerraba su etapa en el club y se sumía en un nuevo reto de menor exigencia: pasaba a formar parte de la plantilla del Hebei China Fortune.

Despedida institucional de Mascherano en el Auditorio 1899 | VAVEL
Despedida institucional de Mascherano en el Auditorio 1899 | VAVEL

Los fichajes en el mercado de invierno

Llegaba la ventana de invierno en el mercado de fichajes y con ella, el fin de la incertidumbre para algunos. El crack brasileño, Philippe Coutinho, llegaba a Can Barça después de hacer todo lo posible por incorporarse a la dinámica culé y a la plantilla dirigida por Ernesto Valverde, firmando un contrato ilusionante después de que su compratiota, Neymar, abandonara el barco blaugrana para poner rumbo a tierras francófonas.

Philippe Coutinho en el día de su presentación como nuevo jugador azulgrana | Foto de Noelia Déniz, VAVEL
Philippe Coutinho en el día de su presentación como nuevo jugador azulgrana | Foto de Noelia Déniz, VAVEL

Al feudo culé llegaba el futuro y el talento personificado a la vez para reforzar la plantilla de cara a los mejores y más exigentes duelos, con el título póstumo de 'La perla' y afrontando el reto de ser el sustituto perfecto de Andrés Iniesta, con ganas de crear y dar juego, meter goles y recobrar la calidad futbolística que ya demostró en Anfield bajo las órdenes de Jürgen Klopp.

Con polivalencia de por medio, Philippe Coutinho ha organizado el juego del equipo con su técnica y visión, aportando una marcha más de velocidad y aportando un cambio de ritmo, siendo decisivo en el once inicial azulgrana de cara a desequilibrar las defensas rivales en los retos más exigentes.

Pero la ventana de invierno no se cerraba en el feudo culé y Yerry Mina llegaba como segundo refuerzo al equipo de Ernesto Valverde. El club y la Sociedade Esportiva Palmeiras llegaban a un acuerdo para el traspaso del defensa colombiano, que llegaba al Camp Nou para firmar un contrato de cinco temporadas y con el objetivo de ganarse un puesto en la zaga culé para demostrar corpulencia y altura.

Yerry Mina, un refuerzo para la zaga defensiva culé | Foto de Jordi Valle, VAVEL
Yerry Mina, un refuerzo para la zaga defensiva culé | Foto de Jordi Valle, VAVEL

Tiempo de debacle

Antes de caer en la máxima competición continental, los azulgranas daban un paso firme en territorio europeo, imponiéndose a la Associazione Sportiva Roma en el partido de ida de los cuartos de final con goleada incluida. Con las dianas en propia puerta de Daniele De Rossi y Kōnstantinos Manōlas, los de Ernesto Valverde partían con ventaja en una eliminatoria en el que el 'Arrivederci, Roma' se escuchaba como un reto que superar para seguir prorrogando la buena racha. Pero no fue posible. En el partido de ida, los italianos marcaban un gol que hacía justicia al juego mostrado en el campo, con los locales bajando la intensidad del partido y los italianos peleando sin descanso.

Una Roma crecida resucitó de su caída en el Camp Nou | Foto de Noelia Déniz, VAVEL
Una Roma crecida resucitó de su caída en el Camp Nou | Foto de Noelia Déniz, VAVEL

La soberbia del conjunto romanista fue el prolegómeno de una caída anunciada. Con las dianas de Edin Džeko, Daniele De Rossi de penalti y Kōnstantinos Manōlas, los de Eusebio Di Francesco privaron a los culés de presentarse en las semifinales, quienes intentaron hasta el final batir a Alisson Becker sin suerte.

Una caída anticipada en el Olímpico de Roma | Foto de Noelia Déniz, VAVEL
Una caída anticipada en el Olímpico de Roma | Foto de Noelia Déniz, VAVEL

Reinado culé

Después de caer en Europa, los azulgranas estrechaban el camino de los títulos y se centraban en la Copa del Rey y en el alirón en la competición liguera.
La caída en Roma fue el prolegómeno de un levantamiento anunciado. La reacción fue de admirar y el primer fallo de la temporada servía para mostrar soberbia en el tramo final y más decisivo. Así lo demostraron los hombres de Ernesto Valverde consiguieron un nuevo récord: después de 114 ediciones de Copa del Rey, por primera vez en la historia, un mismo equipo disputaría cinco finales en cinco ediciones seguidas.
Los azulgranas continuaron batiendo récords históricos y después de superar al Valencia en las semifinales con un resultado global bastante holgado, accedieron a una nueva final, en la que consiguieron un hito y una goleada a la vez, alzándose con el título de campeón ante el Sevilla y reinando a sus anchas.

Andrés Iniesta levantando la 30ª Copa del Rey hacia el cielo de Madrid | Foto de Daniel Nieto, VAVEL
Andrés Iniesta levantando la 30ª Copa del Rey hacia el cielo de Madrid | Foto de Daniel Nieto, VAVEL

El capitán del barco azulgrana, Andrés Iniesta, y también goleador, era el encargado de levantar la 30ª hacia el cielo de Madrid, donde se vivió una noche de espectáculo con los también goles de Luis Suárez, que abrió el marcador y transformó la superioridad culé sobre el terreno de juego, Jordi Alba y Leo Messi.

El Fútbol Club Barcelona sigue reinando a sus anchas | Foto de Daniel Nieto, VAVEL
El Fútbol Club Barcelona sigue reinando a sus anchas | Foto de Daniel Nieto, VAVEL

Un alirón como premio a la regularidad y a la perseverancia

Los azulgranas se alzaban con el primer título de la temporada en Riazor. El alirón en la competición liguera llegaba en un duelo correspondiente a la jornada 35, en el que gracias a los goles de Leo Messi y Philippe Coutinho, la regularidad era premiada con el 25º título liguero de la historia culé, prorrogando la racha de imbatibilidad que habían logrado mantener durante toda la temporada sin haber conocido todavía la derrota y despidiendo de la categoría de plata al Deportivo de La Coruña.

La rúa de los campeones

Los azulgranas tildaron de emoción todas las calles de Barcelona. Con dos títulos bajo el brazo, los de Ernesto Valverde compartían con su afición los resultados y triunfos cosechados a lo largo de la temporada, levantados por el capitán, siempre recordado, Andrés Iniesta.

Los aficionados celebrando los éxitos culés en las calles de Barcelona | Foto de Noelia Déniz, VAVEL
Los aficionados celebrando los éxitos culés en las calles de Barcelona | Foto de Noelia Déniz, VAVEL

El recorrido del autobús se iniciaba a partir de las 18:00 horas en el World Trade Center y terminaba en la Plaza del Doctor Ignasi Barraquer.

Durante el recorrido que el equipo hizo por las calles de la ciudad, hubo además tres puntos de animación preparados con banderas, confeti, música ambiente y pantallas led que, sin duda, animaron la fiesta en la que poco tiempo después, los campeones también fueron protagonistas.

Andrés Iniesta en su última rúa como campeón y capitán | Foto de Noelia Déniz, VAVEL
Andrés Iniesta en su última rúa como campeón y capitán | Foto de Noelia Déniz, VAVEL

Fin a la imbatibilidad

Después del festival de goles que se vivió en el Estadio Ciutat de València, el Levante y el Fútbol Club Barcelona protagonizaban un espectáculo de fútbol en tierras valencianas. Después de haber mantenido un récord de imbatibilidad en cuarenta y tres jornadas, los de Ernesto Valverde caían ante los de Paco López con un 5-4 en el marcador y sin poder prorrogar la buena racha hasta el final de la temporada.

Los jugadores que más minutos han disputado de estos cuarenta y tres encuentros han sido Leo Messi y Marc-André ter Stegen, con un total de cuarenta y dos partidos.

Respecto a las estadísticas goleadoras y a los asistentes, Leo Messi ha realizado cuarenta y cuatro goles de todos los anotados y además, ha firmado catorce asistencias. Por detrás le sigue su compañero en ataque, Luis Suárez, que con veintinueve goles y doce asistencias, ha asumido el rol de la efectividad de cara a portería en muchos partidos.
Por último y en tercer lugar, Iván Rakitić ha anotado tres goles y ha dado nueve asistencias.

Además, como broche a una gran temporada, el conjunto azulgrana acumula treinta y seis partidos seguidos sin perder en el Camp Nou en el campeonato liguero, firmando la mejor racha culé del siglo XXI.

La despedida más emotiva

Llegaba el momento de decir adiós. La despedida más emotiva cobraba vida entre las cuatro paredes del feudo culé. Con el Camp Nou y el #Infinit8Iniesta de fondo, la magia personificada recibía un homenaje por parte del club azulgrana, que le hizo una despedida en un acto institucional, en el que los jugadores del primer equipo, su familia, algunos invitados y una amplia representación de la directiva, encabezada por Josep María Bartomeu, le acompañaron un día antes de jugar su último partido con la elástica blaugrana. Una leyenda viva se marchaba dejando huella en el equipo en el que ha estado veintidós años y en el fútbol español y lo hacía por la puerta grande en un acto en el que todos le dieron las "gracias infinitas”.

Una despedida a la altura de un gran capitán | Foto de Noelia Déniz, VAVEL
Una despedida a la altura de un gran capitán | Foto de Noelia Déniz, VAVEL
El acto de despedida de Andrés Iniesta | Foto de Noelia Déniz, VAVEL
El acto de despedida de Andrés Iniesta | Foto de Noelia Déniz, VAVEL

Andrés Iniesta vivía uno de sus últimos homenajes antes de poner un pie fuera de Can Barça y después de haber jugado con la elástica blaugrana durante veintidós años y haber representado como capitán los colores azulgranas en todos y cada uno de los estadios por los que ha pisado y en donde ha transmitido sus valores y regalado espectáculo con la magia que siempre demuestra tener en sus botas, ganándose más de una ovación.

Despedida y homenaje del Camp Nou a Andrés Iniesta | Foto de Noelia Déniz, VAVEL
Despedida y homenaje del Camp Nou a Andrés Iniesta | Foto de Noelia Déniz, VAVEL

Pero los homenajes al compromiso personificado no se terminaban ahí. El Fútbol Club Barcelona disfrutaba del doblete en el último partido de la temporada.

El Camp Nou enmudecía y comenzaba a brillar para rendirle un homenaje como el que se merecía el legado que dejaba en Can Barça después de veintidós años vistiendo la elástica blaugrana. La emoción tildaba las gradas del feudo culé, preparado para decirle adiós para siempre a su mejor estrella y con otro tifo, la blaugrana lucía con el ocho tumbado de fondo enfrente de un pasillo por el que salieron los jugadores del primer equipo para levantar el 25º título liguero y el 30º título conseguido en la Copa del Rey. Se cerraba un ciclo dorado en Can Barça y la leyenda se reafirmaba sobre el césped

Fin a una etapa dorada | Foto de Noelia Déniz, VAVEL
Fin a una etapa dorada | Foto de Noelia Déniz, VAVEL